El 41º Congreso Federal del PSOE, el agendado para el 29 y 30 de noviembre y 1 de diciembre en Sevilla, se está complicando más de lo previsto para Pedro Sánchez. Ya desde el primer minuto no se diseñó con la intención de que calcara el patrón del cónclave anterior, el número 40, el que se celebró en octubre de 2021 en Valencia y en el que el presidente quería proyectar una imagen de unidad completa justo en la salida de la pandemia y en un momento dulce, cuando la mayor parte del poder territorial estaba en manos del partido. El tsunami de las autonómicas y municipales de 2023 desnudó al PSOE y debilitó sus estructuras regionales, el eslabón que más está ahora mismo en el aire. Es la renovación de las federaciones lo que está generando irreversiblemente más tensión interna, pese al llamamiento de Ferraz a hacer del cónclave de Sevilla el "congreso de las ideas" y a aparcar todas las disputas territoriales.

Cuando la llama de Castilla y León no se había apagado, se encendió este miércoles otra, la de Madrid. La tercera federación en militantes, tras Andalucía y Comunitat Valenciana. Su secretario general, Juan Lobato, se alineó de forma inequívoca con su compañero castellanoleonés, Luis Tudanca. Se solidarizó con él. Un gesto que no podía pasar desapercibido después de que Ferraz frenara en seco el intento de Tudanca de convocar las primarias para elegir al líder regional antes del 41º Congreso. Lobato le agradeció que haya "abierto el debate sobre la forma en la que se trabaja en el partido" y las "filtraciones y fuentes" que buscan "socavar legitimidades". "Nos ha pasado a todos. Nos ha pasado a todos en los ámbitos autonómicos, en los ámbitos municipales y yo creo que hacer una reflexión colectiva sobre lo que sufren los militantes por culpa de estas actitudes, de estas filtraciones de entornos, fuentes siempre anónimas y escondidas, yo creo que esta reflexión colectiva merece la pena hacerla y aprender todos", planteó el jefe de los socialistas madrileños en una entrevista en Europa Press.

Nos ha pasado a todos. Yo creo que hacer una reflexión colectiva sobre lo que sufren los militantes por culpa de estas actitudes, de estas filtraciones de entornos, fuentes siempre anónimas y escondidas", asevera el secretario general del PSOE-M

Unas palabras que repitió también en Más de uno, en Onda Cero. Lobato estaba señalando hacia el mismo punto al que dos días antes había dirigido la atención Tudanca. El líder castellanoleonés se quejó en una entrevista en El País de que "el entorno" del secretario federal de Organización, Santos Cerdán, habían estado "lanzando nombres, filtraciones, candidatos" desde hace un año, "generando ruido y desestabilizando a la federación". Y 24 horas horas después añadía en Onda Cero que había "intentado mil veces arreglar en privado" las diferencias con la cúpula de Sánchez, "por las buenas", y no encontró más que "esta respuesta", las "filtraciones".

El secretario general del PSOE-M no dio nombres ni señaló círculos —desconoce "quién es la gente que se dedica a esto"—, pero sí agregó que comprende lo planteado por Tudanca sobre la "necesidad de que en los partidos políticos" se trabaje de forma "un poquito más solidaria, leal y constructiva en los territorios". "Lo vemos a diario y desde el minuto uno. Eligen a un secretario general y al día siguiente ya hay 'fuentes', 'entornos del partido'... Dejen a la gente trabajar", clamó. Más aún: "Entiendo perfectamente a Tudanca cuando lo plantea, me solidarizo con él y con todos los militantes que lo vienen sufriendo", verbalizó ante el periodista Carlos Alsina.

Lobato era de la opinión que tener los liderazgos autonómicos "resueltos" antes del congreso federal era un "buen esquema", como ocurrió en 2021

Pero Lobato hizo otro gesto de cercanía con el secretario castellanoleonés: confesó que barajaba convocar las primarias en Madrid antes del 41º Congreso de Sevilla, como intentó Tudanca. Defendió que se trataba de un "buen esquema" dejar los liderazgos autonómicos "resueltos" antes de la convocatoria federal. Pero al tener "otro criterio" la comisión federal de ética y garantías, que impuso que las primarias han de celebrarse también tras el 41º Congreso de Sevilla, entonces los socialistas madrileños tendrán que "hacerlo después". "Casi todo lo que ha dicho" Tudanca, aseguró, "es de cajón de madera de pino y muy de sentido común".

Ferraz sí confirma que unas "pocas" federaciones socialistas solicitaron que sus primarias tuvieran lugar antes de la cita en la capital andaluza, pero acataron el no de la cúpula sin problemas.

Qué ocurrió hace tres años

El jefe de los socialistas castellanoleoneses adujo que hace tres años, en 2021, él fue reelegido líder un mes antes de la cita federal de Valencia. Hace tres años "ya se hizo" de la manera que planteó Tudanca y "replicarlo" le parecía una buena idea. De hecho, el proceso de renovación en el PSOE-M comenzó antes del 40º Congreso. Él y su rival, Javier Ayala, alcalde de Fuenlabrada, fueron proclamados candidatos el 5 de octubre de 2021, 10 días antes de que arrancara la convocatoria de Valencia. Las primarias tuvieron lugar una semana después, el 23 de octubre, y las ganó Lobato por el 61,23%. El cónclave regional tuvo lugar el 13 y 14 de noviembre.

