El martes la portavoz parlamentaria del Grupo Plurinacional Sumar, Verónica Martínez Barbero, preguntada en la rueda de prensa posterior a la junta de portavoces del Congreso, limitaba a los cambios en las portavocías en las comisiones de la Cámara Baja [de lo que ya informó El Independiente] y no se pronunciaba sobre una de las exigencias claves de IU en este proceso de reorganización interna del grupo: la atribución de una portavocía adjunta de las tres existentes para el diputado Enrique Santiago. En la tarde de este jueves, fuentes parlamentarias de los magentas anunciaron la culminación de ese proceso de cambios iniciado tras el escándalo y la salida de Íñigo Errejón. Sin ningún cambio en ese sentido.

Aunque fuentes vinculadas al proceso matizan que algunas cuestiones ya se venían planteando antes y la polémica con Errejón, que pronto se enfrentará a juicio por la denuncia de la actriz Elisa Mouliaá, lo aceleró todo.

Durante mes y medio, Sumar y el resto de socios tuvieron sobre la mesa esa reclamación, así como un cambio de siglas para evitar la confusión entre el espacio y el partido fundado por Yolanda Díaz; una mayor democratización y horizontalidad de todos los miembros, e incluir a Santiago como miembro de la Comisión de Secretos oficiales. Estas dos últimas peticiones si se han cumplido, con todo. Ahora bien, los izquierdistas no están nada contentos con el cierre de este procedimiento, que no creen profundo. Se prioriza seguir luchando por conseguir ese cambio de denominación, y, secundariamente, lograr esa mayor visibilidad pública dentro del Parlamento.

Aunque en un principio había gran coincidencia para estudiar ese cambio de nombre, excepto por parte del Movimiento Sumar, lo cierto es que en el grupo se cree ya que hay otras prioridades antes que esa a las que se tienen que atender. Sobre todo a nivel legislativo, con varias leyes o iniciativas en el alambre por la presión de Podemos o el descuelgue de Junts y PNV. Fuentes de los Comunes, de hecho, ven parte de las reivindicaciones de IU que no se han cumplido como más convenientes de ser dialogadas en una mesa de partidos destinada a lo orgánico de la alianza, y no tanto entre los grupos parlamentarios, cuya acción es legislativa.

En conversaciones con El Independiente, fuentes de IU valoran que "todo lo anunciado es insuficiente". "Aún queda mucho por cambiar para mejorar el funcionamiento" del grupo parlamentario. Algo que se ha recalcado internamente a los de Díaz y al resto de aliados. Se remarca que "siguen existiendo disfunciones que dificultan la labor política" en el día a día de la actividad parlamentaria, y, por ello, desde el espacio que dirige Antonio Maíllo a nivel nacional se descarta dejar de insistir en las reivindicaciones.

No se da por cerrado ningún procedimiento como anunció Sumar este jueves, e IU mantendrá todas las propuestas que aún no se han aceptado en la mesa de negociación. Un ámbito integrado por los referentes de cada partido asociado: Santiago por IU, Aina Vidal por Sumar, Àgueda Micó por Compromís, Txema Guijarro por Sumar y Jorge Pueyo y Vicenç Vidal por Chunta Aragonesista y Més per Mallorca.

Redistribución de comisiones

Desde la marcha forzada de Errejón, se han realizado distintos cambios. El más relevante, una nueva sustitución de portavoz parlamentario, tras el efectuado con el madrileño a la marcha de Marta Lois en enero como candidata a las elecciones de Galicia. Martínez Barbero tomó las riendas, con un perfil muy próximo al de la líder de facto del movimiento, Díaz. Se trata de un perfil profesionalizado y técnico, jurista y de la máxima confianza de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo. Que, pese a todo, no da tanto juego parlamentario y en cuanto a manejo de información o tacticismo político.

IU aprecia que sigue habiendo disfunciones dentro del grupo que dificultan la labor política

A ello le siguió la designación de Santiago y no ella como sucesor de Errejón para Secretos Oficiales, algo inédito en democracia al ser tradicionalmente el portavoz principal quien desempeñe esas funciones. Y, por último, se ha consumado un nuevo reparto de portavocías en las comisiones parlamentarias del Congreso. También se demandaba una redistribución de los fondos económicos del grupo para ser más eficientes, lo cuál no se ha trasladado [aunque se trata de algo más orgánico de lo que no tienen por que rendir cuenta].

Entre las novedades del reparto están. En la comisión de Constitucional, Nahuel González (IU) sigue siendo vicepresidente primero, pero cede su portavocía a Gerardo Pisarello (Comunes), quien hasta ahora era adjunto. Ese puesto lo ocupará Lander Martínez, de Sumar. Al igual que González, en la comisión de Hacienda Engracia Rivera era vicepresidenta y portavoz. Micó, de Compromís, entra en escena como adjunta junto a Carlos Martín, de Sumar.

El nombramiento de Martínez Barbero ha provocado que la presidencia de Derechos Sociales vaya para Alda Reca, de Más Madrid. Ahí IU queda sin representación, manteniéndose un puesto para Sumar y dos para los Comunes. En Industria y Turismo Compromís y Més per Mallorca se intercambiarán la representación por periodo de sesiones. Manuel Lago suple a Martínez Barbero como portavoz en Agricultura, Pesca y Alimentación. Se mantiene Toni Valero de IU como secretario segundo y portavoz, junto a Júlia Boada, de Comunes. Txema Guijarro, de Sumar, sustituye a Fèlix Cantorné, de la cuota catalana. Lago también remplaza a Martínez Barbero [asume el papel en la comisión de Nombramientos] como vicepresidente primero y portavoz adjunto en la comisión del Pacto de Toledo.

En definitiva, ganan peso partidos minoritarios en la coalición, como Compromís, Más Madrid o Més. Pierden cargos IU, y aumenta representatividad la cuota pura de Sumar y los comunes. Preguntadas por ello, fuentes de Sumar dan por cerrado el proceso y no contemplan nuevos cambios.

IU se ve fuerte

Fuentes del grupo parlamentario de Sumar consideran que IU se ve fuerte desde las europeas, que supusieron la marcha de Díaz como líder orgánica del Movimiento de Sumar. Antes de iniciarse este proceso, algunas cuestiones ya habían sido planteadas por los de Maíllo en el ámbito privado del espacio. "No se ha parado de negociar" desde entonces, se matiza.

"Tienen confianza porque antes de las europeas y el desgaste del movimiento no se contemplaban cuestiones como la mesa de partidos, y se consiguió", dicen fuentes parlamentarias, recordando, además, que pelearon por la portavocía sustituta. Desde IU, aunque no descartan lograr una adjunta, no lo vislumbran como uno de los objetivos finales, porque de la sustituta pueden remplazar a la portavoz y presentar propuestas e iniciativas legislativas. "No cambiaría gran cosa", sentencian.

Movimiento Sumar desea pasar página cuanto antes a este asunto. Es consciente de que todos intentan influir en beneficio propio para afianzar el peso de sus marcas, pero se cree que los cambios logrados, después de semanas de encuentros parlamentarios, son más que suficientes. Recuerdan que IU es uno de los socios con mayores recursos.