Del surf al skate: los nuevos deportes olímpicos en Tokio 2020

El atletismo, la natación y la gimnasia siguen siendo los deportes más emblemáticos de los Juegos Olímpicos. Sin embargo, el Comité Olímpico Internacional lleva años innovando, probando con nuevas disciplinas y modificando el programa.

Los Juegos de Tokio, que comenzarán el 23 de julio con la ceremonia de inauguración en el Estadio Nacional, supondrán el debut olímpico de cuatro deportes: surf, skateboarding, escalada y el kárate. Además, regresa al programa el béisbol/sóftbol y el baloncesto tendrá una nueva categoría, el 3x3 callejero. A continuación, una explicación de los cuatro deportes que se estrenarán en los Juegos Olímpicos de Tokio:

Skateboaording, el deporte callejero

Es una de las grandes apuestas del Comité Olímpico Internacional para captar la mirada del público joven. El monopatín tendrá dos disciplinas, park y street, y en ambos casos participarán hombres y mujeres

En la modalidad de street, los patinadores circularán por un recorrido recto que imita a una calle y tendrán que hacer piruetas por escaleras, barandillas, bordillos, saltos y bancos. La competición será individual y los jueces valorarán los trucos en función de dificultad, altura, velocidad, originalidad, ejecución y composición.

En la otra modalidad, park, los skaters se enfrentan a una pista cerrada con una serie de desniveles y curvas, al estilo de los skateparks callejeros. En esta competición se realizan acrobacias en el aire, que también serán puntuadas por un jurado.

Surf, la ola olímpica

Las pruebas del hermano acuático del skate se desarrollarán en la playa de Tsurigasaki, en aguas del Pacífico. Habrá una competición masculina y otra femenina de shortboard, la tabla tradicional. Habrá una primera ronda de 30 minutos -un director técnico elegirá el momento en función de las condiciones meteorológicas- en la que cada surfista podrá montar como mucho 25 olas. Sin embargo, solo las dos con la puntuación más alta serán las que cuenten para la clasificación.

Habrá cinco jueces que se encargarán de puntuar cada ola de cada surfista en función de varios parámetros: grado de dificultad, maniobras innovadoras, combinaciones de maniobras con calidad, variedad, velocidad, dominio y estilo.

Escalada, el reto vertical

Un arnés, pies de gato y una pared para subir a la mayor velocidad posible. En eso consiste a grandes rasgos la escalada, que contará en su estreno olímpico una única prueba que será la combinación de tres disciplinas: velocidad, escalada en bloque (también conocida como búlder) y dificultad.

La escalada de velocidad enfrenta a dos escaladores en una pared de 15 metros. En búlder, los competidores tienen que escalar un número determinado de vías fijas en una pared de 4,5 metros en un tiempo establecido. Mientras, en la prueba de dificultad los escaladores tienen que subir lo más alto que puedan en una pared de 15 metros. El podio se decidirá por la suma de las puntuaciones en las tres disciplinas.

Kárate, un visto y no visto

Tokio será el inicio de la aventura olímpica del kárate. Pero también el final, porque el Comité Organizador de París 2024 ha decidido no incluirlo en su programa. De origen japonés, el kárate tendrá en Tokio dos pruebas, kata (formas) y kumite (combate), que se celebrarán en el Nippon Budokan. Habrá tres categorías masculinas: -67kg, -75kg, +75kg en hombres y -55kg, -61kg, +61kg en mujeres.

Las katas son demostraciones de formas que consisten en una serie de movimientos ofensivos y defensivos dirigidos a un oponente virtual. Los competidores eligen la kata que exhibirán de entre las 102 reconocidas por la Federación Mundial de Kárate y serán siete los jueces que puntuarán. Las dos mejores notas y las dos peores se desechan y son las tres de en medio las que cuentan.

En kumite, dos karatekas se enfrentan entre sí con el objetivo de dar golpes en determinadas partes del cuerpo de su rival que se puntúan entre uno y tres. El combate se acaba cuando un karateka tiene ocho puntos más que su rival o consiguiendo más puntos durante los tres minutos que dura el cara el cara.