España planea incorporar la inteligencia artificial (IA) en las consultas de Atención Primaria de todo el Sistema Nacional de Salud (SNS) para el año 2027. Entre otras cosas, la idea es que ayude a transcribir las conversaciones entre médicos y pacientes para agilizar todo el proceso.

En esta línea, Quirónsalud acaba de rediseñar su modelo de asistencia al paciente por completo. Lo ha hecho lanzando una nueva herramienta, llamada, Scribe, que utiliza la inteligencia artificial (IA), paradójicamente, para eliminar las distracciones tecnológicas y trámites administrativos para que los profesionales puedan focalizar su atención exclusivamente en el paciente.

"Se trata de una herramienta que a partir de la conversación que ha tenido el paciente con el médico desarrolla un informe médico. Y no solo eso, sino que, además, con la información que ha recogido, hace sugerencias de orientaciones terapéuticas y pruebas de diagnóstico que pueden ser muy útiles", explica el doctor Emilio Calvo, jefe de departamento corporativo de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, el Hospital Universitario Infanta Elena, el Hospital Universitario General de Villalba y el Hospital Universitario Rey Juan Carlos.

El sistema se utiliza desde una tablet que el propio médico maneja. Cuando el paciente entra en consulta hay que activarlo para que empiece a funcionar y, a partir de ahí, permite transcribir la conversación y ofrecer ayuda al médico (por ejemplo, recomendándole realizar pruebas adicionales o cirugías si el caso lo demanda). Además, en paralelo, puede mostrar en la pantalla el resultado de los exámenes médicos ya realizados, que posteriormente pueden incluso proyectarse en una de las pantallas de televisión que muchos facultativos de Quirónsalud tienen en consulta.

"Cuando les explico a los pacientes en qué consiste el programa la mayoría nos dan la enhorabuena, porque conocen las posibilidades de la IA y saben que estamos siendo innovadores. En ese aspecto, podemos decir que les gusta que tengamos más tiempo para ellos, y sus comentarios están siendo muy positivos", asegura Carolina Gotera, adjunta del Servicio de Neumología del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz.

Gotera y Calvo son dos de los médicos que ya han estado probando esta nueva herramienta en consultas reales. Y es que desde el pasado mes de junio Scribe ha estado a prueba en diversos centros del Grupo, y la cifra de pacientes satisfechos asciende hasta el 90%. Desde Quirónsalud, señalan que la herramienta va a seguir implantándose en nuevos servicios y unidades de distintos centros hospitalarios de toda la geografía española, con el fin de que a comienzos de 2025 la usen ya más de 8.000 médicos, lo que equivale a más del 60% de los facultativos de la compañía.

"Antes los médicos estábamos continuamente tecleando en el ordenador lo que nos contaba el paciente. Con mayor o menor agilidad, pero teníamos que mirar a la pantalla para asegurarnos de que todo estaba escrito correctamente. Pero eso ahora ya se ha acabado. Scribe permite tener una relación más directa, en la cual el paciente y el médico se miran a los ojos y tienen una conversación", desliza Calvo.

Adaptable a todas las especialidades y a todos los médicos

La doctora Carolina Gotera cuenta que cuando les plantearon este proyecto a los médicos también les dieron una formación para aprender a utilizar el programa, que no obstante asegura que es muy "intuitivo". En parte esto se debe a que está integrado dentro de Casiopea Mobility, una aplicación que los profesionales de Quirónsalud ya están habituados a manejar desde hace años.

"La curva de aprendizaje ha sido bastante buena. Ahora somos nosotros, como médicos, los que debemos aprender que tenemos un nuevo asistente virtual que aprende muy rápido, y que en la práctica nos va a llevar a la excelencia", apunta la doctora, que se muestra convencida de que el programa acabará con la manera de escribir propia de los médicos, que explica que está plagada de acrónimos hasta el punto que ni ellos mismos se entienden en muchos casos.

Por su parte, Calvo admite que el sistema tiene margen de mejora. Pero ya vislumbra su importancia en la medicina del futuro: "Scribe es una herramienta útil para cualquier especialidad. Es fundamental para la anamnesis, en la que el paciente nos cuenta sus síntomas, sus inquietudes, sus temores... Y esto es lo que mejor refleja la herramienta. Luego hay una parte técnica que se basa en las pruebas de exploración y en pruebas complementarias, que es lo más difícil de desarrollar. Y es en lo que estamos trabajando".

La especialista en Neumología va incluso más allá. "Quizás Scribe se acabe adaptando más a cada médico que a cada especialidad. Al final cada uno pasamos consulta de una forma distinta, incluso aunque seamos de la misma especialidad. Yo he visto en mi entorno médicos en Neumología que se enfocan más en unas cosas o en otras", afirma. En cualquier caso, también es muy positiva: "Este sistema abre la puerta a muchísimas posibilidades, es solo la punta del iceberg de todo lo que viene detrás. Y los propios médicos, a medida que vayamos usando este tipo de herramientas, nos iremos dando cuenta del potencial que tienen. No somos conscientes de las oportunidades que se nos van a presentar".