La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) ha condenado este jueves la expulsión de Sáhara Occidental del periodista Francisco Carrión, redactor de El Independiente, por parte de las autoridades de Marruecos. Carrión se había trasladado a Dajla, la antigua Villa Cisneros, en labores informativas. El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés), una organización internacional con sede en Nueva York, también se ha sumado a la condena.

Carrión fue retenido y, tras hora y media de interrogarlo y cruzar datos, obligado a embarcarse en el vuelo de vuelta a España de la compañía Ryanair, que recientemente ha abierto la línea entre Madrid y la ciudad saharaui. Carrión ha expresado que un agente le espetó que su expulsión se debía a lo que había escrito sobre el Rey de Marruecos. En su denuncia informa que no recibió ninguna atención de las autoridades consulares españolas y añade que otro periodista español, José Carmona, de Público, fue deportado hace semana y media.

La FAPE pide a Albares que exija explicaciones

La FAPE quiere hacer público su rechazo a estas actuaciones y pide al ministro de Asuntos Exteriores español que exija las oportunas explicaciones a su homólogo marroquí respecto a las razones que han motivado las deportaciones. La FAPE ya ha denunciado en anteriores ocasiones la vulneración constante de sus derechos que padecen muchos periodistas al ejercer su trabajo en Marruecos, con detenciones arbitrarias y condenas a prisión para varios profesionales de la información.

La Federación advierte al Gobierno de Marruecos que "un país que pretende ofrecer al mundo una imagen democrática difícilmente va a conseguirlo cercenando la libertad de información y de expresión". "La expulsión de reporteros, lejos de conseguir silenciar los hechos, sirve de altavoz de lo que se pretende acallar y motiva la reprobación y condena unánime por parte de los estados democráticos, sus instituciones, organizaciones y ciudadanos", agrega la FAPE en un comunicado.

"La FAPE defiende los principios de la libertad de prensa como baluarte para la democracia y como cimiento para el desarrollo civilizado de la sociedad, valores que no se están respetando. La organización recuerda que sin periodistas no hay periodismo y sin periodismo no hay democracia", concluye la nota.

El CPJ, por su parte, muestra su preocupación por la deportación de Carrión. "Expulsar a un periodista por informar sobre la monarquía es un ataque a la libertad de prensa y un intento de silenciar al periodismo independiente", señala el director de programa Carlos Martínez de la Serna. "Pedimos a las autoridades marroquíes que mantengan su compromiso con la libertad de prensa y permitan a los periodistas llevar a cabo su trabajo libremente y sin intimidación", agrega.