Ryanair frena en seco su crecimiento en pasajeros por la ola de cancelaciones masivas

Ryanair empieza a notar el impacto de las cancelaciones masivas de vuelos en sus estadísticas de tráfico de viajeros. El gigante del bajo coste transportó en todo 2017 un total de 129 millones de pasajeros, lo que supone un fuerte incremento del 10,2% en el conjunto del año. Pero el dato, aparentemente bueno, esconde un auténtico frenazo en el número de viajeros en los últimos meses.

Ryanair inició el pasado septiembre una profunda reestructuración de sus operaciones para hacer frente a la desbandada de pilotos a compañías rivales y problemas de organización de su plantilla, que derivó en la cancelación de unos 18.000 vuelos hasta el próximo marzo.

Hasta entonces, la aerolínea venía registrando mes a mes incrementos de su cifra de pasajeros de dos dígitos desde hace cuatro años. Todos los meses desde 2014 el gigante low cost ha venido aumentando su tráfico de viajeros aumentos de más del 10%, y muchos meses incluso las alzas rondaban el 30%. Hasta ahora.

Hasta el caos operativo de septiembre, la aerolínea acumulaba alzas cada mes de entre el 10 y el 30% desde hace cuatro años

El pasado octubre la evolución del crecimiento de pasajeros transportados por Ryanair frenó hasta el 8%, en noviembre ralentizó su marcha aún más hasta un crecimiento del 6%, y en diciembre volvió a frenar hasta el 3%, registrando así la menor tasa de incremento desde julio de 2014, según los registros de la propia compañía aérea.

Para reorganizar su red de vuelos, la compañía ha cerrado algunas rutas y ha reducido frecuencias en otras conexiones, dejando en tierra en los próximos meses hasta 25 aviones de su flota. El resultado es que el crecimiento del tráfico de pasajeros frenará en lo que queda de año fiscal (de abril a marzo), como ya había reconocido la propia Ryanair.

En la primera mitad del ejercicio venía creciendo a un ritmo del 11%, y la previsión de la compañía para el segundo semestre es que lo haga al 4%. Hasta ahora Ryanair preveía alcanzar los 131 millones de pasajeros en el conjunto del año fiscal, pero ha rebajado esa estimación hasta los 129 millones de clientes (la misma cifra que ha obtenido en el año natural 2017).

En paralelo, Ryanair calcula que las cancelaciones masivas le obligará a afrontar el pago de 25 millones de euros en indemnizaciones a pasajeros. A los que se sumarán otros 45 millones en costes adicionales por la mejora de las condiciones salariales y laborales ofrecidas a los pilotos para que se queden en la compañía y para fichar nuevos comandantes en los últimos. En total, 70 millones de euros que la aerolínea asumirá antes de que se termine su ejercicio fiscal, el próximo 31 de marzo.