El acuerdo de investidura que llevó a pactar a PSOE y Sumar la reducción de la jornada laboral de 40 a 37,5 horas semanales vuelve a escenificar las diferencias entre ambas formaciones. Según la vicepresidenta Yolanda Díaz, el Ministerio de Economía ha bloqueado el expediente para que no sea tramitado por la vía de urgencia e incluido en la agenda de la próxima Comisión Delegada para Asuntos Económicos previa a su debate en el Consejo de Ministros. De este modo, la medida se demoraría varias semanas hasta que llegue a la mesa de los miembros del Ejecutivo, previa a su debate en el Congreso de los Diputados. Poco después el ministro de Economía negaba que se este "bloqueando absolutamente nada", si bien evitaba confirmar si respaldará una tramitación urgente de la propuesta.

La medida, cuyos plazos y proceso de tramitación están enfrentando al ministro de Economía, Carlos Cuerpo, y a la vicepresidenta y ministra de economía, Yolanda Díaz se ha convertido en un foco de enfrentamiento entre los socios de Gobierno. Díaz cerró el pasado 20 de diciembre un acuerdo con los principales sindicatos que no fue visto con buenos ojos por Economía que considera que la medida debe abordarse y definirse con más calma y consenso. Una tramitación por vía ordinaria, como defiende Cuerpo, impedirá que el próximo lunes el organismo previo que debate las cuestiones económicas de modo previo a su aprobación en el Consejo de Ministros incluya esta cuestión en su agenda. Este retraso podría demorar su debate en el Consejo ministerial incluso hasta el mes de febrero.

La vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha acusado esta mañana al Ministerio de Economía de vetar el debate sobre la reducción de la jornada laboral en el Consejo de Ministros al adoptar esta decisión: "Ayer el Ministerio de Economía respondió (al Ministerio de Trabajo) por escrito vetando este debate" ha subrayado Díaz en una entrevista en Telecinco tras días acusando al ministro de Economía, Carlos Cuerpo, de oponerse a la reducción de la jornada pactada con los sindicatos.

"Me parece muy grave"

"Me parece muy grave", ha insistido la vicepresidenta, que se intente bloquear una medida que forma parte del acuerdo de investidura y que ha sido acordada tras once meses de debate en la mesa de diálogo social. "No son opiniones", ha subrayado, "ayer se nos ha respondido por escrito" confirmado que se "impide que este acuerdo de diálogo social llegue a ser discutido en el Consejo de Ministros" al no incluirlo en la agenda de la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos.

Para Díaz, la reducción de la jornada laboral "es la medida más importante del país" y por ello se ha mostrado confiada en que saldrá adelante, para lo que, ha apuntado, hablará con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. 

Sin embargo, a mediodía el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha negado que se esté bloqueando esta cuestión, "no se está bloqueando absolutamente nada", ha asegurado. El titular de Economía ha señalado que desmiente "por completo" las manifestaciones de Díaz y ha señalado que aprobar la reducción de la jornada laboral es "una prioridad absoluta para su ministerio". Cuerpo ha evitado concretar si la cuestión formará parte de la discusión de la Comisión Delegada para Asuntos Económicos prevista para el próximo lunes. Se ha limitado a recordar que se trata de un compromiso muy relevante para los trabajadores y que debe ser tratado "con todas las garantías" y posibilidades de que pueda salir adelante.

El ministro ha señalado que desea que sea "una realidad" pero que para ello hay que ser consciente no sólo de la situación de la economía y de las empresas sino también de la "realidad parlamentaria". Cuerpo ha insistido en que intentará que el debate en el seno del Gobierno sea "lo antes posible" y que en ella participen todos los ministerios implicados en la materia.

Buscar apoyo parlamentario

Se trata de una de las medidas más relevantes que en materia económica había planteado Sumar y que logró que el PSOE se comprometiera a respaldar. Sin embargo, el procedimiento para llevar a cabo este compromiso de reducción de jornada está enfrentando a Trabajo y Economía. La celeridad que Díaz quiere imprimir a la cuestión choca con la pretensión de Cuerpo que defiende una implantación progresiva de la medida y la necesidad de amarrar apoyos suficientes para que la medida no fracase en su tramitación parlamentaria.

Inicialmente se había previsto una fase intermedia de 38,5 horas, medida que debía haber sido aprobada el año pasado. Ahora Trabajo considera que en 2025 se debe aprobar cuanto antes la reducción a las 37,5 horas, pese al rechazo de la Patronal a la medida y con el único respaldo de los sindicatos. Trabajo considera que el acuerdo con las centrales debe ser la base del futuro anteproyecto de ley que apruebe el Gobierno. El ministerio de Economía defienden que se debe trabajar una propuesta capaz de aunar apoyos suficientes en una Cámara baja en la que el Ejecutivo ya ha fracasado en varias votaciones. Subraya que en una cuestión tan esencial como esta volver a hacerlo supondría un importante revés.

La tensión ha llevado en los últimos días a que la vicepresidenta Díaz llegara incluso a calificar de "mala persona" a su compañero de Gobierno por "decirle a la gente trabajadora de nuestro país que se niega a reducir la jornada media hora al día".