Iberia será, con toda probabilidad, la primera compañía estratégica que recibirá ayuda del Estado. El Gobierno pretende realizar una inyección de fondos a la aerolínea, ante la complicada situación que sufre por el impacto de la crisis del Covid-19. Pero, sobre todo, el Ejecutivo intenta salvar la fusión con Air Europa, una operación clave para el futuro de Iberia.

Según avanza El País, el Ejecutivo ya tiene decidido acudir en ayuda de la aerolínea. Aún no está fijada la cuantía, pero Pedro Sánchez sí tiene claro que el Estado debe apoyar a empresas vitales para el país como Iberia. Ya lo han hecho otros países europeos, como Alemania, que inyectó 9.000 millones a Lufthansa; o Portugal, que aprobó ayudas de 1.200 millones para TAP. Italia, Francia u Holanda seguirán los mismos pasos para sus aerolíneas de bandera.

El mecanismo utilizado en el caso de Iberia será un nuevo fondo al mando de la SEPI –el holding público que controla las compañías públicas industriales y participaciones estatales en otras empresas-. Aprobado este viernes en el Consejo de Ministros, estará dotado de 10.000 millones de euros para apoyar a compañías viables con problemas de solvencia por la crisis del Covid-19.

Los planes del Gobierno pasan por que, entre otras opciones, las ayudas abran la posibilidad de entrar en el accionariado de las empresas de manera transitoria y durante un tiempo determinado (para ajustarse a la normativa de ayudas de estado de la UE) mediante la compra de acciones o de deuda u otros instrumentos financieros que sean convertibles en capital.

La intención del Gobierno es que el rescate de SEPI esté reservado a empresas cuyo tamaño y relevancia les otorgue suficiente impacto económico y social, y que desarrollen actividades de sectores ligados a la seguridad, la salud pública, las infraestructuras, el transporte, las comunicaciones o que garanticen el buen funcionamiento de los mercados.

Las compañías aéreas han recurrido a las líneas de avales del ICO para conseguir liquidez durante los meses en que el sector aéreo ha sufrido una paralización total por las restricciones a la movilidad. Iberia y Vueling, ambas del grupo IAG, firmaron préstamos con aval público por 1.010 millones de euros, Air Europa lo hizo por cerca de 140 millones y Air Nostrum por 130 millones más, entre otras empresas.