Desde esta semana se pueden presentar las solicitudes para obtener el ingreso mínimo vital. Esta prestación que el Gobierno calcula que llegará a unos 850.000 hogares, se puede tramitar desde el registro electrónico de la Seguridad Social. Sin embargo, algunas asesorías también ofrecen el trámite para aquellas personas que no puedan realizarlo de forma autónoma.

Los precios varían entre asesorías y entre provincias, aunque según ha podido comprobar este periódico, oscilan entre los 35 y los 90 euros. Pese a tratarse de una gestión relativamente sencilla y con una documentación limitada -DNI o pasaporte, certificado de empadronamiento, libro de familia y permiso de residencia en el caso de extranjeros- la tarifa es similar a la que cobran este tipo de gestores por realizar la declaración de la renta.

Varias de las asesorías consultadas aseguran que ya tienen las agendas llenas e instan a concertar una cita previa para aportar los documentos y realizar la petición, que sólo lleva algunos minutos. Otras, en cambio, todavía no están realizando el trámite pero lo harán más adelante cuando sepan “cómo hacer la solicitud o haya más información”.

¿Pueden cobrar por realizar este trámite?

Rubén Sánchez, portavoz de FACUA - Consumidores en Acción, explica a El Independiente que “es lícito que haya empresas que hagan negocio con esto”. “Una gestoría puede dedicarse a esto cobrando lo que cobre siempre que sea transparente”, indica Sánchez. Pero ante este tipo de servicios, FACUA recomienda a los usuarios “que se informen de cómo tienen que realizar la gestión para que la puedan tramitar sin ningún coste”, sobre todo, si se tiene en cuenta que los beneficiarios del ingreso mínimo vital son personas con ingresos muy reducidos.

En esta línea, desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones recuerdan que además de poder tramitarse telemáticamente, se ha puesto a disposición de los usuarios un teléfono para resolver las dudas. Además, la Seguridad Social trabaja con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para que se pueda acceder al ingreso mínimo vital a través de los ayuntamientos.

Una vez se reabran los de Centros de Atención e Información de la Seguridad Social (CAISS) también se podrá hacer la gestión de forma presencial e incluso se puede enviar la solicitud y la documentación por correo ordinario. Tal como ha indicado el ministro José Luis Escrivá, el objetivo es que esta prestación llegue a quien tiene que llegar y por eso se han habilitado varias vías para su solicitud.

Por otra parte, el Ministerio se plantea trabajar con el tercer sector. Esta es una de las propuestas que también lanza FACUA. “Es bueno que el Gobierno dote de recursos a las ONGs del tercer sector para que puedan facilitar la tramitación del ingreso mínimo vital a los usuarios que lo necesiten”, apunta Sánchez.

Requisitos

Cabe recordar que para poder optar al ingreso mínimo vital se deben cumplir varios requisitos. Los beneficiarios deben tener entre entre 23 y 65 años. También la recibirán personas a partir de 18 años si tienen menores a cargo y llevan al menos un año de residencia legal en España. Es una prestación dirigida a hogares vulnerables cuyos ingresos son mínimos.

Se tendrá en cuenta la renta neta del año anterior y no se computarán las becas comedor o las ayudas al alquiler. Si se valorará el patrimonio, sin contar con la vivienda habitual, y también la posesión de inmuebles y de cuentas corrientes.

La Seguridad Social ha habilitado un simulador para comprobar si se cumplen los requisitos antes de solicitar el ingreso mínimo vital.