La industria alimentaria ha conseguido sortear la crisis sanitaria mejor que otros sectores, pero no ha logrado librarse de los efectos de la pandemia. Pese al repunte del consumo en los hogares, su facturación cayó un 5,3% durante 2020.
Según el informe anual de la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), la producción real del sector ha sumado 129.854 millones de euros; un retroceso que pone punto y final a seis años de crecimiento continuado.
La patronal señala las restricciones impuestas en el sector de la hostelería y a la paralización de la actividad turística como un lastre a la producción de la industria alimentaria. Sin embargo, el sector ha conseguido mantener su caída por debajo de la media de la economía en su conjunto (11%).
Las mayores pérdidas se anotan de manera señalada en los productos más ligados al turismo y a la hostelería y no han podido ser amortiguadas por el incremento del 16,15% de la demanda en las casas. El alza doméstica no logró compensar las caídas provocadas por el cierre de bares y restaurantes y el frenazo turístico que ahora empieza a recuperarse.
Lo que también crecieron fueron las exportaciones, con un repunte del 4,4%, hasta los 33.945 millones de euros respecto a 2019. Especial importancia tiene en este ámbito el aumento de la demanda de productos cárnicos por parte de China, que en la clasificación general se sitúa como segundo socio comercial de España.
Al margen del efecto coyuntural de la demanda del gigante asiático, "las exportaciones de alimentos y bebidas españoles sí acusan las restricciones a la movilidad y la adaptación de la actividad internacional al nuevo contexto, así como los escenarios de incertidumbre que han seguido marcados por el brexit y el impacto ocasionado por los aranceles estadounidenses", remarca el informe.
Pérdida de empresas
Por otro lado, se han perdido unas 200 empresas dentro del tejido industrial de la alimentación y bebidas con respecto a 2019, afectando sobre todo a pequeñas compañías. A nivel de empleo, la cifra de afiliados a la Seguridad Social cayó un 1,1%, con 431.800 trabajadores directos.
Asimismo, el informe destaca una evolución muy favorable en la recuperación de trabajadores de los ERTE, con una reducción del 82,8% de los empleados protegidos por dicho mecanismo entre mayo y diciembre. En mayo se acogieron 37.675 trabajadores de la industria de la alimentación y 8.547 del segmento de bebidas. Actualmente quedan unos 8.000 trabajadores acogidos a un ERTE.
Por otro lado, la industria de alimentación y bebidas ha pedido al Ejecutivo que se acelere el ritmo de vacunación y confían en poder ayudar con la vacunación de los trabajadores de la industria a través de las mutuas, tras el acuerdo entre la CEOE y el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 El experto que cree que los humanos podríamos vivir 20.000 años
- 2 ¿Cuál es el Mejor Magnesio para los músculos? Estas son las 10 mejores marcas en 2024
- 3 España, Francia y Marruecos frente a la justicia europea en el Sáhara Occidental
- 4 Y en el caos, a Sánchez lo persiguen nazis con escoba
- 5 Quién es Rubén Gisbert, colaborador de Íker Jiménez
- 6 La Confederación Hidrográfica no emitió alertas tras detectar que el caudal del Poyo se multiplicó por nueve por no ser su competencia
- 7 El Barranco de El Poyo acumulaba 99 inundaciones previas y constaba como área de alto riesgo de inundación
- 8 El Gobierno trata de desmontar las "mentiras" de Mazón sin entrar al combate directo
- 9 Lo de Valencia no corre prisa: "Si quieren ayuda, que la pidan"