Madrid, capital del envejecimiento

El problema de las pensiones en España tiene un lado malo, pero también uno muy bueno. Si el país se enfrenta a un tsunami fiscal por la necesidad de pagar unas prestaciones crecientes partiendo de un déficit en el sistema de cerca de 19.000 millones de euros es, principalmente, porque cada vez se vive más años en España. Eso implica más jubilados que cobran una pensión durante más tiempo, pero también, al menos a priori, más calidad de vida.

Sin embargo, como en todo movimiento de estas características, hay un epicentro y ese es la Comunidad Madrid, que según las estadísticas de la UE es la región con mayor esperanza de vida de Europa, con 85,2 años. Madrid, capital del envejecimiento.

Así lo pone de manifiesto un reciente estudio de la oficina estadística comunitaria (Eurostat), en la que se constata, según los últimos datos disponibles de 2016, que la esperanza de vida de los nacidos en el entorno de la UE es de 81 años. Se trata, no obstante, de una media, porque la diferencia entre la esperanza de vida en las economías más y menos potentes de Europa alcanza los 11,9 años.

Y en esos extremos, Eurostat circunscribe los mayores resultados de esperanza de vida en España e Italia, en contra de lo que ocurre en los países de este de Europa. Tanto es así que las tres regiones con mayor proyección en términos de longevidad son la Comunidad de Madrid (85,2 años), La Rioja (84,3 años) y Castilla y León (84,3 años).

De resultas, la capital del país con el problema de pensiones que más resuena en estos momentos en Bruselas es la que promete mayores periodos de cobro de pensión pública. Y subiendo, porque de acuerdo con la progresión desde 2012, cuando empieza la serie histórica de Eurostat, la Comunidad de Madrid incrementa un año su esperanza de vida cada lustro.

Las implicaciones para el sistema

La encuesta europea pone a la capital de España en la diana del problema de las pensiones porque, con la salvedad de Cataluña, se trata de la comunidad autónoma que presenta mayor número de pensionistas y pensión media, además de uno de los mayores niveles de trabajadores a punto de jubilarse.

Empezando por los pensionistas, el 12% de las pensiones que se pagan en España, más de 1,1 millones, se localiza en la capital de España. Una proporción que solo superan Cataluña, con 1,7 millones, y Andalucía, con 1,5 millones. Sin embargo, si se atiende a la cuantía media, la que se paga en Madrid asciende a 1.130,3 euros al mes, mientras que en las otras dos regiones no llega a los 1.000 euros.

De hecho, la pensión media en Madrid es un 18% superior a la media nacional, y solo se ve superada muy ligeramente por la que se paga en Asturias, donde tienen incidencia las pensiones de jubilación del sector de la minería, que son de las más altas del sistema, aunque minoritarias en número.

En cuanto a las pensiones de jubilación, que suponen más del 60% del total del sistema contributivo y tienen las cuantías medias más altas, la Comunidad de Madrid suma el 13% de las prestaciones de nuevo con una cuantía media por encima de la media: de 1.299,5 euros al mes, frente a los 1.104,7 euros de promedio en toda España.

Descontando de nuevo los jubilados asturianos, solo en el País Vasco --que abona la mitad de pensiones que Madrid-- se pagan una pensión mayor, de 1.363,5 euros al mes. Y esto es así porque es la comunidad autónoma con los salarios más altos de España.

Por otro lado, la Comunidad de Madrid es la región en la que mayor incremento en el número de pensionistas se registró en octubre, el último mes del que se disponen datos, con un avance del 2%, el doble que la tasa de crecimiento del conjunto de los territorios, aunque la pensión media creció un 3,5%, por debajo del promedio nacional del 3,7%.

Las pensiones que vienen

Hasta aquí el presente. Pero hablar de esperanza de vida es hablar del futuro, y ahí entra en juego también el número de personas que están llamadas a jubilarse en los próximos años.

En este caso, la Comunidad de Madrid también está a la vanguardia. Porque de acuerdo con la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al tercer trimestre del año, había 499.600 trabajadores mayores de 55 años trabajando en la capital, algo menos que los 554.100 personas en el mismo tramo de edad empleadas en Cataluña.

Sin embargo, de nuevo, una vez se jubilen estos trabajadores, la esperanza de vida para los que residen en Madrid es de 85,2 años, frente a los 83,9 años en Cataluña.