Sin sorpresas. Y no podía haberlas. Pedro Sánchez solemnizó este lunes, pasadas las 9 de la mañana, el relevo de Teresa Ribera por quien hasta ahora era su mano derecha, Sara Aagesen, como nueva vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. El cese de una y el nombramiento de la otra ya estaba publicado en el BOE desde primera hora de la mañana y se sabía desde ayer que la promesa ante el Rey sería a las 9.30. Pero el presidente quería repetir una vez más su liturgia, y dedicarle unas palabras a la miembro de su equipo saliente y a la entrante. Y era importante en lo que afecta a Ribera, víctima del intento de boicot del PP, finalmente superado el pasado miércoles con su ratificación como nueva vicepresidenta de la Comisión Europea: ella ha superado "infundios y maniobras frente a los que ha terminado triunfando la verdad y la evidencia". De Aagesen destacó su línea continuista con su predecesora: el "rigor, profesionalidad y conocimiento experto" que permitirá proseguir con el "impresionante legado" de su predecesora. No habrá, por ahora al menos, más cambios en el Ejecutivo que este ajuste puntual. Nada más. Se cumple lo que él mismo ya avanzó a los periodistas en octubre. Todo a falta del 41º Congreso del PSOE, que arranca en Sevilla el próximo viernes.

Sánchez dedicó buena parte de su declaración institucional en la Moncloa a esa defensa de Ribera, que marcha hacia Bruselas —será votada, junto al resto del colegio de comisarios, por el pleno del Parlamento Europeo este miércoles, 27 de noviembre— después de seis años y medio a su lado, los últimos cuatro como vicepresidenta del Ejecutivo. Recordó que cuando ya entró en su Gobierno era una "referencia internacional en la lucha contra el cambio climático". Y en su tiempo en el Gabinete, recalcó, ha dado un "impulso" fundamental a la transición verde y la política climática, un empujón "sin precedentes" al desarrollo de las energías renovables, permitiendo que España recupere un liderazgo a nivel europeo que nunca debió "perder". También recordó que, gracias a la solución ibérica que ella ideó millones de familias y empresas vieron reducida su factura eléctrica, y que también deja leyes en su haber, como la de cambio climático, además de la protección de ecosistemas como el de Doñana, tras firmar un acuerdo con la Junta de Andalucía tras meses de choque.

Nuestra pérdida en España es la ganancia de toda Europa y sé con certeza, además, que Teresa Ribera será una extraordinaria, una excelente vicepresidenta primera de la Comisión Europea", remarca

El crecimiento de la economía española —cuatro veces por encima de la media europea, reseñó— y la reducción de los gases de efecto invernadero se explican, dijo, por la transformación del modelo económico que tiene en Ribera "una de sus señas de identidad". "Por eso sé que nuestra pérdida en España es la ganancia de toda Europa y sé con certeza, además, que Teresa Ribera será una extraordinaria, una excelente vicepresidenta primera de la Comisión Europea", encargada de la cartera de Transición Justa, Limpia y Competitiva y de la estratégica área de Competencia.

El PP español, de la mano del líder de los conservadores alemanes, Manfred Weber, logró retrasar una semana su ratificación por la Eurocámara. Unos días de demora que le valieron a Alberto Núñez Feijóo para desviar el foco sobre la responsabilidad del president valenciano, Carlos Mazón, en la gestión de la DANA, para intentar así descargar la presión en ella y en los organismos que dependían de su ministerio: la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ). Su confirmación se produjo el pasado miércoles, mientras ella intervenía en el Congreso para dar cuenta de su propia gestión del temporal, y en todo momento insistió en que su departamento no tiene competencias en alertas ni en Protección Civil, que nunca hubo "apagón informativo" y que tanto la Aemet como la CHJ actuaron siempre ofreciendo todos sus datos y bajo el "mando" de la autoridad competente, la Generalitat Valenciana.

El presidente subraya que con Ribera se suma "otra mujer y otra voz progresista experta" en Europa frente a la "corriente negacionista" en la UE y el mundo

La ratificación de Ribera, prosiguió Sánchez, "se ha materializado superando infundios y maniobras, frente a los que han terminado triunfando la verdad y la evidencia, porque la trayectoria y el buen hacer de Teresa Ribera están fuera de toda duda. Representan lo mejor de nuestro país". Con su ascenso, remachó, "gana España y gana Europa". Ella será la segunda exvicepresidenta del Ejecutivo "en lo más alto de las instituciones europeas", junto a Nadia Calviño, desde el pasado enero en el Banco Europeo de Inversiones (BEI), "otra mujer y otra voz progresista experta y de sentido común en el seno de Europa cuando más falta hace frente a la corriente negacionista que por desgracia asola Europa y también el mundo".

Sara Aagesen Muñoz (Madrid, 1976), ingeniera química por la Universidad Complutense de Madrid, secretaria de Estado de Energía desde 2020 y desde 2018 en el equipo de Ribera, será la persona que dará "continuidad" y que está llamada a "ampliar ese impresionante legado" que deja la ya exvicepresidenta. "Nadie mejor" para reemplazarla, justificó, que alguien que "encarna esos mismos valores: rigor, profesionalidad y conocimiento experto".

Aagesen aporta "rigor, profesionalidad y conocimiento experto". Sánchez glosa su currículum y recuerda que mantiene a tres mujeres vicepresidentas y el máximo relieve para el reto ecológico, energético y demográfico

Sánchez glosó el currículum de Aagesen, una de las "mayores expertas" en España "en transición energética y en política medioambiental" a lo largo de sus 20 años de carrera, ya que ha desempeñado diferentes responsabilidades ligadas a la acción climática a nivel nacional e internacional. Ha trabajado en la Oficina de Cambio Climático, ha sido negociadora de la delegación española en la Convención Marco de la ONU contra el Cambio Climático y miembro del Grupo Intergubernamental de Expertos de Cambio Climático, miembro del Consejo Asesor de la Organización de Naciones Unidas del Medio Ambiente y también de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial. Aagesen lideró la coordinación y definición del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2023, o la estrategia de descarbonización a largo plazo 2050, y ha diseñado, remarcó, "muchas de las políticas y de las medidas que han dado forma al nuevo marco regulatorio energético en nuestro país". "Estoy seguro de que, bajo el liderazgo de Sara Aagesen, España continuará siendo un referente europeo mundial en materia de transición verde y justa. Vamos a seguir demostrando que se puede crecer, crear riqueza", y haciéndolo de manera "equitativa, solidaria y responsable".

La nueva vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica encarna, por tanto, su apuesta por "perfiles preparados que aúnan conocimiento y experiencia". Y simboliza algo que, sostuvo, es muy importante para él, y es su "compromiso con la paridad y con la representación de las mujeres en las más altas responsabilidades institucionales". El Gobierno sigue contando con tres vicepresidentas mujeres —María Jesús Montero (Hacienda), Yolanda Díaz (Trabajo y Economía Social) y ahora Sara Aagesen— y con una de ellas "dedicada al reto ecológico, medioambiental y demográfico, sin duda uno de los grandes desafíos de nuestro tiempo". "La España más próspera que mi Gobierno quiere dejar a las generaciones futuras solo es posible si les le damos un país más sostenible", remató.