Sacyr avanza en su apuesta estratégica para crecer en el negocio de las concesiones, con Italia como mercado prioritario dentro del continente europeo. La compañía constructora que dirige Manuel Manrique se ha adjudicado este lunes un conjunto de cinco tramos de autopistas en los alrededores de Turín, con un volumen total de negocio de 3.700 millones de euros.

La empresa gestionará los 320 kilómetros de asfalto mediante el consorcio conformado por Fininc y Sacyr (SIS). Y tras una inversión de 800 millones en mejoras (con diseño y ejecución de las obras), generarán una cartera de ingresos por peajes de 2.900 millones a lo largo de los 12 años que durará la concesión adjudicada por el Ministerio de Infraestructuras y Transportes italiano.

Las infraestructuras que gestionará tienen un carácter estratégico para las conexiones de la parte norte del país, pues permiten comunicar Turín con otros grandes núcleos urbanos de una de las zonas con más alta densidad industrial del país transalpino.

Este nuevo contrato -remarcan desde la compañía- es "muy relevante" y le permite avanzar en sus objetivos de crecimiento en el país, calificado como un mercado prioritario en Europa dentro del Plan Estratégico que ha diseñado hasta 2025.

El logro anunciado este lunes se suma a otras grandes infraestructuras viarias. Por una lado, la Pedemontana-Veneta (94 kilómetros y 68 de vías accesorias), que tiene prevista una inversión constructora de 2.600 millones. Actualmente, esta vía situada en el noreste de Italia tiene actualmente algunos tramos operativos.

Se está a la espera de que en cuestión de semanas se produzca la firma del contrato de la A-3

Asimismo, están a la espera de que en cuestión de semanas se produzca la firma del contrato de la A-3, otra de las grandes infraestructuras ya adjudicadas y que discurre entre Nápoles, Pompeya y Salerno.

A través del consorcio SIS, en enero logró hacerse con la construcción de la SS 340 "Regina" variante Tremezzina, al norte de Italia. La vía tiene un presupuesto de 388 millones de euros y cinco años de plazo para su ejecución. Por otro lado, la también participa en la remodelación del hospital Policlínico, Mangiagalli y Regina Elena de Milán (155 millones).

Mejora del Ebitda

En el primer trimestre de este año, Sacyr se ha anotado un beneficio neto de 26 millones de euros, lo que representa un 20,6% menos que el año pasado, cuando contabilizó los resultados extraordinarios obtenidos por la venta de la autopista de Guadalmedina.

Por contra, ha logrado mejorar diferentes parámetros en este mismo espacio de tiempo como su resultado bruto de explotación (Ebitda) que sube un 17%, o su cifra de negocios que sube otro un 7%, hasta los 1.057 millones.

Imagen de una de los tramos de carretera que gestionará con la concesión. Sacyr

Tras el anuncio del megacontrato, las acciones de la compañía han repuntado este lunes en Bolsa. Horas antes de anunciar el viernes el descuento del pago del dividendo, la empresa se volvió a quedar el jueves a las puertas de entrar en el Ibex-35.

El Comité Asesor Técnico del índice decidió mantener sin cambios la composición del mismo. Entre los candidatos apuntados por los analistas para incorporarse estaban firmas como la papelera Ence, la propia Sacyr o la compañía Logista. En la compañía, sin embargo, creen que será cuestión de tiempo que acaben accediendo al selectivo.

Sacyr, que aún no ha tomado una decisión sobre su participación en Repsol, acometió en el marco de su plan estratégico 2015-2020 ya acciones para diversificar su modelo de negocio, intentando buscar cada vez más ingresos estables y predecibles, provenientes del ámbito concesional mediante contratos de larga duración.

Por mercados, al margen de Italia y España en territorio europeo, Sacyr tiene como prioritarios en Latinoamérica a Chile y Colombia, mientras que en el mundo anglosajón se centra en Estados Unidos, Canadá, Australia y Reino Unido. Asimismo, como mercados de especial interés para la compañía están Brasil, Perú, Portugal, México y los países nórdicos.