Plus Ultra obtendrá un montante diez veces superior al patrimonio total de la empresa por parte de la SEPI. La compañía, declarada por parte del Gobierno como "estratégica", va a recibir una inyección de 53 millones de euros para afrontar la crisis económica derivada de su negocio.

Este importe es muy superior a la realidad que reflejan sus cuentas ya que la sociedad posee un patrimonio neto de 5,84 millones de euros, según se refleja en las cuentas depositadas en el registro mercantil y a las que este medio ha tenido acceso. Esta cifra se eleva hasta los 12,14 millones de euros ya que contrajo un préstamo participativo de algo más de seis millones de euros que “computará como patrimonio neto a efectos de reducción de capital”, y dado el caso “a liquidación de sociedades”, tal y como explica la propia Plus Ultra.

De hecho, ese préstamo hace que no entre en causa de disolución ya que el fondo de maniobra que tiene es de 5,7 millones de euros negativos. Es decir, de no firmar ese acuerdo la aerolínea no tendría recursos para seguir desarrollando su actividad. La aerolínea firmó el préstamo con Panacorp el 22 de diciembre de 2017.

De no firmar ese acuerdo la aerolínea no tendría recursos para seguir desarrollando su actividad"

Rescate en agosto

A pesar de que ha sido en marzo cuando el Gobierno ha dado luz verde a la inyección de capital a la empresa del sector turístico, el auditor de sus cuentas ya conocía en agosto que tenía intención de presentar dicha solicitud.

Llama la atención que, a pesar de que sus cuentas anuales aún no estaban cerradas (faltaban seis meses para su finalización de ejercicio fiscal) ya se valoraba la activación de la solicitud para acceder a los 53 millones de euros por parte de la SEPI. “La empresa a fecha de formulación de estas cuentas va a recurrir al mecanismo de ayuda para empresas estratégicas a través del Fondo de Apoyo a la solvencia gestionado por la SEPI ,creado por el artículo 2 del Real Decreto Ley 25/2020 de 6 de julio y desarrollado por la Orden PCM/679/2020, de 23 de julio”, explican sus auditores.

10 años en pérdidas

Por otra parte, aunque el Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas indica que este va dirigido a “compañías no financieras afectadas por la pandemia del Covid-19”, lo cierto es que la aerolínea lleva más de diez años en pérdidas. Es decir, que aunque la situación del sector aéreo ha sido especialmente complicada durante el último año, Plus Ultra ya pasaba dificultades económicas desde hace una década. Según las últimas cuentas de Plus Ultra depositadas en el registro mercantil, a cierre de enero de 2020, el resultado fue de 2,7 millones de euros en negativo.

En el ejercicio anterior, la compañía había cerrado con un saldo negativo de 2,1 millones de euros y en 2018 el resultado fue de -6,7 millones de euros. En los años anteriores y desde 2011, Plus Ultra ha cerrado todos sus resultados anuales en negativo, pese a facturar 55 millones de euros en 2018, 63,5 millones en 2019 y 94 millones hasta enero de 2020.

Desde el Gobierno no especifican cuáles han sido los criterios que han llevado a aprobar el rescate de la SEPI para Plus Ultra. Sin embargo, mencionan el número de empleados de la compañía que asciende a 345. Así, hasta el momento, la aerolínea es la empresa para la que se ha aprobado este tipo de financiación con menor número de empleados. Duro Felguera cuenta con 683, Air Europa con 3.491 y la alianza que supondrá Ávoris tendrá unos 6.400 empleados.

Con todo, fuentes del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo indican que “Plus Ultra cumple los requisitos establecidos por el Consejo Rector del Fondo de Solvencia” y añaden que se trata de “una empresa española. Es una empresa estratégica. Es una aerolínea y contribuye a un sector clave para la economía española como es el turismo. Genera 345 empleos directos y 2.500 indirectos”.

Requisitos legales

Para acceder al Fondo, la orden que regula los requisitos fija que las empresas deben tener domicilio social y principales centros de operaciones situados en España. Además, no pueden ser consideradas “en crisis” a fecha de diciembre de 2019 ni haber solicitado un concurso voluntario o haber sido declaradas insolventes. Las compañías beneficiarias deben justificar que si no reciben ayuda de la SEPI tendrían “graves dificultades para mantenerse en funcionamiento”.

En este sentido, Plus Ultra debe haber justificado que ante un eventual cese de actividades existiría un “elevado impacto negativo” sobre la actividad económica o el empleo a nivel regional o nacional; también debe haber presentado un informe de viabilidad a medio y largo plazo y una previsión de reembolso del apoyo estatal.

Para obtener financiación pública a través del Fondo, las empresas beneficiarias tienen que estar al corriente de pagos a Hacienda y a la Seguridad Social y debe estar justificado su papel estratégico, algo que sí ha considerado el Gobierno pero sobre lo que no se han aportado más datos en el caso de Plus Ultra.