La tercera generación del Audi Q5 pretende seguir cosechando el éxito que acompaña a este modelo desde su lanzamiento comercial en 2008. Desde esta fecha hasta el momento actual se han vendido en todo el mundo 2,7 millones de unidades de las dos generaciones anteriores, que se han ocupado de dejar un camino libre de obstáculos para el nuevo Audi Q5. Este todocamino de tamaño medio que con una longitud de 4,72 m se ubica dentro del segmento D-SUV sigue ofreciéndose con dos tipos de carrocería, la convencional SUV y la Sportback de corte coupé. En lo que respecta a las preferencias de la clientela, el 38% se decanta por la carrocería convencional mientras el 62% restante se inclina por la silueta coupé (Sportback), que tiene un sobrecoste de 2.300 euros.

Con el nuevo Audi Q5 la marca de los cuatro aros comienza la renovación de toda su cartera de modelos SUV con motores de combustión y variantes parcialmente electrificadas. Una renovación por todo lo alto en tanto llega cargada de tecnología a nivel de propulsores, chasis, sistemas de ayudas a la conducción, firmas lumínicas personalizables y un avanzado sistema multimedia. Desarrollado sobre la Plataforma Premium de Combustión (PPC), es el primer todocamino de Audi que utiliza dicha plataforma asociada a eficientes motores de gasolina y diésel que adoptan un sistema de hibridación ligera de 48 V (MHEV).

Sofisticadas ópticas traseras con tecnología OLED que permiten varias firmas lumínicas y funciones de advertencia a otros conductores

Pantalla multimedia adicional

En el interior, frente al conductor, se encuentra la pantalla del cuadro de instrumentos de 11,9 pulgadas (Audi Virtual Cockpit) y a su derecha e integrada en la misma estructura se ubica la pantalla táctil de 14,5 pulgadas del sistema multimedia (MMI). Ambas cuentan con tecnología OLED y ofrecen una magnifica resolución y visualización con cualquier condición de luz ambiental. El manejo de la pantalla multimedia no es que resulte en si mismo complejo, lo que ocurre es que facilita tal cantidad de información que necesita un periodo de adaptación para extraer todo el potencial que encierra. Opcionalmente el acompañante puede disponer de su propia pantalla multimedia, en este caso de 10,9 pulgadas. Esta pantalla cuenta con un modo de privacidad que evita que el conductor se distraiga mientras conduce. Muestra el contenido únicamente al acompañante mientras el conductor solo ve una pantalla negra.

Diseño muy limpio a la par que atractivo el del conjunto salpicadero consola central. Las pantallas siguen siendo las principales protagonistas

A nivel de habitabilidad y versatilidad la posibilidad de desplazamiento longitudinal del asiento posterior permite jugar con el espacio disponible para beneficio de los pasajeros o bien del maletero. El maletero firma un volumen de 520 l ampliable hasta los 1.473 l al abatir el respaldo del asiento trasero, que en el caso del  Audi SQ5 se queda en 475 l y 1.446 l respectivamente. Además, para ganar espacio para los equipajes, la cubierta de la zona de carga puede guardarse en un compartimento habilitado específicamente bajo el piso del maletero.

Ópticas con tecnología OLED

Con respecto al diseño exterior el nuevo Audi Q5 se presenta más estilizado que su antecesor, mostrando un equilibrio perfecto entre formas y volúmenes que da como resultado una mayor carga de deportividad. El frontal, que emana elegancia y deportividad a partes iguales, adopta la parrilla octogonal que caracteriza a los SUV de Audi. Va  flanqueada por unos estilizados faros con los que  comparte protagonismo así como por dos grandes entradas de aire verticales. El acabado exterior S line es portador de unos apliques cromados en antracita mate en las entradas de aire mientras en el modelo S presentan un acabado en plata mate.

