Iberdrola vuelve a mejorar su previsión para un 2019 récord tras ganar un 16,6% más

Iberdrola se prepara para un año récord. Para otro año récord. La eléctrica ya consiguió que 2018 fuera el primer año de su historia en que ganó más de 3.000 millones de euros. Y la buena marcha de su actividad y de la expansión emprendida hacen que la compañía vuelva a mejorar sus previsiones para el conjunto del año.

Hace tres meses, Iberdrola ya elevó su previsión de mejora del beneficio neto para 2019. Entonces elevó su estimación desde el entorno del 5% y apuntó que crecería cerca de un 10%. El grupo aprovecha la presentación de resultados semestrales para elevar aún más el listón y ya da por hecho que el crecimiento estará netamente por encima del 10% este año, y situará el beneficio por encima de los 3.300 millones.

En lo que va de año, las cifras no dejan de crecer. Iberdrola obtuvo un beneficio neto de 1.664 millones de euros en la primera mitad del ejercicio, lo que representa un fuerte incremento del 16,6%. Y el beneficio bruto de explotación (ebitda), que mide mejor la evolución de los negocios, creció un 12,5%, hasta los 4.990 millones.

La compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán la mejora de los beneficios a la “buena evolución de los negocios en Estados Unidos, México y Brasil y a la aportación del parque eólico marino alemán Wikinger”, uno de sus nuevos buques insignia. Con ello, el grupo consigue compensar “la menor contribución de los negocios de Redes y Renovables en España y del área Comercial en Reino Unido”.

Iberdrola, además, también ha batido su récord de inversiones, con el mejor semestre en este ámbito de su historia. La eléctrica ha ejecutado inversiones de 3.054 millones hasta junio, disparándolas así un 23% en relación al mismo periodo del año pasado. Casi la mitad de la inversión (48%) se ha destinado a renovables y un 40% a redes reguladas de transmisión y distribución. En los últimos 18 meses el esfuerzo inversor de la compañía ha alcanzado la cifra récord de 8.375 millones.

Como consecuencia de estas inversiones, la compañía prevé que, a lo largo de 2019, entren en operación 5.250 nuevos megavatios (MW). De esta nueva capacidad, un 75% comenzará a estar operativa en el segundo semestre del año. La aceleración del ritmo inversor anticipa un incremento en el objetivo de desarrollar 13.000 nuevos MW durante el periodo 2018-2022. Esto significaría aumentar la potencia del grupo en más de un 40% respecto al inicio del plan estratégico.