Emilio Saracho, el último presidente de Popular antes de que colapsase por falta de liquidez, será investigado -antigua figura del imputado- por todas las presuntas irregularidades que condujeron al banco a su resolución y no sólo por delitos de manipulación de mercado, según se desprende del auto emitido por el juez Fernando Andreu conocido el jueves. Además sus abogados habían solicitado el sobreseímiento parcial del delito de manipulación de mercado, alegando varios informes de la CNMV en los que se descarta que Saracho distorsionase el precio de la acción recurriendo a posiciones bajistas. Andreu ha rechazado también dicho sobresímiento.
El sumario del caso Popular se desglosa en dos piezas separadas para agilizar la instrucción con el objetivo de celebrar lo antes posible el juicio oral de cada uno de estos procedimientos. Saracho había solicitado desvincularse de la primera pieza, petición rechazada por el juez.
La primera pieza investiga si pudo haber estafa a inversores en la ampliación de capital por 2.500 millones que realizó Popular en 2016, dado que el folleto informativo registrado en la CNMV advertía de que el banco esperaba pérdidas de 2.000 millones ese año y éstas se elevaron hasta 3.500 millones. Esta parte del sumario también aborda hechos posteriores al cierre de 2016, que condujeron a la resolución del banco por una crisis de liquidez, motivo por el que los investigados son los miembros de los dos consejos presididos, primero por Ángel Ron y después por Emilio Saracho. También afecta al propio Banco Popular y al auditor PwC.
La segunda pieza versa sobre si Emilio Saracho filtró deliberadamente información falsa sobre la situación financiera del banco para provocar la caída de las acciones, incurriendo en un delito de manipulación del mercado. Aunque varios informes de la CNMV señalan que no hubo manipulación a través de posiciones bajistas, tal como publicó Voz Populi, la pieza incluye también querellas por administración desleal.
El juez que instruye el caso señala que existe un único procedimiento y que la existencia de dos piezas responde a efectos funcionales y de organización, de ahí que desestime la pretensión de Saracho. Además, el expresidente de Popular es blanco de querellas por administración desleal y por la resolución del banco, también tratadas en la primera pieza del sumario.
"La división de la instrucción en dos piezas separadas en absoluto supone que existan dos procedimientos distintos e independientes. Sencillamente, y de cara a simplificar y activar el procedimiento, se acordó la formación de dichas piezas, lo que supone que la personación de las partes debe entenderse en el procedimiento y no en una de las piezas, lo cual es fácilmente deducidle para la parte, por cuanto se le están notificando cuantas resoluciones se dictan en una y otra pieza", explica el auto.
En cuanto a la solicitud de Saracho de que se decrete el sobreseimiento parcial y provisional de las actuaciones respecto del delito de manipulación del mercando, el escrito lo rechaza por "extemporánea, dado que la causa se encuentra en estado de tramitación, practicándose diligencias a fin de determinar la naturaleza y circunstancias de comisión de los hechos, y cuanto menos la confrontación entre las partes de los informes de la CNMV, debiéndose realizar las que están pendientes y aquellas que se deriven de las mismas y, después de ello, determinar cuál de las resoluciones previstas en el artículo 779 L.E.Crim. debe adoptarse".
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