El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha dedicado buena parte de sus últimas intervenciones parlamentarias a lanzar un mensaje que se puede entender como un aviso, una forma quitarse un peso de encima o una llamada a la democracia con mayúsculas: “Todos los partidos son corresponsables de que podamos reducir el déficit al 3,1% del PIB este año puesto que el Gobierno está en minoría”.
Lo hizo la pasada semana en la Comisión de Hacienda en el Congreso de los Diputados. Pero aún más tiempo le ha dedicado a esta cuestión en la Comisión correspondiente en el Senado, tras el último informe de Bruselas.
La Comisión Europea ha dado el visto bueno al Plan Presupuestario 2017 del Gobierno, pero advierte de que puede haber una desviación de dos décimas respecto al objetivo de déficit del 3,1% del PIB este año. Ello supondría la necesidad de ajustar otros 2.000 millones de euros.
Montoro, que sigue defendiendo que las medidas necesarias de reequilibrio para este año ya se han tomado, ha indicado en cambio que, de producirse la desviación de la que habla Hacienda, la responsabilidad de volver de la zanja al camino será de todos.
“Tenemos que seguir las advertencias de Bruselas de que tenemos la obligación de adoptar las medidas necesarias a medida que transcurra este ejercicio para garantizar la reducción del déficit público”, ha dicho, para añadir: “el Gobierno no lo puede hacer en solitario”.
Estas palabras, que también sonaron de una u otra forma durante la pasada legislatura, tienen en estos momentos una carga aún mayor. El Gobierno del PP ya no tiene mayoría absoluta en el Parlamento y, lo que antes era un ofrecimiento al consenso, ahora es una cuestión “aritmética”, como ha admitido el propio ministro de Hacienda.
El aviso
Una de las llamadas a esta colaboración se ha referido a la política fiscal. Montoro ha insistido en que el proyecto del Gobierno sigue incluyendo una rebaja del IRPF a lo largo de la legislatura y la exención en el impuesto para aquellos que quieran alargar su vida laboral más allá de la edad legal de jubilación.
“Lo tenemos que hacer viable en esta legislatura, pero para eso tenemos que contar con otros grupos. Lo haremos siempre que nos dejen”, ha avisado Montoro.
Soltar lastre
Una vez más, el ministro de Hacienda ha recordado el último informe de Bruselas sobre los Presupuestos para 2017. Montoro no ha dado nada por hecho. Según los planes del Gobierno, no habrá que adoptar nuevas medidas de ajuste, pero, en el caso de que finalmente se produjera dicha desviación y hubiese que hacerlo, ha advertido de que “todos los partidos tienen las corresponsabilidad de la política presupuestaria, puesto que el Gobierno está en minoría”.
La llamada demócrata
Por último, Montoro ha vuelto a llamar al acuerdo cuando se ha referido a la reforma del sistema de financiación autonómica y local planteada en la VI Conferencia de Presidentes, sobre el que las administraciones organizan la financiación de servicios como la sanidad o la educación.
Según ha recordado, una vez se constituya en un mes el comité de expertos que establecerá el punto de partida, toda propuesta deberá ser aprobada por el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) y la Comisión Nacional de la Administración Local (CNAL).
Sin embargo, ha ahondado en que “ya se puede votar lo que sea (en estas instancias), que si no se aprueba en el Congreso no llegará al Senado, y ustedes (los senadores) no tendrán oportunidad de votar nada”.
“Hay que entenderse y vamos a entendernos. Vamos a verlo por el lado positivo”, ha dicho.
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