Es la cifra más alta jamás registrada en los últimos 27 años. Desde que en 1998 el Gobierno vasco comenzó a realizar el 'Sociómetro', el sondeo sobre la valoración social y política de la ciudadanía vasca, el rechazo a la independencia no había alcanzado los niveles ahora registrados. En su última edición, correspondiente a enero de este año, se constata que el 41% de los vascos rechaza la independencia. Supone dos puntos más respecto al último 'Sociómetro' de 2024 y muy por encima de los porcentajes que la rechazaban en el periodo 2000-2015 que oscilaba entre el 32% y 34%.

Quienes se muestran de acuerdo con la independencia suponen el 21% de la población encuestada. Este indicador se mantiene estable en los últimos sondeos, si bien es significativamente inferior al 30% que llegó a alcanzar en 2014. Quienes respaldarían la independencia en función de las circunstancias representan un 33% de los vascos. De este modo, los últimos 'Sociómetros' comienzan a constatar una variación en la tradicional fragmentación en tres bloques casi similares que se venía produciendo en las últimas décadas.

En otro de los apartados se cuestiona sobre el sentimiento de pertenencia. Quienes se identifican como "sólo vasco" suponen el 19% de la población. Supone un porcentaje estable respecto a los últimos sondeos. Sin embargo, este sentimiento llegó a representar al 32% de la población en los primeros años de la década de los 2000. Fue tras la pandemia cuando se produjo un descenso pronunciado hasta situarse en los niveles actuales. El sentimiento mayoritario es el de sentirse "tan vasco como español", con el que se identifica el 40 de la población. Supone un punto menos que en el último sondeo pero mantiene el importante repunte que registró tras los años de pandemia. A ellos se suma un 25% de a población que dice ser más vasco que español.

En una horquilla de 0 a 10 entre la izquierda y la derecha, los vascos se sitúan en un 4,3. Es decir, cerca del centro pero en posiciones ligeramente hacia la izquierda. Las simpatías en los partidos políticos no logran el aprobado. El que más simpatía suscita es el PNV pero lo hace con apenas un 4,8 sobre 10. El PSE supera a EH Bildu, con un 4,2. La formación de la izquierda abertzale cae a un 4 de simpatía. Podemos logra un 3,5 y el PP un 1,9.

Sólo uno de cada cinco vascos dice confiar en los partidos políticos, el 19%. En el Ejecutivo de Imanol Pradales confía el 77% de la población y en el de Pedro Sánchez un 32%.