ACS sigue reforzando su liderazgo en los principales mercados donde opera. Las adjudicaciones obtenidas en 2019 han permitido a la multinacional -que presenta resultados este jueves- afianzar su posición en mercados tan competitivos como Australia, Estados Unidos o Canadá.
Los nuevos proyectos se suman a la cartera de obras emblemáticas desarrolladas en los últimos años, que han permitido a ACS posicionarse como referente en materia de infraestructuras. Entre ellas están el Puente de Champlain o el de Gordie Howe, el sistema de transporte automático de pasajeros en el Aeropuerto de Los Ángeles, o la autopista australiana WestConnex.
El buen rumbo de la constructora en 2019 se refleja en hitos como su incorporación al Dow Jones Sustainability Index (DJSI), tanto en el índice global (DJSI World) como en el europeo (DJSI Europe). Estos índices son uno de los principales referentes mundiales en materia de gobierno y sostenibilidad, y reconocen a las empresas líderes, según criterios de desempeño económico, ambiental y social, utilizando una metodología de evaluación y criterios de gran exigencia.
Paralelamente a su estreno en el Dow Jones Sustainability Index, ACS ha logrado en 2019 liderar, por octavo ejercicio consecutivo, la lista de los grupos de construcción e ingeniería con mayor negocio internacional del mundo. Este ránking lo elabora anualmente la publicación especializada Engineering News-Record (ENR). La compañía copa las dos primeras posiciones del listado, dado que ACS figura en el puesto número uno y su filial alemana Hochtief, en el número dos. Además, la filial australiana Cimic ocupa el puesto 37.
El buen rumbo de la multinacional en 2019 se justifica en buena parte por las concesiones logradas tanto por ACS como por sus filiales internacionales. La expansión de la compañía se ha intensificado especialmente en Australia, con varios grandes contratos firmados por su filial Cimic. Los proyectos corresponden a distintas áreas de negocio.
Por ejemplo, en abril Cimic se adjudicó la mayor inversión en infraestructuras en la historia del Estado de Queensland para acometer la mejora de la red ferroviaria en Brisbane. Este proyecto, que será acometido en alianza con Cross RiverRail, está valorado en 3.400 millones de euros.
Cimic, a través de su filial CPB Contractors, también llevará a cabo parte de la remodelación del metro de Sidney. Se trata del mayor proyecto de transporte público acometido en Australia. Generará 463 millones de dólares australianos para llevar a cabo el diseño y la construcción de la estación.
Otras actividades
También será CPB Contractors la encargada de ejecutar la segunda fase de la autopista de Monash, gracias al contrato adjudicado el pasado septiembre. El proyecto consiste, entre otras mejoras, en la adición de 36 kilómetros de nuevos carriles a la autopista.
Asimismo, ACS tendrá un papel activo en la ampliación de la mina de Curragh. Será otra filial de Cimic (Thiess) la responsable de ejecutar la ampliación a seis años de un contrato de servicios y mantenimiento de la instalación, ubicada en Queensland. El proyecto supondrá unos ingresos de 805 millones de euros.
La multinacional ha logrado además concesiones importantes en las regiones donde viene apostando más fuerte. En Estados Unidos, Dragados y Hochtief se hicieron con un proyecto de infraestructuras valorado en 3.000 millones de euros. Las obras consistirán en el diseño y la construcción de mejoras a lo largo de los 15 kilómetros que separan las localidades de Hampton y Norfolk. Se reconstruirán los viaductos existentes entre las islas artificiales y ambas orillas, y se levantará un nuevo cruce de la bahía de 6,3 kilómetros con una combinación de túnel y viaductos.
En Canadá, otra de las regiones con más proyección para ACS, la empresa se adjudicó su primer gran proyecto portuario en Norteamérica. Lo logró Dragados (filial del grupo) y consiste en el diseño y construcción de la ampliación de la terminal de contenedores para la autoridad portuaria de Vancouver Fraser en British Columbia. El proyecto aumentará la superficie de la terminal y reconfigurará la misma para incrementar su capacidad desde los actuales 900.000 contenedores equivalentes hasta 1,5 millones de contenedores anuales.
Precisamente este año, y también en Canadá, ACS estrenó el nuevo puente de Champlain; una espectacular obra de ingeniería de 3,4 kilómetros sobre el río St. Lawrence, que conectará Estados Unidos con Canadá. La obra se inauguró en junio. Se construyó en menos de cuatro años y ofrece unas cifras asombrosas: 74.000 toneladas de acero, 93.000 metros cúbicos de hormigón y 25.000 toneladas de asfalto.
El Puente de Champlain soporta uno de los mayores niveles de tráfico de Canadá, ya que supera los 60 millones de vehículos al año y constituye uno de los accesos principales a la Isla de Montreal por su lado Este. Su ubicación constituye un punto estratégico vital; es una de las principales rutas de intercambio comercial con Estados Unidos y será el consorcio en el que participa ACS (Iridium, Hochtief PPP Solutions, Dragados y Flatiron) quien opere la carretera durante 30 años.
El puente canadiense constituye todo un hito -y todo un orgullo- para la compañía. Como lo son otros proyectos adjudicados en los últimos años. Uno de los más espectaculares es el sistema de transporte automatizado de pasajeros por tren del aeropuerto de Los Ángeles. Situado 20 metros, tendrá seis paradas que conectarán los nuevos edificios de coches de alquiler y las estaciones de tren ligero de la ciudad, con las terminales aeroportuarias.
La infraestructura, cuya inauguración está prevista para septiembre para 2023, tiene 3,6 kilómetros de longitud, contará con hasta nueve trenes que podrán viajar simultáneamente y mejorará en el futuro el acceso de los pasajeros a las terminales del segundo mayor aeropuerto
en los Estados Unidos.
Proyectos como el de Canadá o Estados Unidos reflejan la fuerte implantación de ACS en mercados con buenas perspectivas. La diversificación geográfica de la multinacional permite mitigar las adversidades del entorno macroeconómico y el efecto de los ciclos propio de la actividad de construcción en mercados pequeños. Esta estrategia conduce a aprovechar las oportunidades de crecimiento en entornos más favorables, consolidando la presencia en países con mayor potencial de crecimiento estable.
Al cierre de 2018, la cartera de proyectos de ACS ascendía a 72.223 millones de euros. En la actividad de construcción, América del Norte acapara el 54% de las ventas, con 15.530 millones de euros. Sólo Estados Unidos aporta más 14.000 millones; y Canadá genera casi los mismos ingresos que España (1.453 millones).
El otro gran polo de inversión para la multinacional española es Australia. Es el segundo país que más ventas genera, después de Estados Unidos, con 6.814 millones de euros.
En cuanto a la diversificación por actividades, alrededor del 60% de los ingresos provienen de actividades con un perfil de riesgo bajo, divididos entre servicios de operación y mantenimiento y construction management. Los servicios representan el 25% de las ventas y corresponden a contratos de operación y mantenimiento de infraestructuras de transporte, sociales, energéticas, industriales y de minería así como servicios a la ciudadanía provistos por Clece.
La mayor parte de estos contratos son a largo plazo o renovados recurrentemente con clientes históricos. El 32% de los ingresos proceden de la actividad de Turner en el mercado norteamericano, la cual no asume prácticamente riesgos de precio en su actividad de construction management. El 3% corresponde a actividades de edificación en España y Alemania. El restante 40% corresponde a la actividad de ingeniería y construcción, de los cuales aproximadamente un 15% corresponden a proyectos en los que el ACS participa o promueve principalmente en mercados desarrollados.
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