Con buenas palabras, pero tremendamente duro. Así se ha mostrado el presidente ejecutivo de Prisa Joseph Oughourlian, y fundador del máximo accionista de Prisa Amber Capital, durante la junta de accionistas de la compañía. El directivo, que ha conseguido el apoyo de los grandes accionistas como Vivendi y Telefónica para acometer los cambios que planeaba durante los meses anteriores, ha querido pasar página a la antigua gestión “para entrar en una nueva era”.

Dicha gestión ha sido muy criticada por el máximo mandatario del grupo y ha criticado duramente a antiguos accionistas -sin citarlos explícitamente-  y la gestión de diversos miembros del antiguo consejo de administración. Oughourlian mantenía una relación tensa con Ana Botín, que desapareció de Prisa a finales de año tras la marcha de Javier Monzón en el organigrama de la editora de El País, Cinco Días o Cadena Ser. 

En este sentido, el presidente ha recalcado que el alto endeudamiento que aún tiene la compañía se debe a la gestión anterior y que se deben “pedir responsabilidades por las causas” por las que se ha llegado hasta ese punto. No obstante, Oughourlian ha sacado pecho de sus seis años en la cotizada y asegura que “siempre ha sido su objetivo rebajar la deuda”, a pesar de que “no siempre era compartido con otros miembros del consejo”. Además, ha dejado claro que se están pagando “errores pasados” a consecuencia de las decisiones “erróneas” cometidas.

Estas políticas han llevado a la deriva a la cotización de la compañía -con pérdidas del 68% durante el último lustro- a juicio del máximo mandatario, quien ha catalogado de “desastre” la evolución del precio de los títulos sobre el parqué español.

Por eso, el presidente quiere cambiar el rumbo del conglomerado informativo y ha relatado los importantes hitos que han llegado bajo su gestión, abrazando la irrupción de Vivendi en el capital social, ya que es un accionista industrial de gran reputación y con una gran visión del negocio. 

“Con su inversión, Vivendi reconoce el valor y el potencial de los activos y marcas de Prisa; y proporciona la fuerza y la seguridad necesarias para el proyecto futuro del grupo. o Hemos tenido cambios de estructura organizativa: con la creación de dos unidades de negocio para maximizar el valor de los activos”, ha relatado.

Por todo ello, Oughourlian aseguró que “2021 marcará un hito en la vida de Prisa”. El presidente aseguró que “pondrá todo su empeño en que en la nueva etapa que hoy comenzamos seamos capaces de recuperar los grandes éxitos, sociales y económicos, que siempre han acompañado”.

Nuevos cambios en las estructuras

Los accionistas de Prisa han respaldado, con más del 99% de votos a favor de los votos, los nuevos cambios estructurales que diseñó el nuevo equipo directivo. Así, Prisa contará con dos nuevas divisiones (Medios y Educación) y se aumentará a 14 miembros el Consejo de Administración.

También se han aprobado los nombramientos por cooptación que se anunciaron el pasado mes de febrero. Rosauro Varo, Javier Santiso y María José Marín serán ratificados como consejeros independientes. Además, Manuel Mirat y Carlos Núñez han obtenido la aprobación definitiva como consejeros ejecutivos, se han aprobado las nuevas políticas de remuneraciones y las cuentas de 2020.

Mirat hace balance

Por su parte, Manuel Mirat, hizo un balance de los tres últimos ejercicios como consejero delegado del grupo. “Estos últimos años han sido muy intensos y gratificantes porque, gracias al esfuerzo de todos, hemos reflotado y asentado Prisa, y hemos puesto las bases de un futuro más que esperanzador”, aseguró. 

El directivo también recordó a los presidentes que han confiado en él, a Juan Luis Cebrián, Manuel Polanco, Javier Monzón y Joseph Oughourlian. “Gracias a ellos y a los consejos de administración que han presidido estos años, por la confianza que siempre me han mostrado”. También “al magnífico grupo de profesionales y de los diferentes equipos directivos que me han acompañado”.