Los ex ministros socialistas Miguel Ángel Moratinos y María Antonia Trujillo, forofos de la causa marroquí, han refrendado en público su alegría por la incorporación de Marruecos a la candidatura ibérica que aspira a albergar el Mundial de fútbol de 2030, anunciada unilateralmente por Mohamed VI y confirmada un día después por las federaciones hispana y lusa.

"La candidatura, de salir elegida, será un sello que confirmará también la integridad territorial de un país como Marruecos en pleno desarrollo socioeconómico, con los jóvenes y el deporte como referencias nacionales", escribe la ex ministra de Vivienda María Antonia Trujillo en una tribuna publicada en las últimas horas en la prensa oficialista marroquí.

La candidatura confirmará la integridad territorial de un país como Marruecos, dice Trujillo

La socialista extremeña desvela uno de los objetivos de Rabat: emplear la cita mundial para reivindicar sus tesis expansionistas, con el más que probable intento de celebrar algunos de los partidos en los territorios ocupados del Sáhara Occidental, la ex colonia española que tiene pendiente aún el proceso de descolonización previsto por la ONU.

Trujillo, afincada en Marruecos, lleva meses en el ojo del huracán por sus reiteradas declaraciones instando a España a entregar las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, que la dictadura marroquí considera "presidios" sujetos a ser liberados. "Estamos ante una candidatura novedosa y demuestra que Marruecos es un país seguro, estable y preparado para organizar y acoger eventos internacionales de esta magnitud", desliza la ex ministra de José Luis Rodríguez Zapatero, quien también es defensor público de Rabat.

Moratinos, por su parte, ha calificado la adhesión marroquí a la candidatura de la península ibérica de "muy buena noticia", también declaraciones a la prensa oficialista marroquí. "Es una prueba más del enlace fijo entre Europa y Africa gracias a la amistad y cooperación entre Marruecos y la península ibérica. En este caso a través del fútbol", deslizó el ex ministro de Exteriores, actualmente Alto Representante de la ONU para la Alianza de Civilizaciones. Moratinos es uno de los hombre clave del giro copernicano del Gobierno de Sánchez en el conflicto del Sáhara, una resolución de la que se cumple el primer aniversario esta semana.

Tras el anuncio el martes de Mohamed VI a través de su ministro de Deportes, el mutismo se apoderó de las federaciones de fútbol portuguesa y española. La española evitó durante todo este miércoles responder a las peticiones de información de El Independiente. A última hora del miércoles, una declaración conjunta de ambas federación rompió el silencio. "Luis Rubiales y Fernando Gomes, presidentes respectivamente de la RFEF y la FPF, han alcanzado un acuerdo con Fouzi Lekjaa, presidente de la Real Federación Marroquí de Fútbol (FRMF), para conformar una candidatura transversal que sea lo más potente posible no solo a nivel deportivo, sino también en cuanto a infraestructuras y en términos sociales y culturales", explica el comunicado.

Según la declaración, los representantes de la Real Federación Marroquí de Fútbol se integrarán en breve a la Comisión de Coordinación del Mundial 2030, liderada por Antonio Laranjo. La candidatura cumplirá los plazos previstos del cuaderno de encargos de la FIFA. El plazo de entrega de candidaturas finaliza el próximo junio y la decisión se anunciará durante el tercer trimestre de 2024.

Otra de las incógnitas por resolver es si se mantiene Ucrania en la candidatura, tal y como se anunció el pasado octubre. La federación ucraniana se halla salpicada por un caso de corrupción. "Las Federaciones de España y Portugal confían en que la Federación de Ucrania y su presidente superen las dificultades por las que están atravesando en estos momentos, para poder presentar una candidatura conjunta de los cuatro países", dice escuetamente el comunicado.

La candidatura tripartita recibió este miércoles el respaldo de Pedro Sánchez y Antonio Costa desde la cumbre hispano-lusa que celebraba en Lanzarote. Sánchez presumió de que lanza un "muy buen mensaje" de colaboración entre las dos orillas del Mediterráneo, entre Europa y África. Costa, por su parte, manifestó que la candidatura conjunta de la Península Ibérica con Marruecos difunde un mensaje "muy positivo" de que dos continentes vecinos "que no son distantes y que no se quiere separar" desean trabajar unidos en un objetivo común. "Esto no puede más que ayudar a unir lo que nada puede separar", agregó.