Los franquiciados de Telepizza han decidido plantar batalla a la compañía. El pacto firmado por el grupo español con Pizza Hut no les convence y están dispuestos a llevarlo a los tribunales. Así lo han acordado miembros de la Asociación de Franquiciados de Telepizza, que han decidido iniciar acciones judiciales contra la alianza por considerar que la operación contiene "irregularidades" y les perjudica.
La intención de este colectivo es solicitar "medidas cautelares" para evitar que en la junta de accionistas de Telepizza prevista para el próximo 27 de junio se someta a votación el acuerdo estratégico con Pizza Hut, que figura en el orden del día, según ha explicado en declaraciones a Efe Juan Ramón Montero, uno de los abogados de la asociación.
Los franquiciados españoles representados en esta entidad -más de un centenar, según sus propios datos- han celebrado este jueves en Madrid una asamblea en la que han aprobado recurrir a la Justicia con un apoyo superior al 95 % de los presentes, según Montero. El letrado ha señalado que sus representados han optado, no obstante, por dar de plazo hasta el viernes 22 de junio a Telepizza para que firme un convenio que dé respuesta a sus peticiones, y en ese caso suspenderían las acciones judiciales.
Concretamente, exigen garantías de que la empresa no se aprovechará de que los contratos de franquicia caduquen para no renovar a los actuales franquiciados. También reclaman un compromiso para que Telepizza no instale establecimientos de la cadena Pizza Hut en las inmediaciones de sus tiendas por tratarse de su competencia directa.
Los franquiciados suspenderán las acciones legales si la compañía atiende sus demandas antes del 22 de junio
Además, piden que se respeten las condiciones económicas y los "royalties" (canon) en el caso de que, en un futuro, sus locales tengan que reconvertirse en Pizza Hut, proceso cuyos gastos deberían correr a cargo del franquiciador. "Entendemos que hay un incumplimiento contractual", ha insistido el abogado de la asociación, quien ha advertido que los franquiciados temen que existan "intereses ocultos" en el acuerdo suscrito con Pizza Hut.
De hecho, ha citado como ejemplo una opción de compra incluida en el pacto que permite a Pizza Hut adquirir la "nuda propiedad" -es decir, la propiedad sin usufructo- de los signos distintivos de Telepizza por un valor total de 10,1 millones de euros, cuando según sus cálculos el valor de la marca supera los 200 millones.
La compañía cuenta en España con cerca de 700 tiendas, de las cuáles más de 500 operan en régimen de franquicia. La alianza con Pizza Hut, de ser finalmente aprobada, le hará duplicar ventas, pasar de 20 a 37 países y aumentar en un 60 % su número de restaurantes, hasta los 2.560 locales.
El alcance del acuerdo se circunscribe a América Latina (excluyendo Brasil), el Caribe, España, Andorra, Portugal y Suiza, e implica dejar de utilizar su marca de forma gradual en América Latina y convertir las más de 470 tiendas que tiene en la región en Pizza Hut. En la Península Ibérica, sin embargo, los responsables de Telepizza garantizaron que conservarán su marca "toda la vida" a la vez que desarrollan la enseña Pizza Hut, con el objetivo de abrir más de 300 tiendas "a medio plazo".
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