Tras varios meses con la mitad de la cúpula con el mandato caducado, el Gobierno impulsa la renovación del pleno de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). El Consejo de Ministros aprobará hoy trasladar al Congreso la propuesta de nombramiento de cinco de los diez consejeros del supervisor.

Una renovación que supone una auténtica sacudida al juego de poder entre los partidos políticos en el regulador. De los cinco nuevos vocales, tres lo son a propuesta del Gobierno (que se suman a los dos vinculados al PSOE que ya están en la cúpula de la CNMC), uno está ligado a Unidas Podemos y otro a ERC. Se queda fuera de la renovación el Partido Popular, que condicionó alcanzar un acuerdo sobre el supervisor a que el Ejecutivo reculara y no hubiera mesa de diálogo con la Generalitat de Cataluña.

La futura presidenta de la CNMC será Cani Fernández, reputada abogada con casi tres décadas de experiencia en derecho de competencia y comunitario, y que desde el pasado febrero era asesora en Moncloa de Iván Redondo, la mano derecha de Pedro Sánchez. El vicepresidente del regulador será Ángel Torres, antiguo secretario general de Política Económica con Pedro Solbes. Y el trío de propuestos ligados al PSOE lo completa Pilar Sánchez Núñez, hoy asesora de Nadia Calviño y ex vicepresidenta de la antigua Comisión Nacional de Competencia (CNC).

La renovación y los nuevos nombramientos los ha pactado el Gobierno con su socio de coalición Unidas Podemos y también con ERC. Y es que en la CNMC se mantendrá la cuota de vocales vinculados al nacionalismo catalán, pero ya no a la antigua CiU (como tradicionalmente había venido pasando en todos los órganos), sino que ahora se da entrada a un consejero propuesto por ERC. Es Josep Salas, experto en energía y vinculado a Esquerra. A propuesta de Podemos entrará Carlos Aguilar, especialista en el sector audiovisual y ligado a En Comú Podem.

Los nuevos nombres propuestos se encontrarán en el órgano colegiado de gobierno de la CNMC con otros dos vocales ligados al PSOE (Mariano Bacigalupo y Berardo Lorenzo), uno vinculado al PNV (Xabier Ormaetxea), una a Ciudadanos (Pilar Canedo) y también una vocal propuesta por el PP cuyo mandato no ha expirado aún (María Ortiz).

La presencia ligada al PP queda pues reducida al mínimo, tras años de control de los populares desde la creación del organismo, en 2013. De los consejeros que salen por tener el mandato caducado hay cuatro propuestos por el Partido Popular (el presidente José María Marín Quemada, la vicepresidenta María Fernández y los vocales Clotilde de la Higuera y Benigno Valdés). También sale el vocal propuesto en su día por CiU, José María Guinart. Cuando se creó el organismo fue el PSOE el que se negó a pactar la constitución del pleno y el PP estuvo durante ocho años con ocho consejeros del total de 10.