Firma definitiva para la exploración de las reservas de gas que podrían hallarse frente a la costa del Sáhara Occidental ocupado. Marruecos ha otorgado la licencia a la compañía israelí NewMed, propiedad del magnate israelí Itshak Tshuva, y la marroquí Adarco Energy, del empresario judío marroquí Yariv Elbaz, uno de los hombres de negocios del país vecino que más beneficiado ha salido del reconocimiento de Israel por parte de Marruecos. Unos lazos que Rabat ha mantenido incluso durante 15 meses de guerra en la Franja de Gaza.

A finales de febrero se procedió a la firma definitiva de la licencia que incluye la exploración y explotación de 17 permisos en alta mar por un periodo de 8 años desde el sur del cabo de Bojador hasta Dajla -la antigua Villacisneros-, en el territorio del Sáhara Occidental, la antigua provincia española ocupada ilegalmente por Marruecos desde 1976. Ha sido la ministra de Transición Energética y Desarrollo Sostenible marroquí, Leila Benali, la que ha dado el plácet final al consorcio marroquí-israelí.

"El proyecto Boujdour Atlantique continúa avanzando sin problemas y según lo programado, lo que demuestra la fuerza de la colaboración entre NewMed Energy y la Oficina Nacional de Hidrocarburos y Minas", presume la empresa israelí en sus redes sociales. "Juntos, nos une una visión compartida para desarrollar los recursos energéticos de la región y promover soluciones sostenibles. Seguimos confiando en que esta asociación impulsará un progreso impactante, generará un valor duradero y contribuirá a construir un futuro energético próspero y sostenible para Marruecos", agrega la nota.

Mapa presentado por el consorcio con Marruecos incluyendo el Sáhara Occidental.

Firma definitiva

Los primeros pasos de esta asociación se anunciaron en diciembre de 2022. Fue entonces cuando NewMed Energy rubricó un acuerdo con el Ministerio de Energía y Minas de Marruecos y Adarco Energy para la exploración y producción de gas natural en alta mar en Marruecos. En virtud del acuerdo, NewMed y Adarco se reparten una participación del 37,5% en la licencia mientras que el ministerio controla el 25% restante. "Desde hace mucho tiempo hemos reconocido en Marruecos un enorme potencial de colaboración tanto en el sector del gas natural como en el de las energías renovables», manifestó Yossi Abu, consejero delegado de NewMed, uno de los principales accionistas del enorme yacimiento de gas marino Leviatán en Israel.

Los planes iniciales estimaban que la prospección y las primeras perforaciones exploratorios se llevarían a cabo en el plazo de dos años. El acuerdo se produce en una coyuntura marcada por el intento del régimen alauí de competir con Argelia, importante productor gasístico, con la construcción de un gasoducto entre Nigeria y Marruecos que atravesaría la costa del Sáhara Occidental y de cuya viabilidad recelan los expertos. Rabat se enfrenta también al revés de las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que tumbaron los acuerdos pesquero y agrícola con Bruselas y que pusieron el foco en el expolio de los recursos naturales del Sáhara Occidental.