El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha anunciado este viernes que se querellará contra la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Reyes Maroto, por afirmar que 7.291 personas mayores fueron "asesinadas" en las residencias de la región durante la pandemia, informa Europa Press. Unas palabras por las que la dirigente socialista finalmente se ha retractado.

Este viernes, en un comunicado, el portavoz del Ejecutivo regional, Miguel Ángel García, ha avanzado que los servicios jurídicos de la Comunidad de Madrid están trabajando "en las acciones legales oportunas" contra Reyes Maroto, por unas declaraciones en las que se imputa al Gobierno madrileño "el asesinato de personas mayores en las residencias durante el covid".

En declaraciones a la prensa este jueves antes de reunirse con el Consejo Ciudadano de Mayores de la ciudad de Madrid, la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento afirmó que "fueron 7.291 las víctimas, las personas mayores asesinadas en estas residencias como consecuencia de la no derivación a los hospitales en nuestra Comunidad, fruto de un protocolo de la vergüenza que tiene la firma del Gobierno de la Comunidad de Madrid que preside la señora Ayuso".

Tras estas afirmaciones, el Gobierno de Díaz Ayuso se querellará contra Maroto porque "no vale todo en política y declaraciones como las realizadas por la portavoz del PSOE, Reyes Maroto, donde se nos atribuye un delito no pueden quedar impunes", ha subrayado el portavoz del Ejecutivo autonómico. 

La "indignidad" de Ayuso

Por su parte, el Gobierno municipal de Madrid, que dirige José Luis Martínez-Almeida, ha roto relaciones con el PSOE de Maroto tras los desencuentros por el número de fallecidos en las residencias durante la pandemia, han avanzado fuentes municipales a Europa Press.

Maroto ayer atacó "la indignidad" de la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, exigiéndole que "pida perdón" y que "se conozca la verdad, sobre todo la justicia y la reparación". "Hasta aquí hemos llegado. No podemos permitir que el sanchismo y Reyes Maroto sigan haciendo de la política madrileña un auténtico lodazal y sigan retorciendo el dolor de las víctimas", ha contestado el alcalde.

Esta ruptura conlleva, según fuentes del equipo del regidor, que los miembros del grupo municipal del PSOE solo serán invitados a los actos que les correspondan como parte de la corporación municipal, "se corta" la comunicación con los socialistas en el Ayuntamiento y "únicamente se les atenderá a través de los instrumentos legales de control que tienen en pleno y las comisiones".

Además, han asegurado que las reuniones que pidan los concejales socialistas a los miembros del gobierno "no se celebrarán", y esta ruptura se replicará en todas las Juntas de Distrito.

"No se puede romper lo que nunca ha existido", ha replicado primero Maroto. Después, ella misma ha lanzado un comunicado de marcha atrás. Sus declaraciones sobre las personas que murieron en las residencias madrileñas, ha asumido, no fueron correctas. "Me retracto. No fueron las palabras más adecuadas". Y continúa: "No fue mi intención, evidentemente, acusar a nadie de asesinato, algo que en cuyo caso corresponderá a la Justicia, sino destacar que estas personas fallecieron en las residencias madrileñas sin recibir tratamiento médico adecuado".