La vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, se enfrenta a su examen final en Bruselas. Al menos, al último que realizará en solitario antes de que la Comisión Europea en su conjunto se someta a la aprobación de la Eurocámara si las audiencias de este martes salen adelante. Ribera tendrá que responder a las preguntas de hasta siete comisiones del Parlamento Europea sobre las que ejercerá competencias si se convierte en vicepresidenta y en comisaria del nuevo ejecutivo comunitario.

Ribera llega a la última prueba con el respaldo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quién la defendió este lunes de las acusaciones del Partido Popular que critican que la ministra para la Transición Ecológica eludió sus responsabilidades ante la DANA que azotó la Comunitat Valenciana hace ya dos semanas. “El mundo, Europa y España necesita más Teresas Riberas y necesita menos negacionistas del cambio climático", subrayó Sánchez en su comparecencia tras el Consejo de Ministros de este lunes.

También en relación a la DANA, la eurodiputada Dolors Montserrat (PP) desmintió a la ministra que aseguró que había mantenido una conversación con Montserrat el mismo día que tuvieron lugar las lluvias torrenciales. “Ella entraba en la Eurocámara y yo salía, y lo único que hubo fue un saludo fortuito de unos segundos de dos personas que se cruzan. Si miente en esto, imaginad en lo demás”, añadió la eurodiputada en un tuit.

El Partido Popular lleva meses cuestionando la candidatura de Ribera a convertirse en comisaria europea. Aunque la ministra pasó sin problemas la audiencia ante la Comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento Europeo, fuentes populares advertían que pondrían la lupa sobre los conflictos de intereses que pudieran derivarse del puesto como consejero en la Comisión Nacional del Mercado de Valores del marido de Ribera, Mariano Bacigalupo. Ahora, maniobran para que la gestión de la DANA también pase factura a la candidata a comisaria.

No obstante, el perfil de Ribera es clave para el nuevo ejecutivo de Von der Leyen. No solo por su currículum, experiencia e intereses profesionales, sino también porque es una de las pocas candidatas procedentes de un gobierno socialdemócrata y además, mujer. La alemana había pedido a los países miembros que enviaran dos opciones para convertirse en comisario, una mujer y un hombre, pero muchos países hicieron caso omiso y la próxima Comisión no tendrá la paridad. Además, con una Unión Europea donde las fuerzas conservadoras y de derechas tienen cada vez más representación, el ejecutivo comunitario busca mantener los equilibrios ideológicos.

“Nosotros planteamos que no sea comisaria. Pero no está en nuestra mano. Somos importantes en el PP europeo pero hay otros engranajes", comentan fuentes de Génova, haciendo referencia a esos equilibrios. “Si la tiran estaríamos contentos. Pero afectaría al bloque completo. Habría que empezar de nuevo”, añaden.

Tres horas de preguntas

La audiencia de Ribera empezará este martes a las 18:30h y se alargará hasta las 21:30h. La actual ministra del Gobierno de España realizará una intervención inicial de un máximo de quince minutos, tras la cual deberá responder a preguntas de los eurodiputados de las comisiones competentes en los ámbitos de la cartera para la que ha sido designada: Asuntos Económicos y Monetarios, Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria e Industria, Investigación y Energía. También tendrá que contestar a una cuestión de cada una de las siguientes comisiones parlamentarias, en calidad de invitadas: Mercado Interior y Protección de los Consumidores, Empleo y Asuntos Sociales, Transporte y Turismo, Desarrollo Regional y Agricultura y Desarrollo Rural.

Al finalizar las preguntas, los coordinadores de cada grupo político de las tres comisiones principales que le examinan para evaluar su desempeño se reunirán a puerta cerrada para tomar una decisión. Para salir adelante, necesita la luz verde de dos tercios de ellos. El resultado podría conocerse el miércoles, porque las audiencias al resto de candidatos habrán empezado a primera hora del martes.

Si Ribera no logra el visto bueno, podría tener que responder preguntas por escrito de los eurodiputados o someterse a una segunda audiencia. En un plazo de veinticuatro horas tras la evaluación, los coordinadores enviarán una carta de recomendación confidencial que será examinada por la Conferencia de Presidentes de Comisión y remitida después a la Conferencia de Presidentes. 

Además de Ribera, este martes también se enfrentan a las audiencias el italiano Raffaelle Fitto, la estonia Kaja Kallas -que aspira a ser alta representante para la Política Exterior de la UE-, seguida de la rumana Roxana Mînzatu (Personas, Habilidades y Preparación) y el francés Stéphane Séjourné (Prosperidad y Estrategia Industrial).

El desarrollo de la audiencia del italiano puede condicionar la de Ribera, puesto que en la primera son los socialdemócratas y los liberales los más críticos con la candidatura propuesta por el gobierno de Giorgia Meloni. 

Según EFE, diversas fuentes dejan en el aire la probabilidad de cada escenario: por un lado, no descartan que socialdemócratas o liberales acaben votando a favor de Fitto pese a su enfado con el rango de vicepresidente ejecutivo porque ambos grupos tienen mucho que perder arriesgando a Ribera, en el caso socialista, o a los dos vicepresidentes liberales.

Final del proceso

Una vez examinados todos los candidatos y candidatas al colegio de comisarios, la Conferencia de Presidentes del PE (que reúne a la presidenta Roberta Metsola y los líderes de los grupos políticos) debe dar por concluido el proceso de las audiencias, en principio, el 21 de noviembre –momento en el que se harán públicas las cartas de evaluación-.

Tras la conclusión de las audiencias, la presidenta electa de la Comisión, Ursula von der Leyen, presentará a su equipo y su programa en sesión plenaria, seguido de un debate con los eurodiputados. La Comisión en pleno necesita la aprobación del Parlamento, por mayoría de los votos emitidos, mediante votación nominal. La votación está prevista en la sesión plenaria de la última semana de noviembre en Estrasburgo.