Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela y ministra de Petróleo, lo que la convierte en presidenta de Petróleos de Venezuela (PDVSA), atraviesa momentos críticos como miembro del círculo íntimo del dictador Nicolás Maduro.

La resurrección de Diosdado Cabello, nombrado ministro del Interior, Justicia y Paz de Venezuela en la remodelación del Gobierno que tuvo lugar el pasado 27 de agosto, no fue una buena noticia para Rodríguez. Cabello quiere todo el poder para él y está moviendo sus peones para desplazar a la, hasta ahora, mujer más poderosa de la República Bolivariana.

Cabello ha sido el responsable de la represión de las manifestaciones que se han producido en el país a raíz de las elecciones celebradas el 28 de julio pasado y que, según todos los indicios, ganó por amplio margen el candidato opositor, Edmundo González. A Cabello, número dos del Partido Socialista Unido de Venezuela, compañero de armas de Hugo Chávez, acusado por la DEA de formar parte del Cártel de los Soles, en busca y captura por el Departamento de Estado de EEUU desde 2020 por narcoterrorismo, no le tiembla el pulso.

Poco a poco va colocando a su gente. En la remodelación de la cúpula militar, el estamento clave para el mantenimiento de Maduro en el poder, que se produjo el pasado 15 de octubre, Cabello situó a cuatro de sus hombres en puestos de la máxima relevancia. Además, puso a su primo, Alexis Rodríguez Cabello, al frente del siniestro Servicio de Inteligencia venezolano (Sebin).

Diosdado Cabello, ministro de Interior, Justicia y Paz
Diosdado Cabello, ministro del Interior, Justicia y Paz de Venezuela y hombre fuerte de Maduro. | G.V.

En paralelo a esa ocupación de la cúpula de las Fuerzas Armadas y de los servicios secretos, maniobra para desgastar a su contrincante. Hace tan sólo unos días, el pasado 23 de octubre, Cabello ordenó la detención de Pedro Tellechea, ex presidente de PDVSA, y mano derecha de Delcy Rodríguez, acusándole de "traición" por presuntamente haber pasado información confidencial de la empresa petrolera a una compañía extranjera, cuyo nombre no ha mencionado, a cambio de dinero.

Diosdado Cabello quiere desbancar a la vicepresidenta, y utiliza internamente el escándalo de Ábalos y su relación con Aldama para desgastarla

Otro hombre cercano a Delcy Rodríguez, el magnate de los medios de comunicación Raúl Gorrín (dueño de Globovisión) fue acusado el pasado jueves por el Tribunal Federal de Florida de lavado de dinero para ocultar un desvío de fondos de PDVSA estimado en 1.200 millones de dólares. Una excusa para ponerle bajo sospecha dentro del propio régimen. A Maduro le da igual que EEUU impute a alguien de su clan por corrupción, pero a veces utiliza esos procesos para ajustar cuentas con quien quiere dejar caer.

El caso Koldo, y la revelación de una operación de venta de oro del Fondo de Desarrollo Nacional de Venezuela (Fonden), en la que intervino Víctor de Aldama, no le ha hecho ningún favor a la vicepresidenta. Con esa información, que se incluye en en informe Nº 211/2024 de la UCO, sale a la luz una de las vías de financiación más opacas del régimen de Maduro. No es que la operación se hiciera a espaldas del dictador, sino que tirando de ese hilo se puede llegar muy, muy lejos.

Otra mala noticia para Delcy Rodríguez ha sido el nombramiento de Alex Saab (al que se conoce como 'el testaferro de Maduro') como ministro de Industria. Saab, en la órbita de Cabello, le reprocha a la vicepresidenta no haber hecho todo lo que estuvo en su mano para lograr su liberación tras ser detenido en 2020 en Cabo Verde como consecuencia de una investigación llevada a cabo por el FBI. De allí fue llevado preso a EEUU. Finalmente, se benefició de un intercambio de prisioneros en 2023 entre Estados Unidos y Colombia (Saab es originario de Barranquilla). Luego regresó a Venezuela, donde ha hecho una inmensa fortuna a la sombra del chavismo.

El pulso de poder en el seno del Ejecutivo venezolano está a la orden del día. Uno de los datos que evidenciará quién lo ha ganado es el nombramiento del próximo Fiscal General, cargo que ahora ocupa Tarek William Saab El Tigre (no confundir con Alex Saab). William Saab puede perder su puesto a raíz de unas imprudentes declaraciones realizadas el pasado 10 de octubre en las que calificó al presidente brasileño, Lula da Silva, de ser "un agente de la CIA". El escándalo que se originó obligó al ministro de Exteriores, Yván Gil, a llamarle públicamente la atención, cosa poco habitual entre los gerifaltes venezolanos. ¿Quién se llevará el gato al agua? ¿Será el nuevo Fiscal General hombre de Delcy o de Cabello?

Maduro y Putin.
Nicolás Maduro y Vladimir Putin, en Kazán. | EUROPA PRESS

Las fuentes consultadas por El Independiente dan por vencedor al ministro del Interior, y vaticinan que los días de la vicepresidenta están contados. "Lo único que podría salvarla de una destitución fulminante es el papel que juega todavía su hermano, Jorge Rodríguez, como presidente de la Asamblea Nacional", añade una persona que conoce de cerca a los personajes. Antes de ser presidente de la Asamblea Nacional, cargo que ocupa desde 2021, Rodríguez fue ministro de Comunicación y todavía lo era cuando estalló el Delcygate. José Luis Ábalos se entrevistó con Rodríguez previamente a la llegada a Barajas de su hermana, según le confesó el ex ministro de Transportes al presidente Pedro Sánchez, como puede comprobarse en la captura de pantalla que consta en el citado informe de la UCO.

Delcy Rodríguez y Nicolás Maduro han coincidido el pasado día 24 en Kazán (Rusia), donde se ha celebrado la cumbre de los llamados BRICS. El presidente venezolano quería formar parte del club pero, finalmente, se ha tenido que conformar con ser un aspirante preferente. Aunque, eso sí, ha posado sonriente junto al presidente Putin. Probablemente, la todavía vicepresidenta haya tenido la oportunidad de medir la temperatura de su relación con la fuente máxima de poder de su país.

Pero, como ocurría en época de Stalin en la URSS, los miembros de su inner circle nunca podían estar seguros de su puesto y no se enteraban de su caída hasta que les visitaba el KGB.