Miguel Ángel Galán, presidente del Centro Nacional de Formación de Entrenadores de Fútbol (CENAFE), se ha erigido como el azote de Luis Rubiales. El también responsable de la destitución de Ángel María Villar, antecesor de Luis Rubiales al frente de la Real Federación de Fútbol Español (RFEF), fue el encargado de denunciar el acto del recién inhabilitado presidente de la Federación con la futbolista Jennifer Hermoso, a la que dio "un pico" durante la entrega de medallas del Mundial de Fútbol Femenino que conquistó España en Oceanía.
"Fui la primera persona en denunciar a Luis Rubiales. Yo no esperé al presidente del Gobierno ni a nadie. Cuando vi las imágenes tuve claro que se trataba de una agresión sexual y así lo denuncié el mismo día que sucedió", señala en conversación con El Independiente Galán, en guerra con la Federación desde hace 16 años por la negativa del organismo a otorgar la licencia UEFA Pro a los entrenadores que se forman con CENAFE y no con la RFEF.
Galán señala directamente al Ejecutivo que encabeza Pedro Sánchez como "responsable de que Rubiales haya permanecido al frente de la Federación estos cinco años pese a la serie de escándalos que ha protagonizado". El presidente de CENAFE apunta a dos nombres propios: José Manuel Franco, presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD) entre 2021 y 2023, y al presidente del Gobierno; "Fueron los que salvaron la cabeza de Rubiales en el pasado".
El primer denunciante de Rubiales por el beso a Hermoso que ha desembocado en la inhabilitación cautelar por la FIFA, destaca que "el Gobierno ha tenido varias oportunidades para destituirle, aunque, le ha mantenido en el cargo porque le interesaba". Galán apunta que el que fuera director general del CSD, Albert Soler, señaló que había que elevar al TAD (Tribunal de Arbitraje del Deporte) su denuncia a Rubiales por llevar la Supercopa de España a Arabia Saudí y por los 24 millones de euros en comisiones a Kosmos, compañía de Gerard Piqué; sin embargo, "no me hicieron caso porque consideraron que había que proteger a Rubiales para tener un equilibrio de poder: el PSOE tenía a Rubiales y el PP a Javier Tebas (presidente de La Liga). Metieron mi denuncia en un cajón".
El presidente de CENAFE y archienemigo de Rubiales; "incluso me puso un detective durante seis meses"; condena la actitud del Gobierno con el dirigente, ya que considera que ha actuado a su antojo y no de acuerdo con lo mejor para el del fútbol español y la sociedad: "¿Qué pasa, Rubiales ya no es socialista? De repente se ha convertido en un leproso, pero cuando el Gobierno fue el que tuvo la oportunidad de inhabilitarle no lo hicieron porque les interesaba mantenerle en el cargo".
Cambios en la Federación
El denunciante que ha provocado que la Fiscalía inicie una vía penal por agresión sexual contra Rubiales por el beso a Hermoso, considera que el CSD es el primer interesado en sacar a Rubiales de la Federación. "Ya han quedado dañados porque la FIFA se ha adelantado en la inhabilitación, ya que si ellos el lunes cuando reciben mi denuncia y la mandan al TAD se habría suspendido cautelarmente antes a Rubiales. No lo hicieron así porque se creyeron el cuento de que iba a dimitir", explica Galán.
Rubiales está muerto políticamente hablando, ahora lo que hay que hacer es acabar con sus tentáculos
miguel ángel galán, presidente de cenafe
El discrepante del por ahora inhabilitado cautelarmente, apunta a Andreu Camps y Tomas González Cueto como "los tiburones legales de Rubiales". "Si ellos no salen de la RFEF no va a cambiar nada. Son su cerebro jurídico. Camps, en calidad de secretario general, ha hecho un Villar al pedir a la UEFA que suspenda a todos los equipos españoles y a la Selección. Lo hace para presionar al Gobierno para que no haya tanto ruido", lamenta el presidente de CENAFE, que recalca que "el fin político de Rubiales no lo para nadie porque todo el mundo está de acuerdo en que hay que cambiar con el machismo que existe en el fútbol".
Galán pone el foco sobre la Asamblea General de la Federación, ya que asevera que la mejor forma de destituir a Rubiales sería mediante una moción de censura que se activa con el apoyo de un tercio de los asamblearios. "Tal y como están las cosas para Rubiales parece fácil conseguir este respaldo. Así se convocarían unas elecciones para regenerar el organismo con un candidato virgen de toda polémica, que no haya estado nunca en la Federación, cualificado, capaz de tender puentes y de dialogar con los que no están de acuerdo y de de dar voz a los que, como es mi caso, hemos estado denostados y reprimidos por el ente".
"Todo el mundo ha tragado menos yo, que llevo 16 años contra Villar y Rubiales. Me he dejado una fortuna y mi vida en este tiempo, por eso ahora tengo satisfacción de que gracias a mi lucha de David contra Goliat saqué a Villar de la Federación y sacaré a Rubiales. Me queda lo más importante, que es solucionar el problema de los entrenadores con la licencia UEFA Pro", concluye Galán, presidente de CENAFE y primer denunciante de Rubiales por el beso a Hermoso.
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