El rey emérito logró una rentabilidad del 7% anual con su cuenta suiza mientras la bolsa caía un 46%
Juan Carlos I mantuvo casi íntegros, gracias a las recomendaciones del gestor Arturo Fasana, los 64,8 millones de euros que recibió de Arabia Saudí y entregó más tarde a Corinna Larsen, a pesar de sacar grandes sumas de efectivo