Impecable el aspecto y la comodidad que ofrecen los asientos del acabado Black line, con tapicería mixta en microfibra y cuero y acolchado de rombos

En la parte trasera destaca un difusor integrado en el paragolpes. Tanto la posición como la forma de los tubos de escape dependen de la motorización. Los modelos con motor diésel portan un doble tubo cuadrado situado bajo el difusor en el lado izquierdo, mientras  para los de gasolina los escapes rectangulares van posicionados en los extremos, a derecha e izquierda.  El modelo tope de gama, el SQ5, muestra su poderío a través de las emblemáticas cuatro salidas de escape redondas. Capítulo aparte cabe reseñar la sofisticación de los elementos de iluminación. Las ópticas traseras con tecnología OLED lucen un diseño tridimensional que une el mundo físico y el digital en perfecta armonía. Muy curioso resulta el detalle de la tercera luz de freno, que se proyecta sobre la parte superior de luneta trasera para aumentar la superficie luminosa, haciéndola más visible.

Los pilotos traseros digitales OLED de segunda generación constan de seis paneles digitales OLED, con un total de 266 segmentos, que generan una nueva imagen varias veces por segundo mediante un algoritmo especialmente desarrollado. Autorizan varias firmas lumínicas personalizables a gusto del usuario (hasta ocho), además de añadir otras funciones relacionadas con la seguridad. Cada firma dispone de una escena de bienvenida y despedida específica cuando se abre o se cierra el vehículo. Por primera vez estas ópticas pueden comunicarse con el entorno del vehículo de forma selectiva, ampliándose la detección de proximidad mediante la luz de comunicación que advierte a otros usuarios de la vía de accidentes y averías.

El modelo que corona la gama Audi Q5 es el SQ5, que adopta detalles estéticos específicos y va propulsado por un motor V6 de gasolina con 367 CV

Motores de combustión con hibridación ligera de 48 V

La gama Audi Q5 acoge tres motores, dos de gasolina y uno diésel. En gasolina ofrece un motor 2.0 TFSI de 4 cilindros en línea con 2 litros de cilindrada que arroja 204 CV. Con la misma estructura de 4 cilindros en línea y 2 litros de cilindrada hay disponible un propulsor diésel 2.0 TDI que desarrolla asimismo 204 CV. Ambos propulsores llevan asociado un cambio automático S tronic de doble embrague con 7 relaciones, pero mientras la motorización de gasolina puede incluir variantes de tracción delantera e integral Quattro el diésel solo está disponible con tracción integral Quattro. Corona la gama de mecánicas el motor de gasolina 3.0 V6 TFSI que propulsa al potente modelo SQ5. Se trata de un propulsor V6 de 3 litros que desarrolla 367 CV asociado al sistema de tracción integral Quattro y a una caja de cambios automática S tronic de doble embrague con 7 velocidades. Cabe reseñar que este SQ5, de vocación marcadamente deportiva, en la tercera generación del Audi Q5 ha sustituido la anterior potente mecánica diésel  V6 de 3 litros (341 CV) en favor de esta de gasolina (367 CV). Más adelante se unirá a la gama una variante hibrida enchufable que tendrá como base el motor 2.0 TFSI, y que estrenará la denominación ehybrid en lugar de la utilizada hasta el momento TFSIe.

El sonido que emiten las cuatro salidas de escape del SQ5 es realmente embriagador. Las llantas de aleación de 21 pulgadas están firmadas por Audi Sport

En el apartado de las prestaciones y de los consumos, tanto el 2.0 TFSI como el 2.0 TDI firman una velocidad máxima de 226 km/h, pero el de gasolina acelera de 0 a 100 km/h en 8,6 s mientras el diésel invierte 7,4 s. El 2.0 TFSI tiene un consumo combinado en ciclo WLTP de 6,5 l/100 km frente a los 5,9 l/100 km del 2.0 TDI. En otra liga distinta juega el exclusivo Audi SQ5, pues sus prestaciones son las de un auténtico deportivo aderezadas con el embriagador sonido que regala su potente mecánica de 367 CV. Su velocidad máxima está limitada electrónicamente a 250 km/h, invirtiendo solamente 4,5 s en pasar de 0 a 100 km/h, en tanto el consumo combinado en ciclo WLTP asciende a  8,2 l/100 km.

