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Se ahorrará 390 millones en dos años en derechos de TV

Vodafone da por bueno perder decenas de miles de clientes de fútbol para ser mucho más rentable

La teleco da por terminada la guerra comercial por el fútbol en televisión… de momento. “Veremos la próxima temporada”.

Jugadores del Atlético de Madrid celebran un gol. | efe

La decisión de Vodafone de renunciar a gran parte del fútbol en su plataforma de TV ha revolucionado el sector de las telecomunicaciones en España. La compañía plantó a Telefónica y no renunció a El Partidazo (el mejor encuentro de Liga de cada jornada) y a la Champions, lo que desató este verano una auténtica guerra comercial entre las grandes telecos.

Vodafone ha sido la que más ha sufrido en la guerra comercial. Sólo entre julio y septiembre, en plena batalla por el fútbol antes de que arrancara la temporada, el operador rojo ha perdido 66.000 clientes de televisión, 69.000 líneas fijas y 106.000 líneas de móvil. Una sangría comercial que se ha traducido en una caída de los ingresos y de la rentabilidad de la filial española.

Aún así, el grupo sigue defendiendo su decisión. “El fútbol para Vodafone no es un segmento rentable. Los resultados a corto plazo son negativos, pero son necesarios para que la compañía siga creciendo y mejorar los resultados a medio y largo plazo”, ha subrayado Antonio Coimbra, consejero delegado de Vodafone España, en un encuentro con la prensa. “Las portabilidades netas [cambios de clientes a otras compañías] son negativas, pero dentro unos límites aceptables. Estamos dónde preveíamos estar”.

Vodafone contaba antes de este verano con unos 300.000 clientes con algún paquete televisivo que incluía oferta televisiva, de un total de 1,3 millones. Y viene defendiendo que incluso perder de golpe todos esos abonados le saldría más a cuenta que seguir pagando el coste de los derechos de emisión del fútbol. El grupo ha perdido ya 66.000 de ellos (“los más futboleros, los que quieren fútbol a toda costa”) y da por hecho que puede perder más, pero a un ritmo normalizado.

“Seguiremos perdiendo clientes, pero a un ritmo normal. Lo peor, lo gordo, ya ha pasado”, ha sentenciado Coimbra. “¿Ha terminado la guerra del fútbol? De momento sí, Veremos la próxima temporada”. En cualquier caso, la dirección de la filial española da por buena la pérdida de decenas de miles de clientes y que la huida continúe en próximos trimestres. El ahorro de costes en derechos de emisión es tal, que no tener fútbol le hará más rentable, según presume la compañía.

Vodafone estaba pagando alrededor de 330 millones de euros al año por los derechos de emisión de todas las competiciones. Un producto con el que sólo había conseguido captar entre 300.000 y 400.000 clientes con algún paquete de TV con fútbol. Según su estimación, estaban pagando unos 980 euros por cada cliente, cuando Movistar y Orange sólo le costaba unos 450 millones cada uno.

“El reparto de los costes [en función del número total de clientes de TV] nos penalizaba. El fútbol no nos sale rentable. La decisión de no tener fútbol tendrá efectos positivos en nuestras cuentas a partir del próximo año fiscal”, ha augurado Coimbra. La compañía prevé que se ahorrará 150 millones de euros en costes de derechos de emisión del fútbol el próximo año y otros 240 millones el siguiente ejercicio. En total, 390 millones en dos años menos en costes, lo que hará que aumente su rentabilidad.

“Prevemos una subida del ebitda [resultado bruto de explotación] significativa el próximo año gracias a renunciar al fútbol. Si no, no tendría sentido lo que hemos hecho”, apunta el consejero delegado de la filial española. “mejoraremos mucho los resultados en mayo del próximo año”.

Y es que para Vodafone la apuesta estratégica de crecimiento en contenidos de televisión, lejos del fútbol, pasa por las series y el cine. “El fútbol es relevante para dos millones de hogares en España de un total de 22 millones. En ningún momento ha sido posible vender el fútbol a más de dos millones de hogares; se les puede regalar, pero no vender”, ha explicado Coimbra. “Renunciamos a estar presente en dos millones de hogares potenciales, que en nuestro caso eran 300.000. Pero nos quedan otros 20 millones de hogares. Eso significa salir del fútbol”.

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