Economía | Empresas

Boom de las pequeñas eléctricas: retan a los gigantes y suman ya 1,6 millones de clientes

Las comercializadoras independientes han sumado casi 700.000 nuevos hogares y pymes en tres años y concentran ya uno de cada diez pequeños clientes de España.

Contadores de electricidad. | europa press

Las cinco grandes eléctricas (Endesa, Iberdrola, Gas Natural Fenosa, EDP y Viesgo) siguen siendo todopoderosas en el negocio de la luz en España. Se reparten entre las cinco el mercado de la tarifa regulada de electricidad (más de 11 millones de clientes) y controlan más del 90% del mercado libre (otros más de 17 millones de usuarios). Pero algo está cambiando en el sector.

Un pelotón de comercializadoras independientes, no integradas en los grandes grupos verticales energéticos, no deja de comer terreno a los gigantes del sector y lo hace cada vez a mayor velocidad. Se ha desatado una auténtica batalla comercial entre las eléctricas para quitarse clientes, y la disputa está siendo en los últimos meses especialmente movida en el negocio del suministro de luz a hogares y pymes (el de baja tensión).

Las pequeñas comercializadoras (en total hay más de dos centenares, pero varias decenas de ellas apenas tienen actividad) consiguieron superar los 1,61 millones de consumidores particulares y pequeñas empresas al cierre de 2017, con un fuerte incremento del 24% tras sumar casi 320.000 nuevos clientes en sólo un año, según un informe interno de una eléctrica independiente elaborado con datos de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) y al que ha tenido acceso El Independiente.

El negocio de comercialización eléctrica entre clientes domésticos se liberalizó en 2003. Desde entonces y durante más de una década -hasta el cierre de 2014- las pequeñas comercializadoras habían conseguido arrebatar a las grandes eléctricas de 900.000 clientes. En los últimos tres años han elevado su cartera de clientes en casi 700.000 nuevos usuarios, la mitad sólo el año pasado.

Sólo en el último trienio, las eléctricas independientes han elevado su cuota en el mercado de baja tensión del 6,4% hasta alcanzar ya el 9,1%. Comercializadoras como Feníe Energía, Holaluz o Podo van tomando fuerza en el sector y sus marcas empiezan a ser reconocibles para cada vez más usuarios.

“Los clientes han perdido el miedo a cambiar de compañía eléctrica. Ya no temen abandonar a las grandes eléctricas y contratar con pequeñas comercializadoras menos conocidas. La oportunidad actual de crecimiento es evidente”, sostiene un directivo del sector. Y de hecho, puede que hayan sido las propias grandes eléctricas las que han abierto la espita para que las pequeñas empresas estén creciendo cada vez con mayor rapidez.

Las campañas publicitarias y de marketing desarrolladas por las grandes compañías en los últimos años “han abierto los ojos a los clientes sobre la posibilidad de cambiar de comercializadora y han servido para empujar a los usuarios a hacer el ejercicio de comparar ofertas”, apuntan fuentes empresariales. “Son las grandes eléctricas las que están haciendo que se mueva el mercado, que despierte la gente, y las pequeñas nos estamos beneficiando”.

Te puede interesar

Salir de la versión móvil