La agresión de un responsable de la Grada Fans del Real Madrid en el Santiago Bernabéu durante el derbi ante el Atlético de Madrid ha reabierto un enfrentamiento ya histórico entre la sección de animación del club y los Ultras Sur, antiguos dueños del mítico fondo.

Los hechos, adelantados en primicia por El Independiente, ocurrieron pocos minutos después de las 21 horas de este pasado domingo. El sector de animación del club blanco desplegó un gran tifo, la clásica pancarta que se colocan en los fondos, para arengar a sus jugadores. En un momento, antes del inicio del encuentro, la parte izquierda, donde empezaba el texto, se descolgó y rompió.

La imagen corrió rápidamente por las redes sociales. Aficionados del Atlético aprovecharon para reírse del eterno rival. Lo que pareció un accidente, según Grada Fans, fue un acto hecho a propósito por un grupo de aficionados de Ultras Sur, los radicales del Madrid que tienen, en principio, prohibida la entrada al estadio. Otras imágenes dejan entrever que la tela se rompió por culpa de la mala colocación de los organizadores del tifo. Algunos miembros de la vieja guardia, hoy integrados en la Grada Fans, subieron las primeras escaleras del Bernabéu para enfrentarse a sus antiguos camaradas.

La voz cantante de la defensa del tifo la llevó un líder de la Grada Fans, Carlos Clara, interceptado en 2014 con una navaja cuando se disponía a entrar al estadio. Él y otras 10 personas habrían increpado a otro hooligan por la rotura de la lona. Las palabras llegaron a mayores y Clara terminó agrediéndolo. Los miembros de seguridad avisaron a los agentes de Policía que trabajaban durante el encuentro y estos acudieron hasta el lugar.

La bronca se saldó con Clara detenido por un delito de lesiones. El agredido terminó con una brecha, por lo que tuvo que ser trasladado al Hospital La Paz, donde recibió varios puntos de sutura, según fuentes policiales. Además, la Policía identificó a otras 10 personas que fueron expulsados del Bernabéu.

La Ley del Deporte contempla multas de hasta 650.000 euros para los organizadores de eventos deportivos que no pongan las medidas adecuadas para garantizar que no se producen episodios violentos en los estadios. Al agresor se le podría expulsar definitivamente de cualquir recinto deportivo.

La lucha por la animación del Real Madrid

Ultras Sur, fundado en 1980, residió detrás de la portería que da a la Avenida de Concha Espina durante 33 años. Los aficionados radicales del Real Madrid, como sucedía habitualmente en los clubes españoles, gozaba de ciertos privilegios que le otorgaba la institución.

Como sector fuerte del estadio, Ultras Sur recibía entradas a precio de saldo para repartir entre sus simpatizantes. El control de estas entradas, que después eran revendidas y reportaban un importante beneficio, generó hace más de 10 años una brutal guerra interna dentro del grupo entre los veteranos y los jóvenes, cuya importancia en Ultras Sur crecía.

La brecha entre la chavalada de Ultras Sur y los más veteranos dejó en noviembre de 2013, en la previa de un Real Madrid-Real Sociedad, una pelea a botellazos que requirió intervención policial en el Drakkar, local de culto de los radicales que se situaba en la calle Marceliano Santamaría.

Los medios informaron entonces de que el conflicto respondía a una lucha de poder por la animación del Real Madrid, con todo lo que ello conllevaba: principalmente la gestión de entradas practicamente regaladas. El Real Madrid aprovechó la crisis interna en Ultras Sur y la Ley del Deporte para expulsar a los radicales sus gradas, aunque el conflicto no terminó de desaparecer. De hecho, vivió su punto de mayor tensión en junio de 2014, meses después del portazo a Ultras Sur del Bernabéu y de la bienvenida a la Grada Joven, después rebautizada como Grada Fans.

El Real Madrid impuso unos requisitos para ser parte del nuevo fondo que permitió que miembros 'arrepentidos' de Ultras Sur, pasasen a ser parte de Grada Fans. Uno de los nombres más destacados es el de José Luis Ochaíta, histórico capo de Ultras Sur y ahora al mando de Peña Veteranos. Según han transmitido fuentes próximas al entorno de Ultras Sur, Carlos Clara, líder de 'La Clásica' detenido en el derbi, nunca ha tenido un papel señaladao en el fondo del Bernabéu desde 1980. "Iba al fútbol, pero no tenía nada que ver con lo que era Ultras Sur. No pintaba nada", apuntan.

Carlos Clara es requerido por el personal de seguridad en el derbi frente al Atlético de Madrid

Con los Ochaíta y A.C, antes hombre fuerte de los Ultras Sur, a un lado de la cúspide de poder del grupo, Antonio Menéndez Mories 'El Niño Skin' y Francisco Javier Antuñaño 'El Fichaje' tomaron galones en la facción. A.C. mantuvo el control sobre las entradas del fondo, algo que unido a la traición por la Grada Fans incendió la ira de 'El Niño Skin' y 'El Fichaje'.

Los nuevos peces gordos de Ultras Sur aprovecharon el funeral de un habitual del fondo y asaltaron a A.C a la salida de la Parroquia de los Sagrados Corazones. A.C, acorralado por 'El Niño' y 'El Fichaje', echó mano de una pistola del calibre 6,35. Según apuntó entonces El Mundo, la policía secreta aparcada junto a la iglesia evitó que la reyerta fuera a más, aunque acabó con unas 100 personas identificadas y la detención de A.C.

El episodio vivido en el derbi devuelve la violencia al Santiago Bernabéu. Los mensajes que circulan entre simpatizantes de Ultras Sur, ofendidos por la agresión a uno de los suyos por la rotura del tifo apuntan a un enfrentamiento entre Ultras Sur y la Grada Fans.