La partida de ajedrez que se juega detrás de los estadios no ha hecho más que comenzar. Los derechos televisivos para emitir LaLiga tienen fecha de caducidad y la siguiente temporada será la última en la que Telefónica posea la licencia de emisión de los partidos del fútbol patrio.
LaLiga, dirigida por Javier Tebas, ya prepara las bases de la subasta que dará derecho a la emisión de las siguientes temporadas de Primera y de Segunda, y desde la patronal del fútbol español son muy optimistas en cuanto a la cantidad que se pretende recaudar.
El presidente de LaLiga dijo recientemente que espera que las OTT (Netflix, Amazon o Dazn) realicen una oferta para adquirir los goles de Luis Suárez, Benzema o Griezmann en directo. Con estos nuevos actores, Tebas considera que no se perderá valor de marca y se espera que, al menos, consiga una cifra similar a la que actualmente paga la empresa de telecomunicaciones.
Pero si tradicionalmente Telefónica ha sido firme defensora en poseer los derechos televisivos de LaLiga para posicionarse como líder de la televisión de pago y ofrecer valor añadido a su oferta, ahora zozobra sobre la inversión en el fútbol.
Emilio Gayo, presidente de Telefónica España admitió este martes que la compañía sigue teniendo interés en ofrecer los derechos televisivos, aunque “no a cualquier precio”. Es decir, que la teleco no hará locuras porque sea la proveedora de las imágenes de LaLiga.
De hecho, el ejecutivo de la filial española defendió la política de otras compañías como la de Vodafone, que desde hace dos años no emite el fútbol por los altos costes que generaban. “Debemos dar el valor al fútbol que tiene hoy”, aseveró durante su intervención en Tecnodesayunos, promovido por el diario Expansión.
A pesar de las dudas, el fútbol sigue siendo un buen aliado para su oferta televisiva y Gayo dejó claro que las audiencias responden a las expectativas, a pesar de la era de estadios cerrados y sin gente en las gradas.
Diversas fuentes del sector narran a este periódico que LaLiga lleva meses preparando el terreno para dar cobijo a compañías como Amazon, que ya llegó a un acuerdo con la patronal para emitir el fútbol en Reino Unido, Dazn o Netflix.
“Javier Tebas sabe que tienen un potencial económico muy superior al de las telecos puesto que éstas deben diversificar inversiones mientras que las OTT acumulan miles de millones en ingresos para producir y comprar derechos de series, películas y, ahora, deporte”, relatan.
Las mismas voces consultadas explican que “tanto LaLiga como las diferentes operadoras están jugando su propio partido” ya que la patronal del fútbol “quiere rentabilizar el fútbol post pandemia lo máximo posible” y el sector teleco “desea seguir emitiendo” el deporte rey, pero “no a cualquier precio”.
Guerra fría con Orange
Con Vodafone en fuera de juego tras su negativa a ofrecer el fútbol español y el europeo e hipotecarse con una factura demasiado alta, Orange y Telefónica son las dos grandes operadoras que, a priori, realizarán una oferta para adquirir los derechos televisivos.
En la actualidad, la cadena gala tiene un acuerdo con la española para emitir tanto LaLiga como la Champions League, ya que Telefónica está obligada a ofrecer los derechos a terceros para no cumplir con la ley antimonopolio.
Orange también criticó el sistema por el cual tiene que pagar a Telefónica por tener el fútbol en su plataforma puesto que debe abonar en función de todos los abonados en TV y no de los clientes que escogen el paquete del deporte rey. Además, ya avisó que tampoco hará locuras para emitir el año que viene y ni para realizar nuevas pujas.
Con todo, el presidente de Telefónica España aseguró que “no le consta” que Orange quiera dejar de emitir el fútbol. Fuentes de la compañía aseguran que no se teme porque la teleco gala no negocie la temporada que viene por los derechos puesto que, de no llegar a un acuerdo, “los abonados de Orange que deseen ver el fútbol podrán cambiarse a Movistar”.
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