La Agencia Tributaria (AEAT) calienta motores de cara a la Declaración del IRPF y Patrimonio de 2018, que tendrá un primer hito el próximo 15 de marzo, con la primera comunicación a los contribuyentes de sus datos fiscales, pero que empezará oficialmente el 2 de abril.
Como cada año, el organismo adscrito al Ministerio de Hacienda prevé introducir novedades que, en esta ocasión, tratarán de incentivar, sobre todo, el cumplimiento voluntario de las obligaciones tributarias, tal y como se desprende también del Plan de Control Tributario anual.
Es por ello, que por primera vez, el fisco advertirá a los contribuyentes titulares de cuentas en el extranjero o perceptores de rentas de alquiler de pisos turísticos de que Hacienda tiene constancia de estos ingresos para que los declaren debidamente.
La AEAT está en disposición de realizar esta batida de avisos después de haber avanzando de forma ininterrumpida en los últimos años en el cruce de datos con otras administraciones e instancias en el exterior. Ello le ha permitido aumentar considerablemente las bases de datos disponibles y la información fiscal de los contribuyentes. Ahora, se trata de que sean estos los que cumplan debidamente con Hacienda.
Según ha precisado el director general de la AEAT, Jesús Gascón, en un acto celebrado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) y PwC, la organización se encuentra en fase de "depuración" de la información a la que ha tenido acceso, ya que el volumen en bruto es "espectacular". Es por ello que la AEAT no ha facilitado aún el número de contribuyentes a los que se remitirán estos avisos, según informa Europa Press, como tampoco si lo hará mediante alertas automáticas en sistema Renta Web o por carta.
En efecto, tal y como avanzó Gascón el pasado mes de octubre y recogió El Independiente, la Agencia Tributaria inició en 2018 la inspección de más de un millón de cuentas financieras en el extranjero no declaradas o solo en parte, de las que son titulares contribuyentes españoles, residentes de otros países en España y no residentes que podrían tener que recalificarse como tales. Esto afectaba a personas físicas, pero también a empresas.
Para ello, la AEAT se ha servido de la información proporcionada por terceros países en el marco de un sistema de colaboración en el que participan más de un centenar de jurisdicciones llamada Common Reporting Standard (CRS) y que se suma al modelo 720, de bienes y derechos en el extranjero, ya interiorizado en el día a día de la AEAT tras su puesta en marcha en 2013.
Desde el año 2017, la AEAT ha recibido más de 1,6 millones de registros (el número de contribuyentes será inferior cuando se depuren duplicidades, por ejemplo), con un volumen total de 457.000 millones de euros en cuentas, sobre todo de españoles. Una cifra que equivale nada menos que a casi el 50% del PIB español.
Sobre esta base de información, el fisco ha lanzado desde el pasado mes de mayo más de un centenar de inspecciones que afectan principalmente a personas físicas residentes.
Fuentes de la AEAT aseguran que es pronto para conocer el potencial recaudatorio de estos nuevos controles. Sin embargo, la información de la que dispone apunta a un importante efecto inducido del CRS desde el año 2013 –año previo al acuerdo del G20 que impulsó la creación del CRS—hasta 2016 sobre estos contribuyentes.
Así, las bases imponibles del IRPF aumentaron en este tiempo en un 25,2% y el importe a ingresar un 14,3%. En el caso del impuesto sobre el Patrimonio, el total de activos financieros habría repuntado un 23,2%, mientras que la cuota íntegra se habría elevado un 27,4%.
Arrendamientos turísticos
Por otro lado, la AEAT también incluirá alertas y avisos para que el contribuyente que vaya a presentar la declaración de la renta, y entre en el sistema Renta WEB, sepa que la AEAT dispone de determinados datos que tiene que tener en cuenta, como los arrendamientos turísticos.
En términos generales, los contribuyentes que alquilen una vivienda para uso vacacional, a través de plataformas como Arirbnb o no, en ningún caso podrán desgravarse el 60% previsto para la residencia habitual. Sin embargo, sí se pueden deducir una buena parte de los gastos asumidos en los periodos en los que la vivienda ha estado alquilada (el periodo en el que ha estado vacía computa como segunda residencia a efectos de IRPF).
En este caso, Gascón ha destacado que el fisco hará uso de la importante fuente de información que supondrá la nueva declaración sobre arrendamientos turísticos que se debe presentar este mes de enero. Y es que las plataformas de alquiler de viviendas de uso turístico han comenzado a suministrar a la AEAT los datos fiscales relativos a esta actividad, como información de los anfitriones y detalles de sus anuncios, como el nombre y la dirección, y sus transacciones desde 2018, tras la entrada en vigor este mes de enero de la obligación de que compartan los datos de las reservas de los anfitriones.
Hacienda dio más margen a las plataformas como Airbnb, HomeAway, Wimdu o Niumba para suministrar los datos fiscales, de forma que tendrán de plazo hasta el 31 de enero de 2019 para comunicar las operaciones del año pasado.
El director general de la Agencia Tributaria ha indicado que se están analizando más posibles avisos a incluir en la Campaña de la Renta y Patrimonio de 2018, que comenzará el próximo día 2 de abril para la presentación por Internet y por teléfono, y se prolongará hasta el próximo 1 de julio, según el calendario del contribuyente.
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