La épica continúa del lado croata. La selección liderada por Luka Modric ha sellado su pase a los cuartos de final del Mundial en los penaltis y ha dejado fuera a Japón, que ha rozado superar su mejor clasificación en el torneo. La tanda de penaltis ya permitió a Croacia hacer historia en Rusia 2018, donde llegó a la final después de vencer mediante este desempate a la anfitriona y a Dinamarca. Livakovic se ha destacado como la gran figura de los croatas en la tanda decisiva con tres paradas que han aupado a Croacia a los cuartos de final.

El choque de octavos de final entre Japón y Croacia ha respondido a las expectativas que lo posicionaban como uno de los enfrentamientos más igualados de la primera ronda de eliminatorias y ha necesitado de la primera prórroga del Mundial de Qatar y de los penaltis para su resolución.

Modric felicita a Livakovic tras ganar a Japón en los penaltis.

La vigente subcampeona del mundo no ha podido en los 90 minutos con la sorprendente selección nipona,que casi se destaca como la matagigantes del torneo, ya que fue capaz de vencer a Alemania y a España en la fase de grupos y de estar a punto de acabar con las aspiraciones de Croacia en el Mundial.

El empate ha reflejado lo sucedido sobre el césped del Al Janoub, donde Japón se adelantó en una primera mitad en la que estuvo más cómoda y Croacia fue capaz de reponerse al golpe inicial para inclinar el campo hacia la portería de Gonda en los segundos 45 minutos.

El inicio del encuentro dejó a Croacia como dominadora del balón, mientras que Japón esperaba replegada. A medida que pasaban los minutos y los europeos no intimidaban, Japón subió la intensidad y amenazo con varias incorporaciones por las bandas. Croacia tuvo alguna oportunidad para adelantarse, pero Japón no se inquietó y aumentó su importancia según se acercaba el descanso.

Como hizo con Alemania y España, Japón apretó y sacó provecho de su superioridad momentánea. En sus mejores minutos, los nipones pisaron área croata y gracias a una dejada en un córner Maeda fusiló a Livakovic para poner el 1-0.

Los nipones salieron reforzados por el marcador del vestuario y mostraron buen tono al comienzo de la segunda parte. Sin embargo, para echar a Croacia del Mundial hace falta más. Cuando peor lo estaba pasando Croacia, los balcánicos empataron en el minuto 55 gracias a un martillazo de cabeza de Perisic a pase de Kovacic.

El gol espoleó al combinado liderado por Luka Modric, que rozó el tanto de la victoria con un disparo desde lejos. Croacia gozó de mayor protagonismo en el resto del partido y aunque no pudo concretar de manera clara, se apróximo más al tanto de la victoria que Japón, que se limitó a esperar a la prórroga.

Los 30 minutos adicionales no desequilibraron la balanza. Los dos equipos cargaban con 90 minutos de desgaste y con el peso mental de que un error a esas alturas era definitivo. Croacia acaparaba el esférico y el control de la prórroga, pero Japón jugaba sus armas a la contra con salidas veloces. Una de ellas generó uno de los pocos disparos con peligro del tiempo para el desempate con un chut de Mitoma que repelió con Livakovic. Los penaltis serían el juez que dictaminaría cuál de los dos conjuntos, asiático o europeo, formaría parte de los ocho que pelearán por el Mundial en Qatar.

Livakovic ha sido el héroe de los croatas después de lograr parar tres penalits a Minamino, Mitoma y Yoshida para permitir a su selección avanzar a cuartos de final. Excepto Livaja, todos los lanzadores croatas han resuelto con éxito su situación, siendo Pasalic el que ha marcado el último penalti para cerrar el pase a cuartos, donde Croacia jugará contra la favorita, Brasil que se exhibió goleando 4-1 a Corea del Sur.  El Croacia-Brasil será el viernes 9 de diciembre a las 16.00 horas en el Education City, el estadio de la jequesa Moza.