Tras los cinco días de reflexión del presidente, se reactivaron los contactos entre varias federaciones, relaciones que se han intensificado en los últimos meses. El malestar apunta Organización

Lobato es, igual que Tudanca, uno de los barones que seguramente se encuentre con un rival enfrente y más afín a Ferraz. Precisamente Ayala vuelve a sonar como opción para liderar el PSOE-M, y también el delegado del Gobierno en Madrid, Fran Martín, o la concejala en la capital Enma López, también miembro del comité organizador del 41º Congreso y valor emergente del partido. En el caso del líder del partido en Castilla y León, las alternativas que circulan son las de los vallisoletanos Javier Izquierdo, senador y miembro de la ejecutiva federal de Sánchez, y Ana Redondo, ministra de Igualdad —en su entorno indican que está "feliz" en el Gobierno y no querría abandonarlo—, además de Carlos Martínez, alcalde de Soria y poseedor de una codiciada cuarta mayoría absoluta. Pero nadie ha dado el paso.

Las declaraciones de Lobato se suman a las de Tudanca y, con ellos orbitan otros barones consultados por este diario. No es un alineamiento extraordinario porque, sobre todo tras los cinco días de reflexión que el presidente se dio en abril, se reactivaron los contactos entre varias federaciones, relaciones que se han intensificado en los últimos meses. Y denotan un malestar que se está extendiendo en parte del partido hacia la planta quinta de Ferraz, en la que trabaja el aparato, la poderosa Secretaría de Organización que pilota Cerdán.

Fuentes próximas a Lobato no niegan que sus palabras pueden ser vistas como la evidencia de que el conflicto interno escala. Que sube un peldaño. Porque prueba que la crisis no se limita a un territorio, sino que se expande. Pero a su vez añaden que su propósito es "rebajar el tono", y que por eso no señaló abiertamente a Cerdán y a su entorno, a diferencia de lo que hizo Tudanca, porque quiso poner el acento en el hecho, en las "filtraciones", en el lanzamiento de nombres contra los barones, con el fin de que Ferraz tome nota y ayude a construir un clima más amigable y "respetuoso y comunicativo". "Da pie para que puedan salir del agujero de una manera pacífica. Ojalá lo hagan. Creemos que será así", esgrimen.

En Ferraz señalan que se ha "cerrado el calendario congresual" del PSOE-M de manera "consensuada" con Lobato. "No hay tema. Nadie quiere quitar la voz a la militancia", añaden en el comité organizador

En la cúpula federal prefieren guardar prudencia. Indican, como prueba de que las relaciones son fluidas, que ya se ha "cerrado el calendario congresual" con el PSOE-M, de forma "consensuada" con Lobato. Algo que ratifican en la cúpula regional. Las fechas se reservan porque no han sido comunicadas aún a la dirección autonómica, pero todo apunta a que el cónclave madrileño tendrá lugar o el 25 y 26 de enero o el 1 y 2 de febrero. Desde el comité organizador del 41º Congreso prefieren "no alimentar la burbuja" que, a su juicio, están engordando algunos barones. "No hay tema. Hablan de dar la voz a la militancia, pero nadie se la quiere quitar", aseguran estas mismas fuentes, advirtiendo de que los secretarios generales que están sacando la cabeza, y otros que también recelan de Ferraz pueden no tener tanto control sobre sus bases como creen.

"No tenemos ni una fuga"

En Castilla y León, la dirección autonómica está segura de que su militancia responderá a favor de Tudanca, a quien el frenazo en seco de la comisión de garantías ha ayudado por su "victimización". "No tenemos ni una fuga, el problema es de ellos, no tienen ni idea de lo que se está viviendo aquí", advierten. En Ferraz, sin embargo, enfrían esos números, porque el dirigente tiene a la contra León y Valladolid, las provincias con más afiliados y cuyos líderes, el diputado Javier Alfonso Cendón y el ministro Óscar Puente, se sitúan en la trinchera contraria. En el cuartel general de los socialistas entienden que la reacción de Tudanca ha sido "desproporcionada" porque "no se ha anulado nada", solo se han pospuesto las primarias. Niegan que haya movimientos para moverle la silla, para desbancarle, porque "filtraciones" e informaciones a la contra las padecen "todos los dirigentes, también en Ferraz". El líder de la federación se quejaba también de que ni Sánchez ni Cerdán habían hablado con él desde la paralización de las votaciones. "No tiene que hablar con Santos, tiene que hablar con sus provincias", aconsejan.

En el entorno de Lobato alegan que quieren que Ferraz tome nota y construya un clima más amigable. Los contrarios al líder del PSOE-M le reprochan que "no calle", sus palabras "extrañas e innecesarias"

En el PSOE-M, las declaraciones de Lobato se sintieron como la lluvia que cae sobre mojado. "Parece que no sabe callar", lamenta un veterano que conoce como la palma de su mano la federación. "Hay extrañeza. No se entienden bien estas palabras ahora. Y este cierre de filas con Tudanca. Es extraño e innecesario. Pero sí, demuestran que el 41º Congreso va a ser más movido de lo esperado", apunta un parlamentario autonómico. En público, quien se manifestó fue Fran Martín, en sintonía plena con la cúpula federal, como cabía esperar: "Ferraz ha clarificado de una manera adecuada, como correspondía, cuál es el orden de los procesos", primero el congreso federal y después los regionales y locales. "Creo que no hay lugar a mayores conflictos al respecto", señaló a los periodistas, informa EFE.

La ministra de Igualdad, Ana Redondo, y el secretario general del PSOE en Castilla y León, Luis Tudanca, el pasado 3 de mayo de 2024 en un acto de partido en Salamanca. | EUROPA PRESS / MANUEL LAYA

El malestar en el PSOE va tomando cuerpo. Y Lobato no es el único que se alinea con Tudanca. En federaciones como Extremadura, que dirige desde marzo Miguel Ángel Gallardo —cuestionado también por Ferraz—, muestran también su "solidaridad" y "apoyo" hacia el secretario general de Castilla y León. Quedan menos de dos meses para el 41º Congreso, y la paz anhelada por Sánchez no se acaba de materializar.