España tiene actualmente 2.602.054 personas en situación de desempleo, según el último informe revelado por el Gobierno. Para esta situación, en nuestro país existe un sistema, el conocido popularmente como 'paro', que cubre a la persona sin trabajo con una serie de subsidios.
El objetivo del paro es cubrir la situación de desempleo de la persona durante la búsqueda de un nuevo trabajo. De esta manera, el Estado cubre y protege al ciudadano durante un período de vulnerabilidad.
Dependiendo de su situación personal y familiar (y su histórico laboral), podremos acceder a una ayuda u otra. La más común es que cuando una persona se queda en paro tenga la posibilidad de cobrar el subsidio por desempleo, pero del que hay que cumplir una serie de condiciones.
También, por su parte, es importante saber que un parado no puede cobrar este subsidio por un tiempo indefinido, ni mucho menos. Como tampoco recibirá la misma cantidad que otro en calidad de parado que haya cotizado menos años a la Seguridad Social.
Qué se debe cumplir para acceder al paro
Tal y como explican desde el SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal), podrán tener acceso a esta prestación contributiva aquellas personas que se hayan quedado sin trabajo por finalización de contrato, por haber sido despedidos o por haber sufrido una reducción de jornada y salario entre el 10 y el 70%. No obstante, también se deben cumplir cuatro requisitos fundamentales:
- Estar inscrito en la Seguridad Social en España, cotizando por desempleo.
- Haber cotizado un mínimo de 360 días en los 6 años anteriores a la situación de desempleo.
- Ser mayor de 16 años y no haber alcanzado aún la edad ordinaria de jubilación
- Estar inscrito como demandante de empleo en el servicio público de empleo, buscando empleo de forma activa y dispuesto a aceptar empleos adecuados para tener derecho a jubilación.
La cuantía de la prestación se calcula en función de la base reguladora (el promedio de las bases de cotización por desempleo de los últimos 180 días trabajados, excluida la retribución por horas extraordinarias).
Hasta un máximo de 720 días, la duración del paro depende de los periodos de ocupación cotizados a la Seguridad Social
Si está en situación de desempleo total, la prestación por desempleo le da derecho al 70% de la base reguladora en los primeros 180 días y al 50% de la base reguladora a partir del 181º día. La duración de la prestación, regulada en el artículo 269 de la Seguridad Social, depende del periodo de tiempo en que la persona ha pagado sus contribuciones durante los 6 años precedentes.
O lo que es lo mismo; a la hora de calcular la duración del paro se tienen en cuenta las cotizaciones por desempleo de los últimos 6 años que no hayan sido computadas para cobrar paro anteriormente. Los días de vacaciones que hayan sido pagados y no disfrutados se tendrán en cuenta en el cálculo.
De esta forma, según los datos del ministerio, estos son los días que tenemos derecho al paro según lo cotizado:
- De 360 a 539 días cotizados: 120 días de prestación.
- De 540 a 719 días cotizados: 180 días de prestación.
- De 720 a 899 días cotizados: 240 días de prestación.
- De 900 a 1079 días cotizados: 300 días de prestación.
- De 1080 a 1259 días cotizados: 360 días de prestación.
- De 1260 a 1439 días cotizados: 420 días de prestación.
- De 1440 a 1619 días cotizados: 480 días de prestación.
- De 1620 a 1799 días cotizados: 540 días de prestación.
- De 1800 a 1979 días cotizados: 600 días de prestación.
- De 1980 a 2159 días cotizados: 660 días de prestación.
- Desde 2.160 días cotizados: 720 días de prestación.
Según esto, lo mínimo obligatorio es una cotización de entre 360 (un año) y 539 días para poder cobrar el paro durante 120 días. En el otro extremo, el máximo de cotización está establecido a partir de 2.160 días (seis años), lo que permite disfrutar de esta prestación contributiva durante 720 días.
La cuantía varía en función de si hay hijos a cargo
Cabe destacar que el importe de la prestación de desempleo varía en función de si hay hijos a cargo y de cuántos sean, además del IPREM, cuya cifra depende de los Presupuestos Generales del Estado de este 2024.
Actualmente, la cantidad mínima es 560 euros al mes y la máxima es de 1.575 euros. La duración de la misma, como afirmábamos anteriormente, dependerá del tiempo cotizado. A más tiempo cotizado, más días de prestación le corresponderán al trabajador.
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