A Putin y sus acólitos se les ha congelado la sonrisa. En el Kremlin se las prometían muy felices después del encuentro en Riad de las delegaciones rusa y estadounidense el pasado 18 de febrero, y sobre todo, tras la bronca, diez días más tarde, en la Casa Blanca entre el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, y el estadounidense, Donald Trump. Los puentes entre Zelenski y Trump parecían irremediablemente rotos. Sin embargo, el presidente ucraniano se ha dejado asesorar por los más experimentados dirigentes europeos y ha convencido a Trump de que realmente está comprometido con la paz. La clave es que la delegación ucraniana en Yeda ha aceptado un alto el fuego inmediato de 30 días, un punto clave en la pax americana concebida por Trump.
A cambio, EEUU ha reanudado los envíos de ayuda militar a Ucrania y ha vuelto a colaborar a la hora de aportar información de inteligencia. Desde Polonia, desde donde parte gran parte de la asistencia estadounidense, lo han confirmado apenas horas después de celebrarse la cumbre de Yeda, con la asistencia de Marco Rubio, secretario de Estado de EEUU, y de Andrii Yermak, jefe de la oficina presidencial de Zelenski. "La pelota está ahora en el tejado ruso", confirmó Marco Rubio. El enviado especial de Trump, Steve Witkoff, va esta misma semana a Moscú a explicar los detalles a Putin y o se descarta una conversación telefónica entre el líder ruso y Donald Trump.
Objeciones rusas al alto el fuego
Para Putin es una mala noticia que Zelenski, que había puesto pegas a aceptar un alto el fuego cuando estuvo en la Casa Blanca, haya cambiado de posición. Las tropas rusas están avanzando en Kursk, que prácticamente está bajo su poder de nuevo. La operación ucraniana en la región rusa fue humillante para el Ejército de la potencia nuclear. Y también progresan en el Donbás. El alto mando ruso no va a entender que la guerra pare ahora.
Además, el líder ruso dijo en enero que no era partidario de un alto el fuego, como paso previo a una tregua, sino que antes deberían dejarse claro los principios sobre los que habría de sustentarse la paz. "El objetivo no debe ser una tregua breve, no una especie de respiro para reagrupar fuerzas y rearmarse con el fin de continuar posteriormente el conflicto, sino una paz a largo plazo basada en el respeto de los intereses legítimos de todos los pueblos que viven en la región", dijo Putin en enero.
Para Rusia esos principios pasan por el control de Ucrania vía elecciones en las que puedan colocar un gobierno títere, la jibarización del Ejército ucraniano y la reconfiguración de la arquitectura de seguridad de Europa. Putin no busca solo, aunque también lo añora, una salida al mar, sino también que Ucrania quede bajo su dominio porque sin Ucrania Rusia no es imperio.
Ucrania y su derecho a defenderse
En una escala en Shannon, Irlanda, de vuelta desde Yeda, Marco Rubio ha realizado unas declaraciones muy ilustrativas de la visión de EEUU sobre Ucrania, tras su larga conversación con la delegación ucraniana. Lo más relevante es que Rubio ha dicho que "parte de las negociaciones" debe ser "la disuasión suficiente para evitar otra agresión".
No ha hablado de la OTAN o de la implicación de EEUU, pero sí que ha mencionado al experimentado ejército ucraniano, que casi cuenta con un millón de efectivos. "Todos los países del mundo tienen derecho a defenderse y nadie puede privarles de este derecho, así que esto también formará parte de las negociaciones". Es decir, Rubio estaba reconociendo que Ucrania es un país soberano y que ha de seguir siéndolo después de la guerra. No es lo que busca Rusia.
Tampoco ha descartado la participación de una misión europea en el mantenimiento de la paz en Ucrania, un plan sobre el que están trabajando Reino Unido y Francia con la llamada "coalición de voluntarios". Rubio ha indicado que no hay nada predeterminado, si bien ha reconocido que "tiene que ser algo que dé a Ucrania la confianza de que puede prevenir futuros ataques". El Kremlin rechaza tajantemente, y así lo ha expuesto el ministro ruso de Exteriores, Sergui Lavrov, en una entrevista con blogueros ultraderechistas de EEUU que haya tropas de paz en Ucrania.
El secretario de Estado de EEUU también ha reconocido que los europeos formarán parte de las negociaciones en algún momento, ya que si Rusia quiere que se levanten las sanciones, tendrán que sentarse en la mesa.
El acuerdo sobre la explotación de minerales críticos se ha dejado para más adelante pero Rubio ha indicado que interesa a UU y a Ucrania. De hecho, da a entender que la presencia de estadounidenses en Ucrania con el fin de explotar esas tierras sería una garantía para los ucranianos. EEUU no permitiría que fueran atacados.
Qué busca Trump
Para sorpresa de muchos que considerábamos que Trump estaba actuando de acuerdo con el diktat del Kremlin las afirmaciones de Marco Rubio apuntan a que el presidente estadounidense tiene otros objetivos distintos a los de Putin.
En un artículo publicado en The Washington Post, Marc A. Thiessen contaba lo que realmente importa a Trump sobre Ucrania, basándose en conversaciones con el presidente. Trump quiere que paren los combates y por eso su primer objetivo es un alto el fuego. Así se explica que se enfadara tanto con Zelenski cuando el ucraniano ponía en cuestión que Putin lo vaya a respetar. Eso le dio la impresión a Trump de que Zelenski no quería parar. Lo mejor es que Trump vea realmente lo que hace Putin. Marc A. Thiessen asegura que Trump quiere que Ucrania sea un Estado soberano y que recupere el máximo de territorio. Sus elogios a Putin son, a su juicio, una táctica de negociación para parecer "un árbitro neutral". Y también desea proteger a los contribuyentes americanos y por eso su interés por las tierras raras.
Los pasos dados en Yeda por estadounidenses y ucranianos supone un giro de guion que lleva a Putin a una posición incómoda. ¿Cómo decir nyet a Trump si despertar su ira? Trump ha dejado claro que buscará cómo hacer que a Rusia le duela su rechazo al alto el fuego. La semana pasada, señaló un corte total de los flujos financieros de Rusia y el cese de sus ventas de petróleo. Habló de suspender licencias e imponer aranceles. Este miércoles, en la Casa Blanca, Trump ha dicho: "Las cosas le podrían ir muy mal a Rusia. Sería devastador para Rusia, pero no quiero que esto pase porque lo quiero es ver la paz".
El mensaje más sutil es claro para Putin: difícilmente vas a lograr en el futuro más de lo que consigas con Trump ahora. Si rechazas la pax de Trump, tendrás la guerra de Trump.
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3 Comentarios
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hace 31 minutos
El hecho de que muchos políticos sean unos mentirosos desvergonzados es también un reflejo de nosotros. Cuando las personas quieren lo imposible, sólo un mentiroso puede prometer satisfacerlos.
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«The fact that so many successful politicians are such shameless liars is not only a reflection on them, it is also a reflection on us. When the people want the impossible, only liars can satisfy.»
~Thomas Sowell
hace 4 horas
Rusia sólo quiere proteger sus fronteras
hace 10 horas
se las prometían muy felices los puti(n) bots y demas rusoplanistas.
el que tiene el poker de Ases no es Rusia,… es USA…
Rusia, tendrá una pareja de sietes como mucho…