La acción de ACS cuenta con un sólido recorrido alcista. Así lo estima buena parte de los analistas que siguen de cerca el Ibex. Prueba de ello es que la compañía presidida por Florentino Pérez se sitúa entre las 20 empresas con mejores perspectivas (entre aquellas que cuentan con el seguimiento de al menos 10 analistas).

ACS afronta su presentación de resultados con este amplio respaldo de los expertos y con un conjunto de nuevas concesiones logradas por Cimic, la filial con la que se está abriendo paso en el mercado australiano.

"El mercado no ha valorado aún la resilencia de las operaciones de ACS ni las ventajas de su presencia en las operaciones de construcción", aseguran desde Intermoney. "A ello se añade una posición de deuda neta casi nula y una liquidez superior a los 12.000 millones", añaden.

El 90% de los analistas que siguen a la compañía recomiendan actualmente comprar y buena parte otorga un recorrido alcista del 40% a las acciones.

Los últimos contratos conseguidos fuera de España dan un impulso a la actividad internacional de la compañía. Esta misma semana, la empresa anunció la adjudicación a través de Dragados Offshore del desarrollo de una plataforma de conversión HVDC en el Mar del Norte. El proyecto eléctrico se acometerá en consorcio con Siemens.

En Australia, una de la áreas con más proyección para ACS, la empresa ha ido cosechando importantes contratos en las últimas semanas. A través de Cimic y sus respectivas filiales, la compañía ha logrado concesiones en negocios como la minería, los servicios energéticos o la construcción.

En ese continente, Cimic amplió su cartera de proyectos con uno de 128 millones de servicios de agua en el oeste de Australia y en Queensland. También UGL ganó un contrato valorado en 200 millones, para proporcionar a Río Tinto servicios mineros de explotación y mantenimiento durante varios años en el país.

Fuera de Australia, ACS también ha ganado contratos. Como el obtenido en Chile a través de Thiess. En el país suramericano la compañía se encargará de desarrollar servicios mineros en las explotaciones de Mantos Blancos.

En plena pandemia, la compañía logró que Sandard & Poor’s ratificara la nota ‘BBB’ de investment grade, ante la «capacidad» del grupo para afrontar la crisis que azota al planeta. La firma apunta a la diversificación geográfica de ACS, a su cartera de obras y a su balance como principales bazas frente a la actual coyuntura.