El canciller federal alemán, el socialdemócrata Olaf Scholz, ha conversado este viernes por teléfono con el presidente ruso, Vladimir Putin, por primera vez desde 2022. Scholz le ha urgido a poner fin a la guerra en Ucrania para que se inicien unas negociaciones serias con Kiev para lograr una paz "justa y duradera".

Scholz ha remarcado que "ninguno de los objetivos bélicos" de Rusia se había alcanzado. Putin pretendía derrocar al gobierno de Kiev e instalar un gobierno títere cuando ordenó lo que denominó "operación militar especial" para "desnazificar y desmilitarizar" Ucrania el 24 de febrero de 2022. Apenas tres días después, Scholz se dirigía al Bundestag para anunciar la Zeitenwende, un giro radical en la política de defensa de Berlín.

Este viernes, el canciller germano hizo en este sentido un llamamiento a Putin "para que ponga fin a la guerra de agresión contra Ucrania y retire las tropas", según fuentes gubernamentales alemanas consultadas por la agencia Efe. Putin se había anexionado Crimea en 2014, cuando también empezó una guerra en el Donbás contra el gobierno de Kiev, pero limitó las acciones a esa zona, donde apoyaba a los separatistas locales. A partir del 24 de febrero de 2024 la guerra fue total, pero su propósito de someter a Ucrania fue un fracaso. Los ucranianos resistieron y plantaron cara a las tropas rusas.

Scholz, que habló la última vez con Putin por teléfono en diciembre de 2022 y que el pasado miércoles también conversó con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, condenó de nuevo la guerra de agresión rusa, que lleva ya casi mil días causando muerte, sufrimiento y destrucción en Ucrania.

El canciller alemán condenó en particular los ataques aéreos contra infraestructuras civiles en Ucrania y subrayó que el despliegue de soldados norcoreanos en Rusia para misiones de combate contra territorio ucraniano está asociado a una grave escalada y expansión del conflicto.

Scholz, que en las últimas semanas había hablado de la posibilidad de conversar con Putin, subrayó ante éste asimismo la "inquebrantable determinación" de Alemania de apoyar a Ucrania en su lucha defensiva mientras sea necesario. Alemania celebra elecciones anticipadas del 23 de febrero de 2025.

El favorito para suceder a Scholz, el democristiano Friedrich Merz, también es un firme defensor de la ayuda a Ucrania. Quien más trabaja en favor de las tesis de Putin es la rojiparda Sahra Wagenknecht quien habla de paz en los mismos términos que el líder del Kremlin.

La versión del Kremlin

Desde Moscú la conversación se explica de otra forma. "La propuesta de Rusia es bien conocida (...) Los posibles acuerdos deben tener en cuenta los intereses de la Federación Rusia en materia de seguridad, partir de la realidad sobre el terreno y, lo más importante, erradicar las causas originarias del conflicto", señala el Kremlin en un comunicado.

En su primera conversación desde diciembre de 2022 Putin aludió a su intervención "en junio ante el Ministerio de Exteriores" en la que presentó sus nuevas condiciones para la paz, que fueron rechazadas de inmediato por Kiev. Putin vende como una oferta de paz que Ucrania se retire de su propio territorio, es decir, que renuncie a su soberanía sobre el Donbás y el sur del país. También que se olvide de entrar en la OTAN, como si Rusia pudiera decidir en nombre de Ucrania.

Al respecto, en la conversación de hoy Putin subrayó que "la parte rusa nunca renunció y sigue estando abierta a la reanudación de las negociaciones que fueron interrumpidas por Kiev", en alusión a las conversaciones de finales de marzo de 2022 en Estambul.

La nota oficial subraya que la charla entre ambos mandatarios fue "pormenorizada y franca". Y sigue Moscú con su retórica sobre la agresividad de la OTAN, cuando es Rusia la que invadió Ucrania. "Putin recordó que la actual crisis es resultado directo de la política agresiva durante muchos años de la OTAN, encaminada a crear en territorio ucraniano una plataforma antirrusa que ignoraba los intereses de nuestro país en el ámbito de la seguridad y pisoteaba los derechos de los rusoparlantes".

En su reciente intervención en el Club de Debate Valdái, Putin subrayó que el mayor problema entre Rusia y Europa es el "déficit de confianza". La confianza nunca se podrá restaurar si el Kremlin sigue falseando los hechos.

Putin se mostró dispuesto la pasada semana a mantener negociaciones con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien aseguró que se propone poner fin a la guerra en Ucrania e insinuó que suspenderá los suministros de armas a Kiev. Queda por saber cuál es el plan real de la Administración Trump, que asume el 20 de enero de 2025, para Ucrania. Si es una "paz justa", como le dijo Trump a Zelenski, no puede ser compensar a Putin tras iniciar una guerra que supone una violación de la soberanía de un país vecino.