Rafael Nadal ha sacado adelante un partido épico en el que se ha impuesto en cinco sets (3-6, 7-5, 3-6, 7-5 y 7-6 (10-4)) frente al norteamericano Taylor Fritz y sus propios problemas físicos. El tenista español arrancó bien el partido, pero fue reduciendo la velocidad de sus saques y el rango de sus movimientos aquejado de una lesión abdominal. Ya durante el torneo se le había visto con vendajes en la zona para agarrar el músculo.

Nadal empezó el partido con ruptura de saque y 3-1 arriba, pero no aprovechó las oportunidades para consolidar su ventaja y perdió cinco juegos consecutivos para ceder el set por 3-6. En el segundo empezó 3-0 arriba, pero volvió a perder los 3 juegos siguientes. Mantuvo su saque para el 4-3, ya visiblemente dolorido, y fue entonces cuando acudió al vestuario para recibir tratamiento médico, mientras su padre le hacía gestos para que abandonase el partido.

A su vuelta, el espigado norteamericano le recibió con un juego en blanco al saque al que Nadal intentó reaccionar con subidas a la red y golpes más agresivos para acortar los puntos. A partir de ahí, el español pareció renacer e incluso se abonó a los globos y los intercambios largos antes de la ruptura definitiva para apuntarse el segundo set por 7-5.

Un espejismo disipado en el tercer set, en el que Fritz se mostró intratable en el saque frente a un Nadal de nuevo con dudas y que no llegó a tomar la iniciativa ni rematar sus puntos en la red. El americano se mostró cómodo para ganar 6-3 la manga y encarar el cuarto con confianza.

Con el apoyo casi total del público, Nadal sorprendió con el break en el primer juego del set, aunque Fritz se lo devolvió inmediatamente tras una doble falta inoportuna y la confianza en su revés a dos manos. Un toma y daca que volvió a aprovechar Nadal para romper el saque del americano y ponerse 2-1 arriba. Fue Nadal el primero en consolidar su saque para poner el 3-1 y el 4-2, pero no pudo hacerlo en el siguiente turno, permitiendo a Fritz ponerse con 4-4 y saque.

Aunque Nadal llevó el juego al deuce y tuvo punto para romperlo, Fritz arriesgó a las líneas y mantuvo su saque para el 4-5. Nadal consiguió lo mismo a continuación para el 5-5, cerrado con un ace cuando se cumplía la tercera hora de juego. Gasolina para el contundente break del 6-5 y el 7-5 definitivo en el set, con juego en blanco.

El set definitivo también empezó con rosco, pero a favor de Fritz, enrabietado en sus saques. Nadal mantuvo los suyos con algo más de trabajo, e incluso tuvo que llegar al deuce para salvar el 3-3 y encaminarse al dramático juego siguiente, en el que el balear tuvo que esperar a la cuarta oportunidad para conseguir el ansiado break. Un 4-3 que ponía el set de cara a Nadal, pero que Fritz se encargó de complicar con una reacción inmediata y un juego al saque que resolvió en las ventajas.

Del 4-3 al 4-5 con un Nadal al saque para mantenerse en el partido y poner el 5-5. Ninguna presión para Fritz, que sometió a Nadal otra vez a cañonazos para el 6-5, contestado con un juego en blanco para forzar el supertiebreak.

Rafa Nadal se medirá el viernes en semifinales con el polémico Nick Kyrgios, que arrasó en tres sets en su cruce de cuartos de final al chileno Garín. Por el otro lado del cuadro, Novak Djokovic tendrá que superar a Cameron Norrie si quiere pelear por su séptimo título en Wimbledon. Nadal sólo ha logrado dos en su carrera, en 2008 y 2010. En sus dos últimas participaciones alcanzó las semifinales.