Pero el gran as que guarda el nuevo Audi Q5 es que todos sus motores llevan asociado un sistema de hibridación ligera de 48 V (MHEV), lo que aparte de las ventajas en cuanto a funcionamiento y eficiencia se refiere, el gran beneficio sin lugar a dudas para muchos usuarios  viene de la mano de que todos los modelos que componen la gama Audi Q5 son portadores de la etiqueta medioambiental Eco. La tecnología MHEV adopta un motor eléctrico de 24 CV que ayuda al motor de combustión y reduce las emisiones. Puede mover por si mismo el coche en maniobras de aparcamiento y a bajas velocidades, alimentándose de una batería de 1,7 kWh de capacidad. Al decelerar oficia de generador cargando la batería, devolviéndola hasta 25 kW.

Muy práctico el compartimento habilitado bajo el piso del maletero que sirve para guardar la cubierta que cubre los equipajes, y así aumentar la altura de carga

El nuevo Audi Q5 muestra un rodar exquisito, con un tacto de conducción de lo más agradable. Puede afirmarse con respecto a la anterior generación que ha ganado en dinamismo conservando el confort de marcha que ya tenía. La relación entre confort y agilidad es de lo más equilibrado que puede encontrarse en el mercado. De serie adopta una suspensión de muelles helicoidales con amortiguadores FSD de frecuencia selectiva. Esta suspensión suaviza la amortiguación con frecuencias elevadas como, por ejemplo, al rodar sobre pavimento adoquinado. Por el contrario a bajas frecuencias adopta una amortiguación más rígida, como a la hora de negociar curvas o en los cambios de carril. Opcionalmente puede equipar una suspensión neumática con amortiguadores de control adaptativo que puede configurarse mediante el Audi drive Select. En comparación con el modelo anterior ofrece mayor diferenciación entre el modo orientado al confort y el programa más deportivo. También es de serie la dirección progresiva.

Tres niveles de acabado

Hay disponibles once colores para la carrocería y tres niveles de acabado: Advanced, S line y Black line, disponibles con todos los motores, mientras el modelo SQ5 adopta una apariencia exterior específica. En los acabados S line, Black line y en el modelo SQ5 las tomas de aire delanteras son más grandes y el difusor trasero es mucho más deportivo. El paquete exterior negro viene incorporado de serie en la versión Black line y también está disponible para el modelo SQ5. El acabado Advanced incorpora elementos como las llantas de aleación de 18 pulgadas, los faros Led Plus, el climatizador de tres zonas, los retrovisores plegables eléctricamente y calefactados, el cuadro de instrumentos digital, los asientos delanteros calefactables, el asistente de aparcamiento, el control de crucero adaptativo, los asistentes de esquiva y viraje, los asistentes de frenado de emergencia y tráfico transversal delantero, etc. Un equipamiento de serie muy completo

El pasajero delantero puede disponer de una pantalla multimedia de 10,9 pulgadas, que es de serie en el SQ5 y opcional en el resto de la gama Q5

Sobre el equipamiento Advanced, las versiones S line añaden: los paquetes exterior e interior S line, llantas de 19 pulgadas, asientos deportivos delanteros con ajuste eléctrico, tapicería de tela con costuras de contraste, volante deportivo achatado en su parte superior e inferior, etc. El sobreprecio del acabado S line respecto al Advanced es de 3.500 euros. Como acabado más deportivo, la edición Black line suma al acabado S line por 5.500 euros, las llantas de 20 pulgadas de Audi Sport, cristales oscurecidos, asientos eléctricos, tapicería mixta en microfibra y cuero con acolchado de rombos y grabado S, y el paquete de estilo negro. Dicho paquete incluye detalles como los embellecedores oscuros, el logo con los aros Audi en gris antracita, las barras longitudinales de techo y carcasas de retrovisores en negro, y los embellecedores de las salidas de escape cromados en color oscuro.

Por último, en el equipamiento de serie del SQ5 destacan las llantas de aleación de 21 pulgadas de Audi Sport, el tren de rodaje deportivo, los faros Matrix Led, las pinzas de freno pintadas en rojo, la llave de confort y la pantalla multimedia para el pasajero delantero, entre otros muchos elementos. Los precios para las versiones 2.0 TFSI parten de 61.600 euros hasta 73.300 euros, en tanto la horquilla de precios para las versiones 2.0 TDI se mueve entre 65.250 y 74.650 euros. Como tope de gama, el SQ5 cuesta 94.690 euros.