La Fundación Alternativas acaba de publicar su informe sobre el estado de la cultura de 2024. Este año han decidido valorar "los principales desafíos" que se presentan a nivel nacional y lo han hecho basándose en seis pilares fundamentales que van desde "el estado de la cultura como bien público esencial" a "la cultura en tiempos convulsos" pasando por cómo está afectando la IA al sector.

Dirigido por Diego López Garrido y con la colaboración de Jorge Fernández León, Juan Arturo Rubio Arostegui, Jesús Prieto de Pedro, Carlos Garriga, Nuria Lloret Romero, Javier Iturralde de Bracamonte y Patricia Corredor Lanas para los distintos capítulos; nos llevan a un análisis de cómo se encuentra el sector a través de distintas encuestas y baremos y es al final del mismo, en el capítulo de "la cultura en tiempos convulsos", donde aparecen las puntuaciones que reciben su estado y que, pese a la incertidumbre política, de la que alertaban ya desde el informe del año pasado, muestran que la confianza ha subido sensiblemente durante el 2024.

"La valoración de la cultura mejora y alcanza su máximo en la serie de Encuestas ICE. La consulta realizada entre los meses de mayo-junio de 2024 a un centenar de artistas, creadores, productores, editores, distribuidores, investigadores y críticos culturales, arroja una calificación general para el estado de la cultura en España de 5,4, un aprobado que mejora en una décima el resultado anterior y que vuelve a situarse como la mejor puntuación de la serie de Encuestas ICE, como ya sucedió el año pasado", explican en el informe.

"Los puntos débiles siguen acumulándose de forma insistente sobre: la remuneración de los creadores y de las pymes culturales, la proyección exterior de la cultura española y el apoyo de los medios de comunicación tradicionales"

Aunque no todas las cuestiones han conseguido ser contestadas con más de un 5. Tal y como aseguran, son trece preguntas las que aglutinan las "mejores notas" y todas se concentran en dos categorías: "los efectos y las potencialidades digitales para la cultura, y el pluralismo y la creatividad de la cultura hacia sus públicos, que en buena medida se pueden interpretar también como consecuencias explícitas o implícitas de la innovación tecnológica".

Y continúan explicando que "los puntos débiles siguen acumulándose de forma insistente sobre tres parámetros: la remuneración de los creadores y de las pymes culturales que garantice su sostenibilidad, la proyección exterior de la cultura española y el apoyo de los medios de comunicación tradicionales a la creación cultural y la promoción de la diversidad".

La cultura vista por esferas culturales

Y si analizamos el sector por esferas culturales, aseguran que pese a no haber grandes diferencias entre las valoraciones sí que se pueden estudiar una por una y sacar distintas conclusiones. Aquí, vuelven a la idea de que la creación es sin duda lo más valora del sector, seguida del uso y consumo de la cultura y que aunque "políticas públicas y estrategias comerciales" alcanza el 5, siendo una de las esferas más proclives a suspender, comentan que ha bajado desde el año pasado en dos décimas.

"El optimismo anterior expresado por los agentes culturales parece contenerse al llegar a la evaluación de la esfera de las políticas públicas, cuya puntuación retrocede dos décimas respecto al año anterior, aunque mantiene el aprobado. En un año electoral de gran inestabilidad política, con los presupuestos generales prorrogados y la consiguiente parálisis de muchos proyectos culturales, el empeoramiento de esta esfera empaña la estimación anterior que llevó a 'políticas públicas' a elevarse por encima de la barrera del aprobado (en un resultado inédito en la serie de encuestas ICE), tras leves ascensos desde 2019", aseguran.

"Sobresale negativamente el retroceso que los agentes culturales atribuyen a las injerencias del poder y su falta de respeto a la autonomía de la cultura, que castigan con un 4,4"

Y añaden que "sobre el total de las siete cuestiones que puntúan en esta esfera, sobresale negativamente el retroceso que los agentes culturales atribuyen a las injerencias del poder y su falta de respeto a la autonomía de la cultura, que castigan con un 4,4, medio punto menos que el año anterior (de 4,9 a 4,4), un aspecto que no puede desvincularse de la falta de complicidad y los ataques contra la cultura desde algunas instancias regionales y municipales a lo largo de este año".

Algo que parece hacer referencia a la censura de algunas obras de teatro por parte de Vox en determinados ayuntamientos y de algunas exposiciones que no se pudieron llevar a cabo en otros donde gobernaba el PP con el apoyo de la formación de Santiago Abascal; y cuyos datos han reflejado con el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, en la sala y siendo el protagonista de una de las mesas.

De los videojuegos a las artes escénicas

Y al analizar los sectores, llama la atención que sólo hay un suspenso y este es en artes escénicas, que se queda a tres décimas del aprobado. "En la estimación por sectores culturales, sobresale de forma especial videojuegos y multimedia, que ya en 2020 protagonizó el mayor ascenso hasta situarse en la primera posición de la tabla, y ha seguido acelerando su ritmo de crecimiento hasta alcanzar una puntuación de 6,7", añaden.

Entre una y la otra, nos encontramos con el cine y la producción audiovisual, con un 5,5, el sector de libros y bibliotecas que comparte un 5,4 junto a música e industria discográfica, y al que siguen creatividad publicitaria y diseño, con un 5,2 y artes visuales con un aprobado raspado.

Cultura e Inteligencia Artificial

Además de estas valoraciones, han dedicado dos capítulos a la IA. El primero bajo el título 'La protección de la propiedad intelectual ante la inteligencia artificial' y el segundo '(Re) pensando el presente y el futuro de la IA en los museos'. En ambos analizan cómo esta tecnología está modificando el sector aunque en el primero alertan sobre su uso inadecuado y en el segundo entran de lleno en su utilidad.

"En los últimos años, especialmente entre 2020 y 2024, hemos observado avances sustanciales en el desarrollo, regulación y percepción social de la IA. En 2021, el mercado global de la IA en los sectores cultural y creativo superó los 10 mil millones de euros, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 26,9% prevista entre 2022 y 2030", exponen.

"Durante la pandemia provocada por el COVID-19, los museos adoptaron numerosas iniciativas tecnológicas, lo que resultó en la aparición de nuevas generaciones de públicos"

Y cuentan cómo "las tecnologías emergentes están transformando la oferta cultural, creando nuevas experiencias que combinan lo físico y lo digital". "Durante la pandemia provocada por el COVID-19, los museos adoptaron numerosas iniciativas tecnológicas, lo que resultó en la aparición de nuevas generaciones de públicos con hábitos de consumo distintos a los visitantes tradicionales", añaden.

Además de analizar el boom y posible declive de las exposiciones inmersivas. Porque, aseguran que pese a que "según el barómetro de innovación en museos de 2021, menos del 20% de los museos a nivel global han implementado esta tecnología en áreas clave como la gestión de colecciones, la educación o las finanzas (...), el interés del público parece estar cambiando: las exposiciones inmersivas están ganando terreno frente a los tradicionales".

"Un claro ejemplo es la exposición Planets de teamLab13 en Tokio, que en 2023 atrajo a 2,4 millones de visitantes, generando ingresos comparables a los del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York o la Tate en Londres", comentan pero añaden que "algunos museos han evitado sumarse a esta tendencia, ya que suelen asociar estas experiencias con proyecciones digitales de obras clásicas por lo que este tipo de exposiciones inmersivas representaron solo el 29% de las exhibiciones registradas en 2023, y, según Barber y Szántó, su popularidad está en declive".