Se han cogido de la mano, se han reído juntos, se han dado la razón, alabado mutuamente, deseado lo mejor para el futuro y han mostrado su apoyo para el otro país. Pero cuando ha llegado el momento, el presidente francés, Emmanuel Macron, no ha dudado en corregir a su homólogo estadounidense en el Despacho Oval. "Esto [la guerra de Ucrania] es responsabilidad de Rusia porque el agresor es Rusia", ha dicho el francés junto a Donald Trump cuando éste intentaba decir que Ucrania había "empezado" el conflicto.

Cuando Trump ha transmitido que Europa va a conseguir de vuelta el dinero que ha enviado a Ucrania, el francés lo ha vuelto a corregir: "No, de hecho, y para ser sinceros, nosotros hemos pagado. Les hemos dado dinero real", ha afirmado, tocándole el brazo a Trump. El estadounidense lleva días repitiendo sin cesar que Ucrania debe llegar a un acuerdo con EEUU para cederle minerales porque los contribuyentes americanos deben recuperar de algún modo el dinero que el expresidente Joe Biden envió al país invadido, y este lunes en la Casa Blanca ha tratado de deslizar que Europa está haciendo lo mismo, cuando no es así.

La Unión Europea ha enviado a Ucrania préstamos, sí, pero también transferencias a fondo perdido, ha dicho Macron, ese "dinero real" al que se ha referido y que nunca va a ver de vuelta.

Macron ha visitado la Casa Blanca en calidad de líder europeo oficioso y coincidiendo con el tercer aniversario del inicio de la guerra. Y desde el primer intercambio delante de las cámaras, en los minutos previos a la reunión entre ambos dirigentes, el francés ha contradicho al estadounidense, con educación, evidenciando las diferencias entre Estados Unidos y Europa y tratando de llevarse a Trump siempre al mismo terreno: cuidado con Vladimir Putin.

Ante las cámaras, Trump ha rechazado llamar a Putin dictador -la semana pasada usó esa palabra para referirse al presidente ucraniano, Volodimir Zelenski- y ha dicho que Estados Unidos ha gastado más en la guerra de Ucrania que Europa, dato que Macron también ha corregido con delicadeza. Durante el mismo intercambio, el estadounidense ha dejado caer que podría recibir a Zelenski en Washington a lo largo de los próximos días para llegar a un acuerdo sobre la cesión de minerales a cambio de ayuda militar, y que si este se produce podría viajar pronto a Moscú, incluso en las próximas semanas.

"Me reuniré con el presidente Zelenski. De hecho, puede que venga esta semana o la que viene para firmar el acuerdo, lo cual estaría bien. Me encantaría recibirle. Nos veremos en el Despacho Oval. Estamos trabajando en el acuerdo ahora", ha asegurado el estadounidense. "Será un trato sobre tierras raras y varias otras cosas. (A Zelenski) Le gustaría venir aquí, según tengo entendido, a firmarlo. Y eso sería genial para mí".

Macron tira de mano izquierda para convencer a Trump

Macron se ha esforzado en dejar claro que solo Trump es quien debe decidir qué hace y cómo lo hace, pero al mismo tiempo ha deslizado sus advertencias sobre Putin. Ante la pregunta de una periodista que pedía al francés que diese un consejo a Trump para tratar con el ruso, Macron ha respondido que jamás osaría dar consejos al estadounidense sobre lo que tiene que hacer, y lo ha apoyado diciendo que ve positivo conversar como Trump está proponiendo hacer. Pero al mismo tiempo ha recordado que los europeos también intentaron dialogar con Putin, y que dejaron de hacerlo tras la matanza de Bucha, puesto que lo consideraron "demasiado grave" como para seguir manteniendo conversaciones.

El asesinato de civiles en la ciudad ucraniana que tuvo lugar en abril de 2022 es una referencia relevante y escogida con cuidado por parte de Macron ante Trump, que rechaza cualquier investigación a Rusia por crímenes de guerra. Según los datos de la ONU, en Ucrania han muerto 12.654 civiles, de ellas 673 niños; mientras los heridos ascienden a 29.393.

Trump ha repetido que tanto los europeos como los ucranianos han tenido tres años para hablar con Putin, y que no lo han hecho, cuando ha recibido críticas por llamar a su homólogo ruso y por organizar reuniones solo con una parte de los implicados en la guerra. Pero Macron le ha recordado que en 2014, cuando Rusia invadió el país por primera vez, se negoció la paz en Minsk (Bielorrusia) y fue Putin quien rompió los acuerdos de alto el fuego. El estadounidense ha repetido que cree que Rusia respetaría un posible acuerdo de alto el fuego, y el francés ha remarcado que es importante tener garantías que lo sostengan. "Compartimos el objetivo de la paz pero somos muy conscientes de la necesidad de conseguir garantías para tener una paz sólida".

Enviar tropas a Ucrania

Ante la pregunta de si al presidente ruso aceptaría la presencia de tropas europeas en Ucrania, Trump ha afirmado que sí las aceptará, abriendo la puerta al despliegue de soldados en el país invadido como parte de un acuerdo de paz. El estadounidense ha remarcado que ha hablado del tema con el ruso, que hasta ahora consideraba el envío de tropas como una línea roja, y ha dicho que Putin "no tiene problema" siempre y cuando antes se llegue a un acuerdo para terminar con la guerra. La razón de ser de esas tropas sería evitar futuros ataques rusos en Ucrania, pero no está claro si Putin realmente las aceptaría.

La reunión entre ambos presidentes se ha producido poco después de que Estados Unidos votase junto a Rusia, Corea del NorteBielorrusia y otros aliados rusos en contra de una resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas que pedía la paz en Ucrania y exigía la retirada de las tropas del territorio ocupado. La resolución ha salido adelante gracias a los votos de la mayoría de la asamblea, en total 93 países, incluidos casi todos los países de la Unión Europea con la excepción de Hungría, y ha evidenciado por primera vez las diferencias en el hasta ahora bloque Occidental con respecto a Ucrania.