Los códigos QR están ganando popularidad, utilizándose no solo para realizar pagos, sino también para conectarse a redes wifi y acceder a información, entre otras aplicaciones. Esta herramienta no solo facilita el ahorro de tiempo, sino que también reduce el uso de papel al requerir únicamente un dispositivo. Sin embargo, su popularidad también ha provocado riesgos asociados a su uso, principalmente estafas que buscan aprovecharse de la confianza de los usuarios.

Las siglas de QR hacen referencia a quick response, un código de respuesta rápida, y es una evolución del tradicional código de barras. Tiene una forma cuadrada, consta de otros tres cuadrados en sus esquinas, y cada compilación posee un patrón único. Es habitual que esté en blanco y negro, aunque actualmente se puede personalizar sus colores, siempre que sean contrastados (claro y oscuro) para su correcta lectura. La cámara de los dispositivos móviles lo leen, sin necesidad de otra aplicación, y redirigen a una web, un correo electrónico o al fin último del mismo.

A medida que los códigos QR se han hecho más habituales, también han captado la atención de ciberdelincuentes que buscan manipularlos para engañar a las personas. Por ello, la Policía Nacional ha alertado de un aumento en las estafas relacionadas con estos códigos. Según las autoridades, los delincuentes han comenzado a colocar adhesivos con códigos QR falsificados sobre los originales en parquímetros, gasolineras, tiendas en línea y otros lugares. Al escanear estos códigos, las víctimas son redirigidas a sitios web fraudulentos que imitan páginas oficiales, con el fin de robar información personal, datos bancarios o inducir a realizar pagos ilegítimos.

La alerta de la Policía Nacional, compartida a través de su perfil oficial de TikTok (@policia), enfatiza la importancia de comprobar siempre la autenticidad del código QR antes de escanearlo. "Mucho ojo a la dirección a la que te lleva, comprueba que el enlace de vista previa te lleva efectivamente a la página que quieres visitar".

Consejos para no caer en la estafa

La Policía Nacional ha compartido una serie de indicaciones para no caer en estafas en las que se usan estos códigos. En primer lugar, "verifica que el código QR no se haya manipulado antes de usarlo". Estos códigos de forma cuadrada tienen patrones únicos, y al pasar la cámara del móvil te dirige al fin que tuviera (una web, un correo electrónico o el perfil de una red social). Si algún ciberdelincuente lo ha usado, se verá que el código muestra alteraciones.

"Ojo a la dirección que te lleva". Todos los códigos QR tiene un destino, y se debe comprobar antes de acceder que no es una URL maliciosa o una web sospechosa. En una vista previa se puede comprobar la dirección a la que lleva, y si su URL es el correcto. Una vez dentro de la web, si no es una dirección original, se verán las imágenes (el logotipo) en baja calidad o se verán errores ortográficos.

"Si hay mensajes que invitan a la urgencia o requieren de acciones inmediatas, mejor salir de ahí". Esta es una práctica común de los ciberdelincuentes, mediante excusas y engaños ponen a las víctimas en una situación complicada, con mensajes en los que les asegura que se les va a cerrar una cuenta, o que son un familiar que necesitan ayuda.

La agente también señala que no se debe facilitar datos personales, como el nombre o DNI, ni de pago (número de la tarjeta de crédito o de la cuenta bancaria), en espacios que resulten sospechosos al usuario. Por último, recuerda que para leer un código QR solo se necesita la cámara del móvil, no es necesario descargar otra aplicación específica para ello. Por lo que si un QR pide el uso de otra herramienta, desconfía de su origen.