Los empleados del sector bancario están molestos con el presidente del Gobierno. En los bancos no han sentado bien las declaraciones de Pedro Sánchez de hace unos días, en las que pedía a las entidades que se pusieran a trabajar para que los créditos con aval del Estado pudieran llegar cuanto antes a las pymes y autónomos que los necesitan.

«Estamos recibiendo quejas de autónomos y pymes sobre los planteamientos de determinados bancos. Estamos aprendiendo de la experiencia y pedimos a los bancos que trabajen para que cuanto antes lleguen las medidas», señalaba Sánchez.

No se puede acusar a un sector de que no ha trabajado lo suficiente cuando en realidad lo ha dado todo"

Estas palabras han sentado mal a un sector que fue declarado esencial desde la declaración del estado de alarma y que ha continuado atendiendo a los clientes a través de las sucursales.

"Todos los compañeros trabajaron mañana, tarde, noche y los días festivos de la Semana Santa para que esa primera inyección de liquidez fuese posible y los trabajadores pudiesen cobrar sus nóminas el mes de abril", señalan desde la Confederación Intersindical de Crédito (CIC) y responsabilizan al Instituto de Crédito Oficial (ICO) de la tardanza en la tramitación.

"El ICO, en cambio, se dedicó a modificar los anexos de los expedientes, hecho que provocó numerosos retrasos en la formalización de algunos de los mismos", apuntan, y añaden que los empleados del sector financiero han estado "en primera línea" atendiendo a los clientes "sin los equipos de protección necesarios".

"No se puede acusar a un sector de que no ha trabajado lo suficiente cuando en realidad lo ha dado todo para que empresas y autónomos tuviesen sus solicitudes cumplimentadas a tiempo. Tampoco se puede exigir a un sector que trabaje más, cuando en realidad se están realizando millones de horas extraordinarias, que como siempre, no se cobran", añaden desde la CIC.

El mensaje que transmitió Sánchez a las entidades tampoco ha sentado bien en las cúpulas de las entidades. El pasado jueves, el consejero delegado de Sabadell, Jaime Guardiola, emitió una férrea defensa de los trabajadores del sector y criticó las «faltas de respeto» que en su opinión reciben estos profesionales cada vez que «alguien del mundo político» realiza un comentario «gratuito y fácil». El banquero explicó que la banca "se merece un poquito de reconocimiento y menos tortazos».

«Parece muy gratuito y fácil pegar a los banqueros, pero no están dando al CEO de Sabadell, están dando a Pepito, que está en casa con sus hijos a las nueve de la noche tramitando operaciones y en sábado cuando le tocaba ver una peli con sus hijos. Hay una falta de respeto a estos profesionales. Llevo 40 años en esta profesión y me indigna», aseveró Guardiola.

Otros banqueros quisieron también aprovechar las presentaciones de resultados para agradecer a sus empleados el trabajo de estos días, en los que, como explicaba Guardiola, están haciendo el trabajo de siete meses en tan solo quince días.

Su homólogo en Bankia, José Sevilla, quiso valorar también el «magnífico» trabajo de los empleados del ICO, pues fue «muy complicado montar de la noche a la mañana en un entorno de teletrabajo una plataforma» para dar salida a las solicitudes de crédito con aval del Estado.