Bankinter cerró el primer semestre del año con un beneficio de 1.140 millones de euros que incluye una plusvalía después de impuestos de 895,7 euros por la diferencia entre el valor contable de Línea Directa y el valor de su salida a bolsa, en abril.

Sin tener en cuenta este importe, el resultado de la entidad sería de 244,5 millones de euros, lo que supone un incremento del 124,1% con respecto al mismo periodo de 2020. Esta cifra incluye el negocio de Línea Directa durante los cuatro meses que permaneció en el banco.

Recogiendo únicamente el resultado de la actividad bancaria, Bankinter cerró el semestre con un beneficio antes de impuestos de 287,6 millones de euros, frente a los 61,8 millones del primer semestre de 2020 y frente a los 344,8 millones del mismo periodo de 2019, aunque en este caso se incluía un apunte extraordinario de 57 millones procedentes de la operación de adquisición de EVO Banco.

En cuanto a las principales ratios, Bankinter alcanzó una rentabilidad sobre recursos propios (ROE) del 9,5%, frente al 7,6% de hace un año. La entidad explica que incluye el resultado recurrente de Línea Directa durante los cuatro primeros meses del año. En términos de solvencia, la ratio de capital CET1 fully loaded en el 12,2%, superior a la exigida por el BCE, que es del 7,68%.

Por su parte, la ratio de mora mejora en comparación con la de hace un año, hasta el 2,34%, con una cobertura del 62,5%. En cuanto a la liquidez, Bankinter mantiene un gap comercial negativo, con una ratio de depósitos sobre créditos del 104,4%.

Márgenes

Bankinter logró mejorar sus márgenes en este periodo. El margen de intereses fue de 639,4 millones de euros, siendo un 4,4% superior al del mismo periodo de 2020. El margen bruto suma en el mismo periodo 914,7 millones de euros, un 6% más que al 30 de junio de 2020. En total, los ingresos por comisiones netas ascienden a 265 millones de euros, con un crecimiento respecto al mismo periodo de 2020 del 9%.

En cuanto al margen de explotación antes de provisiones concluye este primer semestre en 504,1 millones de euros, con un crecimiento del 7,3%. Los costes operativos se incrementan un 4%. En cuanto a la ratio de eficiencia acumulada se reduce hasta el 44,9% frente al 45,6% de hace un año.

Áreas de negocio

El banco da cuenta de la buena actividad comercial durante el semestre. Así, la banca privada alcanzó un patrimonio bajo gestión de 47.000 millones de euros, un 21% por encima de la cifra de hace un año. El patrimonio neto captado en los primeros seis meses del año es de 1.700 millones. En banca personal, alcanzó los 28.400 millones en gestión, un 20% más que en 2020 y el patrimonio neto nuevo fue de 1.600 millones. También creció un 24% el saldo depositado en cuentas nómina, de 14.200 millones de euros.

La banca de inversión aportó al margen bruto 44 millones de euros, un 27% más que hace un año. Por su parte, el negocio de Consumo, operado por Bankinter Consumer Finance en España, Portugal e Irlanda, mantiene un crecimiento más moderado, dado el impacto negativo que sigue ejerciendo sobre esta actividad la todavía inestable situación económica y las restricciones al ocio y a la movilidad. No obstante, la cartera de inversión experimenta un crecimiento del 9% año contra año, hasta los 3.100 millones de euros.

El negocio de Empresas contribuye al margen bruto con un 29% de los ingresos. La cartera de inversión crediticia empresarial ha cerrado este primer semestre en 28.900 millones de euros.

Récord hipotecario

En actividad hipotecaria, Bankinter logró alcanzar los 3.000 millones de euros en nueva producción, casi el doble que en 2020. El banco detecta "una firme reactivación de este mercado". Además, se consolida la tendencia del tipo fijo y un 72% de sus hipotecas son así.

La cartera supera por primera vez los 30.000 millones de euros, con un crecimiento en España, sin tener cuenta EVO, del 5,8%, mientras que
el sector, con datos a mayo del Banco de España, tan solo creció el 0,1%.