La familia real noruega se enfrenta a un nuevo bache. La situación con Marius Borg Høiby, de 27 años, no hace más que empeorar. Fue detenido en agosto, acusado de malos tratos a la que era su pareja, y después las denuncias se multiplicaron. Fue detenido poco después por romper la orden de alejamiento. Hace solo unos días ingresó en un centro de rehabilitación en Reino Unido. Pero el lunes por la noche el primer hijo de Mette-Marit de Noruega ha sido arrestado de nuevo, por tercera vez, y los cargos empeoran gravemente. Una nueva víctima le acusa de violación.

Según publica el medio noruego Dagbladet, ese mismo lunes Marius tenía que viajar a Londres para iniciar su rehabilitación. A pesar de que ya el 10 de noviembre se dijo que Haakon de Noruega viajó con él a Reino Unido para dar comienzo a este proceso, se ve que el objeto de ese viaje era otro. En cualquier caso, el primer hijo de Mette-Marit estaba en Oslo, concretamente, en una zona cercana a la residencia real, cuando la policía le detuvo este lunes.

Vista exterior de la oficina de policía de Gronland, en Oslo, donde Marius Borg está detenido desde el lunes.
Vista exterior de la oficina de policía de Grønland, en Oslo, donde Marius Borg está detenido desde el lunes. | EFE

El caso empeora para Marius Borg

Y las condiciones del arresto no son ideales para Marius. Estaba en un coche junto a la "primera víctima". Es decir, la mujer que le denunció por violencia de género tras un altercado en su piso el pasado 4 de agosto. Precisamente la segunda vez que fue detenido fue por romper la orden de alejamiento que el juez había puesto en marcha para evitar que se acercara a ella. Según la abogada de la chica, Mette Yvonne Larsen, le tenía que prestar el coche porque él estaba planeando "un viaje inminente al extranjero".

Marius se encuentra actualmente detenido en una oficina de policía de Grønland, en el centro de Oslo, puesto que se investiga el un incidente ocurrido a principios de año. Una joven de 20 años habría sido víctima de una violación mientras estaba inconsciente o en condiciones que le impedían resistirse. Esta mujer no tendría nada que ver con los círculos del hijastro de Haakon de Noruega, pero la policía está investigando su caso desde el pasado 6 de noviembre.

Los cargos contra Marius

De esta manera, ahora hay cinco víctimas. La primera fue su exnovia, una mujer de 20 años que acusó a Marius de lesiones físicas y daños en su apartamento en aquel incidente del pasado 4 de agosto. También le acusa de abuso y de violar la orden de alejamiento, que incluye el contacto. Sus exnovias, Juliane Snekkestad y Nora Haukland, aseguran que era agresivo y que le tenían miedo. Hasta el punto de que la última ha asegurado lo siguiente en su pódcast: "Cuando lo dejé, le tenía mucho miedo. Pero en el fondo le tengo cariño y no importa lo que él me hizo. No importa cuantas veces me engañó y me mintió. No importa todo lo que me gritó y me asustó. Yo lo amaba y le he tenido mucho cariño. Lo siento mucho por él y por toda su familia".

Un hombre de 20 años acusa a Marius de haberle amenazado de muerte en un mensaje de Instagram, algo por lo que el hijo de Mette-Marit se ha declarado culpable. La joven que fue víctima de relaciones sexuales no deseadas mientras estaba inconsciente, que al parecer no ha sido quien ha iniciado el proceso, sino que ha sido la policía. Y finalmente una persona de la televisión noruega que le acusa de haber robado un scooter, aunque este ha sido desestimado.

¿Qué hace la Casa Real noruega?

Mientras todo esto ocurre en Oslo, el príncipe Haakon está de viaje oficial en Jamaica. La Casa Real no quiere comentar acerca de los nuevos acontecimientos. Así lo ha dejado claro en un comunicado en el que se remite a la policía y al abogado de Marius. "Høiby no se declara culpable tras la ampliación de los cargos. Colabora con la policía y quiere dar explicaciones", ha dejado claro el letrado, Øyvind Bratlien, en declaraciones a NRK.

"Marius se enfrenta a graves cargos. Hoy, por supuesto, pensamos en todos los afectados. Me hubiese gustado estar con Mette-Marit en casa, la echo de menos", ha asegurado por su parte Haakon de Noruega desde Jamaica. Ha añadido, además, que no les avisaron de la detención como si ocurrió en la primera ocasión.