Es la enésima batalla del PSOE con sus socios, los del gobierno y los parlamentarios, ahora a cuenta de si la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, debe o no presentar al Parlamento un proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2025 aunque no tenga los votos suficientes para sacarlos adelante. Y es que la negociación se presenta agónica, tanto en el Consejo de Ministros, con Sumar apretando las tuercas, como con el resto de las fuerzas políticas que apuntalan a Pedro Sánchez, cada una con sus reivindicaciones, tengan que ver o no con las cuentas del Estado.

Si ya era difícil antes, el comprometido incremento del gasto en Defensa, exigencia de la Unión Europeo y de la OTAN, que debería reflejarse en el PGE, es otro escollo para conseguir el 'sí' de la llamada 'mayoría de investidura', cada vez menos mayoría. Hasta Sumar unió ayer sus votos a la posición más extrema de los contrarios al rearme militar respaldando una moción del BNG que exige incluso la salida de la OTAN.

Díaz se mostró ayer tajante ayer al defender que "la obligación del Gobierno es presentarlos». En una entrevista en Telecinco señaló que "si, después no salen, pues lógicamente habrá que tomar una decisión", que no explicitó aunque entre los instrumentos factibles están las ampliaciones de crédito. Lo cierto es que a Sumar no le ha pillado por sorpresa que el Gobierno baraje ir a un nuevo año presupuestario en blanco y sin presentar cuentas. Ya tenía conocimiento por vía directa de las intenciones del socio mayoritario de no llevar un anteproyecto al Consejo de Ministros para evitar, posteriormente, trasladarlo al Parlamento.

Los socios minoritarios dependen de los Presupuestos "para avanzar en medidas sociales"

Los socios minoritarios son conscientes de lo endiablado de la aritmética parlamentaria, pero del mismo modo dependen de los Presupuestos "para avanzar en medidas sociales que siempre les cuesta (a los socialistas) porque arrastran mucho los pies", llámese salario mínimo, reducción de jornada laboral, renta universal por crianza o el próximo estatuto del becario. "Pero el escenario ha cambiado", admiten, y la partida en Defensa lo distorsiona todo. Tampoco al PSOE le gusta la palabra "rearme", consciente del daño que hace entre un sector de su electorado.

A la tesis de Díaz sobre la importancia de tener cuentas públicas se ha sumado uno de sus principales aliados, a saber, el secretario general de CCOO, Unai Sordo. Tras asistir ayer a una conferencia económica del presidente de la Generalitat catalán, Salvador Illa, en Madrid, instó al Ejecutivo a elaborar unos presupuestos para este año. Pero también reclamó a los socios parlamentarios a tener "altura de miras". Defiende que en estos momentos "es muy importante la estabilidad institucional" dado que los que serian los primeros presupuestos de esta legislatura podrían permitir la continuidad del actual ejecutivo de coalición hasta 2027.

Año y medio de legislatura sin Presupuestos Generales

"España no se puede permitir continuar indefinidamente sin Presupuestos o no debería permitírselo y creo que es un momento de levantar un poco la vista y ver lo que está pasando a nivel europeo y a nivel mundial, aunque quizá sea un poco predicar en el desierto", señaló Sordo.

En Sumar desligan la petición de Díaz para que Montero cumpla con su deber constitucional de redactar unos Presupuestos con el enfrentamiento entre ambas vicepresidentas por el anunciado veto del Gobierno a la proposición de ley de Sumar para evitar que el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) tribute en el IRPF. La vicepresidenta primera tiene hasta el día 28 para presentar dicho veto, que magentas y PP levantarán posteriormente en la Mesa del Congreso para su tramitación parlamentaria. Y salvo estrategias dilatorias -como ir ampliando sine die el plazo de enmiendas- tiene todos los visos de salir adelante.

Lo cierto es que, sin Presupuestos Generales del Estado tampoco para este año, los socialistas evitan ir a una negociación agónica. Pero también Sumar y el resto de los aliados contrarios al gasto militar se ahorran tener que retratarse y rechazar, llegado el caso, las cuentas en el Parlamento, con lo que eso tendría de sensación de fin de ciclo, de derrota en toda regla de la coalición gubernamental y de sus socios con las únicas excepciones de PNV y Junts.

ERC daba por hecho que no se presentarían nuevas cuentas

Desde ERC confiesan que "damos por hecho desde hace ya un tiempo que Montero no presentará cuentas". Los independentistas republicanos van más lejos: "no habrá presupuestos este año ni en el Estado ni en Cataluña" y el líder de ERC, Oriol Junqueras, riza el rizo al augurar que, si además, "no se cumplen los compromisos adquiridos con nosotros, tampoco los habrá en 2026", según afirmó en una entrevista en la "La hora de la 1" de TVE. Cuando se habla de compromisos adquiridos los de ERC sólo piensan en dos cosas, la quita de la deuda y la financiación "singular" y en el convencimiento de que se puede avanzar en esos dos frentes sin Presupuestos.

Por su parte, en Podemos llevan semanas cuestionando la viabilidad de unas nuevas cuentas y confirman que no ha habido siquiera por parte del Gobierno un conato de intento de negociación. Sin embargo, lo cierto es que creen que "no se dan las condiciones ahora mismo para sentarse a negociar unos Presupuestos". De hecho, los morados decidieron adelantar su quinta asamblea ciudadana estatal a los días 11 y 12 de abril ante un "plausible" adelanto electoral, afirmó en su momento el secretario de Organización, Pablo Fernández. "Queremos estar preparados ante la situación de evidente debilidad y parálisis del Gobierno", explicó para justificar un calendario congresual que les permita tener al partido preparado y engrasado por si hay consulta ante las urnas.