Lidl elimina también las bolsas de plástico para frutas y verduras

Lidl ha dado un nuevo paso en su apuesta por la sostenibilidad y ha decidido suprimir de sus supermercados las bolsas de plástico convencionales de las secciones de frutas y verduras. La compañía de origen alemán ha optado por sustituirlas por bolsas 100% biocompostables y biodegradables, según ha informado a través de un comunicado.

La intención de Lidl, que ya ha aplicado esta medida en sus 23 establecimientos en Baleares es extender la medida al conjunto de sus 580 tiendas en España antes de finales de año, con lo que pretende confirmarse como "el supermercado de referencia en materia de sostenibilidad en España" y "aportar valor compartido a la sociedad".

La enseña de supermercados asegura que con su medida se retirarán de circulación más de 110 millones de bolsas de plástico convencionales al año en España, equivalentes a unas 220 toneladas de plástico no biodegradable. A cambio, las nuevas bolsas que se ubicarán en las secciones de frutas y verduras se definen como biocompostables, lo que permite que se puedan escomponer en un plazo máximo de 12 meses sin poner en peligro el ecosistema, no dejando residuos tóxicos, al contrario que las bolsas de plástico convencionales que pueden tardar en desintegrarse hasta 500 años.

Con esta medida se retirarán de circulación más de 110 millones de bolsas de plástico convencionales al año en España

Lidl explica que, aunque estas nuevas bolsas tienen un coste cuatro veces superior a las de plástico convencionales y supondrán, por ende, una inversión de más de dos millones al año para la compañía, su intención es no repercutir este coste adicional a los clientes, por lo que seguirán siendo gratuitas.

Con la retirada de las bolsas de plástico en las secciones de frutas y verduras, Lidl pretende dar un paso más en una estrategia que ya le llevó a convertirse hace un año en la primera enseña en retirar las bolsa de plástico para la compra, una medida que ha sido imitada por una gran mayoría de cadenas de supermercados.

La medida se enmarca en una estrategia global de Lidl para la gestión y el uso sostenible de los plásticos. Dicha estrategia tiene, entre otros objetivos, reducir el plástico al menos un 20% hasta 2025 y garantizar la reciclabilidad del 100% de sus envases. De este modo, la cadena va mucho más allá de los compromisos que ha fijado la patronal del sector, que se centran en reducir el plástico en un 21% en los productos frescos que se envasan en tienda hasta 2021.

Con estos dos hitos –eliminación de bolsas de plástico para la compra y sustitución de las bolsas de sección de fruta y verdura-, Lidl ahorra al medio ambiente más de 1.500 toneladas de plástico no biodegradable al año que ocuparía la superficie de más de 3.300 campos de fútbol.

Las nuevas bolsas supondrán a Lidl una inversión de más de dos millones al año pero seguirán siendo gratuitas

Además de estos dos proyectos, la compañía continúa trabajando para quitar el plástico en todo aquello donde no aporte valor, aportando soluciones más sostenibles que minimicen el impacto en el medio ambiente.

En el ámbito de la fruta y la verdura, Lidl ya ha sustituido los separadores de plástico de sus envases por material de celulosa y está trabajando, entre otros, en reducir la fruta y verdura envasada y aumentar la misma a granel o sustituir el embalaje de la fruta bio, suponiendo todo ello un ahorro anual de 72 toneladas de plástico.

La empresa se ha comprometido a eliminar los artículos de plástico de un solo uso (cubiertos, bastoncitos para los oídos, etc.) hasta final de año. Otras medidas en las que está trabajando son: el uso de materiales biodegradables para el embalaje; la reducción del porcentaje de plástico en las botellas de marca propia y la utilización del material reciclado en sus envases.