Qatar suspendió en noviembre su papel de mediador entre Hamás e Israel citando “la falta de voluntad” de ambas partes para alcanzar una tregua en la Franja de Gaza tras un año de negociaciones infructuosas. Fuentes conocedoras del proceso confirman a El Independiente que la monarquía del Golfo ha reanudado la interlocución con ambas partes con la esperanza de conseguir ahora sí un alto el fuego en el enclave palestino.

De hecho, se han retomado los primeros viajes de los principales rostros implicados en las conversaciones. Fuentes con conocimiento de las conversaciones aseguran a este diario que David Barnea, el director del Mossad, se reunió con el primer ministro qatarí, Mohamed bin Abdulrahman Al Zani, el miércoles en Doha para discutir un alto el fuego en Gaza y la liberación de rehenes. Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de la administración Biden, estará en Doha para discutir este posible acuerdo durante el fin de semana.

Viaje del Mossad a Qatar

Dos movimientos que se producen una semana después de que Steve Witkoff, designado por Donald Trump como su enviado a Oriente Próximo, viajara a Qatar e Israel para reiniciar el proceso de negociaciones y arrancar a las partes un acuerdo antes de que el magnate asuma el cargo el próximo 20 de enero. Witkoff es un inversor inmobiliario y donante de la campaña de Trump con vínculos comerciales con Qatar y otros países del Golfo, pero sin experiencia diplomática previa.

En los últimos 13 meses de mediación también han participado Egipto y la administración Biden. Más de la semana que en noviembre del año pasado se logró una tregua y la liberación de un centenar de rehenes a cambio del canje por prisioneros palestinos en cárceles israelíes, no se han producido más progresos.  En octubre, en el último intento, Hamás rechazó la propuesta de un breve alto el fuego en mitad de una ofensiva militar que ha dejado más de 45.000 muertos y reducido a escombros el enclave palestino.

Ahora, aunque las cautelas son máximas, existe cierto optimismo. “Hemos retomado el diálogo con las partes, hemos empezado a hablar con ellos y el impulso está aumentando, lentamente, con cuidado, pero está aumentando”, declaró a varios medios, entre El Independiente, el portavoz de Exteriores qatarí Majd al Ansari a principios de esta semana en Doha. De momento, son conversaciones individuales con las partes. “Convocamos una reunión principal o una reunión técnica en función de dónde nos encontremos en las conversaciones. Si pensamos que tenemos algo sólido llamamos a los principales, que son el director de la CIA, nuestro primer ministro, el director del Mossad o quienquiera que esté designado en el lado israelí y el director de la inteligencia egipcia. Entonces  tenemos una discusión, ponemos algo por escrito, se lo llevamos a Hamás; obtenemos la respuesta y así es como la pelota se pone a rodar”, señala gráficamente el diplomático qatarí.

Sobre la mesa vuelve a estar una propuesta muy similar a la que planteó la pasada primavera Biden, que consiste en una tregua y liberación de rehenes. Hace una semana Trump advirtió de que se desencadenaría “un infierno que pagar” si los rehenes en Gaza no eran liberados antes de su toma de posesión. El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, señaló a Reuters el miércoles que su comentario era un «poderoso reflejo» de la urgencia de un alto el fuego y un acuerdo sobre los rehenes tanto entre los republicanos de Trump como entre los demócratas de Biden. “Vamos a buscar todas las vías que podamos en el tiempo que nos queda para intentar recuperar a los rehenes y conseguir un alto el fuego. Y creo que la declaración del presidente electo refuerza eso”, añadió.